M¨¦dicos p¨²blicos ganan 1,5 millones al vender adjudicaciones sanitarias

El modelo de autogesti¨®n en la sanidad p¨²blica, por el que algunos profesionales se hacen cargo de centros de atenci¨®n primaria mediante sociedades limitadas profesionales (SLP) privadas, se ha consolidado en Catalu?a en los ¨²ltimos a?os con buenos resultados de gesti¨®n, calidad asistencial y satisfacci¨®n de los pacientes. Pero esta iniciativa tambi¨¦n ha acabado por ser un gran negocio para un reducido grupo de m¨¦dicos, seg¨²n revela una investigaci¨®n realizada por EL PA?S. Estos facultativos perciben remuneraciones que llegan a triplicar a las de sus colegas en n¨®mina de la Generalitat y obtienen importantes beneficios (m¨¢s de 1,5 millones en total y hasta 304.000 euros en un caso) al vender sus acciones en unas sociedades que han visto crecer sus beneficios incluso durante los recortes. Las nueve SLP analizadas han acumulado casi 11 millones en beneficios en los ¨²ltimos a?os.

Aunque el peso de las Entidades de Base Asociativa (EBA) ¡ªcomo se han dado a conocer estas sociedades¡ª en la red p¨²blica es peque?o (atienden a poco m¨¢s del 3% de la poblaci¨®n catalana), su papel es relevante porque constituyen el m¨¢ximo nivel de autogesti¨®n ensayado en la sanidad p¨²blica espa?ola. Tambi¨¦n porque introducen el ¨¢nimo de lucro en la atenci¨®n primaria, ya que las SLP permiten el reparto de beneficios entre los socios. A diferencia de las privatizaciones emprendidas por el PP en la Comunidad Valenciana, sin embargo, las SLP s¨ª imponen algunos l¨ªmites: la mayor¨ªa del capital debe estar en manos de los profesionales y ninguno puede poseer m¨¢s del 25% de las acciones.

El an¨¢lisis de las cuentas y otros documentos internos de las nueve EBA m¨¢s consolidadas ¡ªexisten otras cuatro de reciente creaci¨®n o tama?o reducido¡ª revela la gran brecha retributiva que han abierto en la sanidad p¨²blica. Aunque uno de los objetivos de las EBA era mejorar las condiciones retributivas a cambio de que el personal asumiera m¨¢s responsabilidades de gesti¨®n y un cierto riesgo (en la pr¨¢ctica muy limitado), las diferencias alcanzadas se disparan cuando se acerca el foco a los n¨²meros. La remuneraci¨®n de los 60 socios ¡ªcasi siempre m¨¦dicos, aunque tambi¨¦n hay algunos enfermeros¡ª de siete de las nueve EBA estudiadas ha ascendido en los ¨²ltimos a?os a una media de unos 100.000 euros anuales, cantidad que duplica la de sus compa?eros p¨²blicos. Las otras dos no ofrecen estos datos en sus cuentas.

Esta cantidad, sin embargo, es una media que oculta mayores diferencias, fruto de incentivos y complementos salariales introducidos por las SLP. As¨ª, seg¨²n los datos de 2014, los mejores remunerados fueron los nueve socios de la EBA del Poble-sec (barrio de Barcelona), que cobraron 138.000 euros. Destacan tambi¨¦n por su cuant¨ªa los 132.000 euros percibidos en 2013 por los cuatro socios de la Albera (Girona), una de las EBA m¨¢s peque?as con una poblaci¨®n atendida de apenas 7.000 personas y los 198.000 euros percibidos en 2007 por la entonces administradora de la EBA de la Dreta l'Eixample (otro barrio de Barcelona). Otras entidades, como la de Osona Sud (provincia de Barcelona), cuentan con salarios m¨¢s bajos pero complementan los de sus socios v¨ªa dividendos (entre 44.000 y 117.000 euros anuales desde 2010).

10,9 millones en reservas

Las EBA entidades han demostrado una gran solvencia, con unos resultados que han crecido notablemente pese a los duros recortes aplicados por la Generalitat, que redujo desde 2010 en un 15% el presupuesto sanitario. Como estos resultados ¡ªde 940.000 a 2,76 millones de euros anuales¡ª han sido traspasados casi en su totalidad a reservas, las nueve EBA acumulaban un total de 10,9 millones de euros en beneficios no repartidos entre sus socios a finales de 2014.

Este hecho ha disparado el valor de las participaciones de las SLP, algo que tambi¨¦n en este caso ha beneficiado principalmente a un grupo reducido de facultativos. La mayor¨ªa de los socios cuentan con participaciones peque?as y solo son unos pocos ¡ªmenos de 20, seg¨²n fuentes del sector¡ª quienes atesoran porcentajes importantes del capital.

A la espera de lo que decidan hacer las EBA con estas reservas, algunos socios se han llevado su parte de los beneficios al vender sus acciones al abandonar las SLP o jubilarse. En la ¨²ltima d¨¦cada, se han producido una quincena de estas operaciones por un importe total que supera los 1,5 millones de euros. Aunque algunas operaciones son de unos pocos miles de euros, varias han superado los 150.000 y dos rondan los 300.000. Estas cantidades son llamativas si se tiene en cuenta que los socios apenas desembolsaron dinero por las acciones. Los locales y equipos les son cedidos por la Consejer¨ªa de Salud y los mayores gastos son los de constituci¨®n de las y la firma de los avales exigidos (que deben cubrir un 5% la facturaci¨®n anual prevista).

