Evocador agosto irland¨¦s del 36
El director Ferran Utzet rescata en la Biblioteca de Catalunya de la mano de la Perla 29 ¡®Dansa d'agost¡¯, la hermosa y melanc¨®lica obra de de Brian Friel
"Cuando miro hacia atr¨¢s a ese verano de 1936 regresan a m¨ª diferentes tipos de recuerdos¡" Sonido de gaitas, silencios que hablan m¨¢s que las palabras, miradas hacia un fr¨¢gil equilibrio rural y un baile liberador. Son las sensaciones de Michael, un irland¨¦s de 40 a?os, al enfrascarse en un viaje a trav¨¦s de su memoria hacia un verano de su infancia. Cuando ten¨ªa 7 a?os pas¨® un agosto en la casa familiar de un pueblo de Irlanda. El relato de esos d¨ªas son el hilo conductor del nuevo montaje de Dansa d'agost, de Brian Friel, que se estren¨® el martes en la Biblioteca de Catalunya de la mano de La Perla 29. "Es la obra central de nuestra temporada", explic¨® Oriol Broggi, responsable del colectivo.
El montaje describe con ternura y nostalgia la vida de cinco hermanas solteras de entre treinta y cuarenta a?os. Representa la "captura un trozo de vida", en palabras del director, Ferran Utzet, de una familia que vive en un mundo rural abocado a su desaparici¨®n. La industrializaci¨®n, las duras reglas morales y la concepci¨®n de la religi¨®n que se autoimponen estas mujeres van dej¨¢ndolas sin asideros. Con Dansa d'agost Utzet y La Perla 29 cierran una trilog¨ªa irlandesa que empez¨® en 2011 con La Presa y continu¨® en 2014 con Traduccions / Translations.
Utzet recupera la obra m¨¢s exitosa de Friel tras casi dos d¨¦cadas sin apenas representarse en Catalu?a. De hecho, muchos espectadores recordar¨¢n el Dansa d'agost programado en 1993 en el Teatre Lliure, con direcci¨®n de Pere Planella y un elenco de grandes actores; Muntsa Alca?iz, Anna Lizaran, Emma Vilarasau o Ramon Madaula. El fallecido Pep Montany¨¨s interpretaba el papel de Michael en uno de sus mejores papeles actorales.
La obra, en cartel hasta el 1 de mayo, "relata el triste desmembramiento de una familia que intentaba ser feliz aisl¨¢ndose. Hay tensiones subterr¨¢neas, una casi renuncia a la vida exterior", detalla Utzet, quien describe el texto como "naturalismo po¨¦tico". Las mujeres que viven juntas en la casa del peque?o pueblo de Bally Beg ¡ªuna localidad imaginaria recurrente en las obras de Friel¡ª son la madre y las t¨ªas de Michael, que encarna el actor Albert Triola.
De las cinco, solo trabaja fuera del domicilio la mayor, Kate (M¨®nica L¨®pez), que es maestra en la escuela de la parroquia. Agnes (Nora Navas) cose guantes desde el hogar, Maggie (Marta Marco) y Chris (Carlota Olcina) son amas de casa, mientras que Rose (M¨¤rcia Cister¨®) tiene una leve disminuci¨®n ps¨ªquica.
Chris, la madre de Michael, sigue soltera como sus hermanas porque el padre de su hijo, Gerry Evans (Oscar Mu?oz), es un trotamundos encantador y alocado que nunca se ha ocupado de la educaci¨®n del ni?o.
El agosto pl¨¢cido se ve trastocado por la llegada de cambios veloces y no deseados. Los peque?os acontecimientos suponen una desaz¨®n para todos. Y no habr¨¢ marcha atr¨¢s: Gerry anuncia que va a alistarse a las Brigadas Internacionales para luchar en la Guerra Civil en el bando republicano. El hermano de las mujeres, el Padre Jack (Ramon Vila), regresa de ?frica despu¨¦s de 20 a?os cuidando leprosos. Llega a la casa envejecido tras contraer la malaria y cargado de tradiciones paganas. A Rose, adem¨¢s, un d¨ªa un chico cr¨¢pula se la lleva al lago. Y de fondo, como un personaje m¨¢s, resuena entrecortada y vacilante una nueva ventana al mundo. Es una radio Marconi que han adquirido recientemente y hace enloquecer a las hermanas.
"Hay un juego teatral porque el autor se anticipa y explica el futuro de estas mujeres, de manera que viven el presente pero el espectador ya sabe que est¨¢n predestinadas a vivir amargadas", opina Marta Marco. Utzet dice que la casa, a pesar de que la obra transcurre en Irlanda, podr¨ªa ubicarse en Reus o Girona. "El pub podr¨ªa estar en el Pirineo", a?ade el director, que ha incorporado al decorado objetos de su abuela.
Toda la compa?¨ªa viaj¨® a Irlanda en enero para visitar los lugares en los que se inspir¨® el autor para escribir la obra. A diferencia de textos con los que est¨¢ emparentada Dansa d'agost, como La casa de Bernarda Alba, aqu¨ª no hay ning¨²n impedimento exterior que frene a las mujeres para salir adelante. Sin embargo, no son capaces de avanzar.
"Son mujeres encerradas en s¨ª mismas. Tienen una edad y ya no est¨¢ bien visto que salgan¡Hay el miedo a lo extra?o, a lo salvaje", afirma Nora Navas. La prueba es que la mayor de las hermanas proh¨ªbe a las dem¨¢s asistir al acontecimiento del verano, el baile de la Siega. Las mujeres acaban bailando, s¨ª, pero a solas, en casa, a trav¨¦s de la radio, y esta danza simb¨®lica es el mayor recuerdo de Michael.
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