La joya barcelonesa del Hermitage

A falta de noticias que permitan saber si el proyecto del Museo del Hermitage en Barcelona sigue adelante, en qu¨¦ fase est¨¢ y d¨®nde se ubicara; si se construir¨¢ aprovechando unas antiguas naves en desuso o se construir¨¢ un edificio nuevo en un solar junto al mar; llega la noticia de que la presencia barcelonesa en el museo ruso de Sant Petersburgo viene de antiguo. Tanto, como desde 1925, a?o en la que est¨¢ documentado el ingreso en los fondos de este monumental museo de una pieza excepcional de procedencia barcelonesa; un cop¨®n que lleva la marca de un obrador barcelon¨¦s junto a los escudos de uno de los promotores art¨ªsticos m¨¢s importantes de Catalu?a, en concreto el conde de Urgell Pere II, uno de los mayores mecenas del arte del siglo XIV que supo rodearse de artistas de primer nivel y de importantes obras de arte, solo superado por miembros de la casa real. La pieza, de plata sobredorada de 52 cent¨ªmetros de altura, in¨¦dita hasta ahora dentro de la bibliograf¨ªa espa?ola y solo citada en la rusa, pero que no la relacionan con el famoso conde, ser¨¢ el protagonista de la conferencia El conde Pere II de Urgell (1348-1408) y las artes, que pronunciar¨¢n esta tarde (Institut d¡¯Estudis Catalans, 19 horas) sus descubridores, Albert Velasco, conservador del Museo de Lleida y Francesc Fit¨¦, profesor de Historia del Arte Antiguo y Medieval de la Universitat de Lleida.

¡°De las alrededor de quince piezas similares que se conocen, entre copones y relicarios, muchos de ellos desaparecidos, me atrever¨ªa a asegurar que es la mejor y uno de las que mejor estado de conservaci¨®n presenta¡±, seg¨²n Velasco. Para este investigador, Pere II fue un gran amante de joyas ejecutadas con materiales nobles como el oro y la plata, ¡°decorados con perlas y piedras; unos objetos que muchas de las veces eran objeto de regalos diplom¨¢ticos que ten¨ªan como misi¨®n prestigiar a quien los regalaba, as¨ª como fortalecer las relaciones y alianzas pol¨ªtico-familiares¡±.

La pieza, como muchas de las obras de arte dispersa y depositada en museos de todo el mundo, ha tenido una vida convulsa. ¡°Se sabe, a partir del expediente del Hermitage, que en 1901 estaba en Londres, en la colecci¨®n de T.D. Gibson Carmichael; que en 1905 el anticuario Seligman la vendi¨® al Museo de la Escuela Stieglitz de Dibujo T¨¦cnico de Sant Petersburgo y que en 1925 ingres¨® en el Hermitage¡±. El cop¨®n, prosigue Velasco, ¡°proceder¨ªa de alguna parroquia catalana, seguramente leridana, a la que la deb¨ªa donar el conde Pere, pero ser¨ªa una importante, porque el cop¨®n es excepcional¡±. No es el ¨²nico caso conocido. Pere II tambi¨¦n don¨® al famoso monasterio de Sijena, en Huesca un portapaz como agradecimiento a que su hija hab¨ªa procesado all¨ª; la pieza, que fue robada en 1991 de una caja fuerte del MNAC, conten¨ªa una peque?a reliquia de la t¨²nica de Cristo.

Para los investigadores no hay duda del origen barcelon¨¦s de la pieza, m¨¢s all¨¢ del punz¨®n donde se puede leer el nombre abreviado de la ciudad, ¡°por la tipolog¨ªa caracter¨ªstica de estas producciones de los siglos XIV y XV, en la que destacan las tres partes diferenciadas, la base, el eje central y el recept¨¢culo eucar¨ªstico que siempre presenta dos brazos serpenteantes que se rematan con ¨¢ngeles alados de calidad escult¨®rica, que sostienen candelabros, que act¨²an de custodios¡±. En el interior del recipiente los investigadores han localizado una ¡°A¡±, ¡°una especie de firma del artista que cre¨® la pieza¡±, pero no disponen de m¨¢s informaci¨®n.

La pieza, explica Velasco, nos sit¨²a en el ambiente de lujo y fastuosidad que envolvi¨® al conde y a su mujer Margarida de Montferrato durante toda su vida y que tuvo el castillo palacio de Form¨®s, en Balaguer, como epicentro, que fue arrasado en 1413 por Ferr¨¢n de Trast¨¢mara, elegido rey el a?o anterior que se enfrent¨® a sus opositores, entre ellos, Jaume el Desdichado, hijo de Pere II y Margarida, al que venci¨® despu¨¦s de tres meses de asedio.

El cop¨®n, hoy por hoy no est¨¢ en Sant Petersburgo. Ha viajado hasta Amsterdam para participar en la exposici¨®n Spanish Masters from the Hermitage and Portrait Gallery of the Golden Age, que puede verse hasta el 29 de mayo en la sede holandesa del museo ruso. Ser¨ªa de esperar que entre las piezas que viajen a Barcelona cuando el Hermitage abra sus puertas en esta ciudad, est¨¦ el recuperado cop¨®n y as¨ª regrese a la ciudad que lo cre¨® hace m¨¢s de seis siglos.