El dinero para pagar a los m¨¦dicos que abandonan las EBA procede de las propias entidades, que son las que les compran las acciones, y tiene por tanto su origen en fondos p¨²blicos. Posteriormente, algunas SLP revenden estas participaciones a nuevos socios mientras otras las amortizan, lo que aumenta el valor de la parte que poseen los socios que se quedan. Estas operaciones han llegado a lastrar los resultados de alguna entidad, como la de Dreta de l'Eixample, que registr¨® p¨¦rdidas un solo a?o en la ¨²ltima d¨¦cada (108.000 euros 2014) al pagar 304.000 euros a una socia que por sus participaciones m¨¢s otros 225.000 de indemnizaci¨®n laboral.

Los buenos indicadores de gesti¨®n de las EBA han sido profusamente dados a conocer en los ¨²ltimos a?os por las propias entidades y el Colegio de M¨¦dicos, de donde han salido varios de sus principales socios. Las EBA logran una buena posici¨®n en todos los indicadores que miden la eficiencia de gesti¨®n, el ahorro en gastos y el grado de satisfacci¨®n de los pacientes. Tambi¨¦n han sido pioneras al introducir programas de prevenci¨®n de la salud y en alg¨²n caso han puesto en marcha iniciativas para atender a colectivos desfavorecidos con servicios no financiados por la sanidad p¨²blica.

Desconocidos son, sin embargo, los datos retributivos y sobre el destino de los beneficios, que nunca han sido hecho p¨²blicos pese a tratarse de entidades casi enteramente financiadas con fondos p¨²blicos ya que aunque algunas EBA tambi¨¦n ofrecen servicios privados, estos no alcanzan un volumen importante en su facturaci¨®n.

Aceba y el Colegio de M¨¦dicos no entran a comentar la cuant¨ªa de las retribuciones de algunos socios de las EBA. ¡°El problema no es que los m¨¦dicos de las EBA cobren m¨¢s, sino que el resto cobran poco¡±, afirma Llu¨ªs Esteve, portavoz del Colegio, que s¨ª aboga ahora por ¡°implantar un c¨®digo de buen gobierno en todas las empresas sanitarias que regule, entre otras cosas, las retribuciones¡±.

Sobre el aumento de los beneficios y el valor de las acciones, Aceba considera que ha sido consecuencia de ¡°las distorsiones que han causado los retrasos en los pagos de la Generalitat¡±, seg¨²n Joan Maria Arenalde, presidente de la entidad. ¡°Esto nos oblig¨® a adoptar medidas de ajuste ante posibles tensiones de tesorer¨ªa, lo que pasado el tiempo ha mejorado notable de los resultados¡±, afirma. Arenalde asegura que la revalorizaci¨®n de las participaciones tambi¨¦n tiene un efecto negativo: ¡°Ahora es m¨¢s caro y por tanto m¨¢s dif¨ªcil dar entrada a nuevos socios. Estamos estudiando como solventarlo. La soluci¨®n debe pasar por ampliar la base de asociados abaratando su entrada en el capital social y que este quede diluido entre m¨¢s manos¡±, a?ade.

"Ventas reprobables"

Aceba no oculta su incomodidad al ser preguntados sobre los beneficios por la venta de las acciones de las SLP. Arenalde admite que es un hecho que ¡°puede ser mal entendido¡± y lo atribuye a ¡°un efecto imprevisto de la buena evoluci¨®n econ¨®mica de las EBA¡±. El Colegio, por su parte, sostiene: ¡°Si estas situaciones se han producido, son reprobables e inadmisibles y van contra nuestra filosof¨ªa¡±, aunque lo cierto es que alguno de sus cuadros ha incurrido en esta pr¨¢ctica.

Aunque minoritario, en el seno del Colegio de M¨¦dicos tambi¨¦n existe una corriente cr¨ªtica con la deriva de las EBA, una de cuyas cabezas visibles es Joan Gen¨¦. ¡°Tendr¨ªan que ser entidades sin ¨¢nimo de lucro, con l¨ªmites retributivos y obligadas a reinvertir los beneficios en el sistema¡±, afirma. ¡°La autogesti¨®n es algo muy positivo y los incentivos son una herramienta ¨²til de gesti¨®n. Pero estas cantidades son inaceptables en un sistema p¨²blico con graves problemas de financiaci¨®n y en el que los recortes se han cebado en los salarios de los profesionales¡±, a?ade.

Gen¨¦ tambi¨¦n considera ¡°perversa la insistencia en vincular siempre las mejoras de eficiencia con el ¨¢nimo de lucro¡±. ¡°Hab¨ªa otras opciones, como las cooperativas, para alcanzar las mismas mejoras de gesti¨®n. Lo ocurrido es fruto de las decisiones tomadas en el pasado por las EBA y el Colegio, que han contado con el benepl¨¢cito de la Generalitat. Existe mucha evidencia cient¨ªfica de los riesgos que para las organizaciones sanitarias tiene la introducci¨®n del ¨¢nimo de lucro¡±, concluye.

Joan Carles March, director de la Escuela Andaluza de Salud P¨²blica, destaca que ¡°las EBA han sido un notable avance en la autogesti¨®n de los profesionales que ha dado buenos resultados asistenciales¡±. Sin embargo, a?ade, ¡°no pueden entenderse estas diferencias retributivas y, a¨²n menos, la privatizaci¨®n de los beneficios de unos equipamientos que son p¨²blicos¡±. March opina que ¡°deber¨ªan ser las comunidades aut¨®nomas que apuesten por este modelo las que regulen estos puntos mediante los contratos, sea cual sea la forma jur¨ªdica utilizada para gestionar los centros¡±.

La Consejer¨ªa de Salud de la Generalitat ha declinado fijar su postura en esta informaci¨®n.

Investigacion@elpais.es