Estrasburgo investigar¨¢ si Espa?a vulner¨® el derecho al honor de Mas

Tras los sinsabores por los malos resultados del 20-D, y con el futuro pol¨ªtico pendiente de un hilo, Artur Mas recibi¨® ayer una buena noticia: la justicia europea investigar¨¢ si Espa?a ha vulnerado su derecho al honor. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), con sede en Estrasburgo, ha admitido a tr¨¢mite el recurso que Mas interpuso contra el carpetazo a la causa de los informes ap¨®crifos. En 2012, el presidente se querell¨® por injurias y calumnias contra el diario El Mundo por publicar un borrador policial que le atribu¨ªa el cobro de comisiones.

La juez de instrucci¨®n, la Audiencia de Madrid y el Tribunal Constitucional archivaron la causa y concluyeron que los periodistas actuaron ¡°de manera razonable en la comprobaci¨®n de la veracidad de los hechos¡±. Mas, sin embargo, recurri¨® a Estrasburgo por vulneraci¨®n del derecho fundamental a la intimidad personal y al honor con otro argumento: la justicia espa?ola no hab¨ªa investigado de forma suficiente las ¡°circunstancias¡± que llevaron a publicar ese borrador, lo que le gener¨® ¡°indefensi¨®n¡±.

En plena campa?a para las elecciones catalanas de 2012 ¡ªen las que Mas plante¨®, por primera vez, la necesidad de celebrar un refer¨¦ndum sobre la independencia¡ª El Mundo public¨® el contenido del borrador. El documento, an¨®nimo, acusaba a Mas y a su antecesor, Jordi Pujol, de cobrar comisiones procedentes del Palau de la M¨²sica y depositarlas en cuentas en Suiza. La existencia del supuesto informe no fue reconocida por el juez y el fiscal del caso Palau y ni siquiera por el Ministerio del Interior o la polic¨ªa.

Mas (y tambi¨¦n Pujol) se querellaron contra la empresa propietaria del diario y contra los dos periodistas que firmaban la informaci¨®n. Tras el fracaso de la querella, y ya en medio del esc¨¢ndalo por su fortuna oculta, Pujol desisti¨® de recurrir al TEDH. Mas sigui¨® adelante. La decisi¨®n de Estrasburgo es poco habitual ¡ªapenas admite el 2% de los recursos que recibe¡ª e implica, de momento, que el Gobierno espa?ol tendr¨¢ que hacer alegaciones a la demanda. El caso podr¨ªa acabar con una condena al Estado, pero en ning¨²n caso permitir¨ªa reabrir la querella inicial por injurias.