Autopullman Padr¨®s, un okupa de lujo
El Ayuntamiento desaloja a la empresa de autocares, que us¨® de garaje un solar sin permiso municipal durante 34 a?os
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha puesto fin a una de las ocupaciones m¨¢s antiguas de la ciudad de Barcelona. Esta ocupaci¨®n no est¨¢ en Gr¨¤cia, sino en Poblenou, muy cerca de primera l¨ªnea de mar, entre el cementerio y la Rambla del Poblenou. La ocupaci¨®n de este solar, en la esquina de las calles de Fernando Poo y pasaje Aym¨¤, empez¨® en 1982, ahora hace 34 a?os, y acab¨® el pasado mes de marzo. En este caso, el okupa es el due?o de la compa?¨ªa Autopullman Padr¨®s, la empresa que transporta en lujosos autocares a los jugadores del FC Barcelona y del RCD Espanyol.
El nuevo equipo municipal descubri¨® la hist¨®rica irregularidad despu¨¦s de pedir una radiograf¨ªa de todo el territorio para comprobar de cu¨¢ntos espacios dispon¨ªan. Se encontraron con una sorpresa. Autopullman Padr¨®s ha utilizado este espacio desde 1982 sin ser su propietaria y sin tener ning¨²n permiso ni licencia para llevar a cabo esta actividad. Durante todo este tiempo la empresa ha guardado parte de su flota de autocares (entre 30 y 40 veh¨ªculos) en este solar.
En 1983 se inici¨® un proceso de expropiaci¨®n que qued¨® bloqueado hasta 1995, cuando el Ayuntamiento realiz¨® el primer pago y dej¨® el segundo a la espera de que el anterior propietario entregara las llaves y abandonara el espacio libre de cargas y ocupantes. Pese a los requerimientos municipales, lo entrega jam¨¢s se produjo.
Desde 1995, el Consistorio ha intentado desahuciar al ocupante ilegal en diferentes ocasiones , pero nunca ha terminado de cerrar el procedimiento. Diferentes concejales socialistas y convergentes han pasado por el distrito, pero ninguno de ellos se ha amparado en el derecho para recuperar su leg¨ªtima propiedad.
En 2013, a ra¨ªz de quejas de los vecinos por los ruidos y las molestias que provocaban de madrugada estos veh¨ªculos al entrar y salir del garaje, el Ayuntamiento de Barcelona hizo las inspecciones pertinentes y comprob¨® que la actividad de garaje no dispon¨ªa de licencia municipal y, adem¨¢s, estaba ocupando un espacio p¨²blico que se tiene que destinar a zona verde. Se inici¨® un procedimiento de cese de actividad que acab¨® en los juzgados. La sentencia del 3 de marzo de 2015 da la raz¨®n al Ayuntamiento y obliga al precinto del garaje. Sin embargo, la actividad ilegal continu¨® a pesar de la sentencia.
Con el cambio de Gobierno la impunidad de este empresario empieza a agotarse. ¡°Iniciamos conversaciones con Padr¨®s para conseguir que abandonara el espacio por las buenas, puesto que all¨ª est¨¢ prevista una zona verde¡±, explica Josep Maria Montaner, actual regidor de Sant Mart¨ª. Tampoco lo consiguieron. Finalmente, se fij¨® como fecha tope el lunes 23 de mayo de 2016 para ultimar el pago de la expropiaci¨®n y poner fin a la ocupaci¨®n.
Una barraca con un matrimonio
El fin de semana anterior a la fecha de desalojo fijada, los Bomberos y la Guardia Urbana, alertados por los vecinos, se desplazaron hasta el solar y descubrieron que hab¨ªa un equipo de cerrajeros africanos desmontando la estructura met¨¢lica, seg¨²n fuentes municipales. ¡°Lo hac¨ªan sin ning¨²n permiso de obras ni sistemas de seguridad¡±, relata Montaner. Los agentes pararon la operaci¨®n y entraron en el local encontr¨¢ndose con una nueva sorpresa que todav¨ªa hace m¨¢s incre¨ªble esta historia: hab¨ªa una barraca con un matrimonio de 70 a?os viviendo en su interior desde 1992. El matrimonio, en un estado muy precario de salud, ya est¨¢ siendo atendido por los servicios sociales, seg¨²n fuentes municipales.
Finalmente, el 23 de mayo de 2016, Autopullman Padr¨®s abandon¨® la finca y cobr¨® el dep¨®sito pendiente. Consultada por este diario, la empresa de autocares no ha querido hacer declaraciones.
Este espacio est¨¢ afectado por la apertura de la calle Llacuna y la nave de la pol¨¦mica tiene que ser una zona verde. Hasta que esta obra se ejecute, ¡°el espacio se destinar¨¢ de manera provisional a alguna ONG o entidad¡±, seg¨²n el regidor Montaner.
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