¡°No queremos prohibir la actividad privada de los hospitales p¨²blicos¡±

Al consejero de Salud, Toni Com¨ªn (Barcelona, 1971) le han bastado seis meses en el cargo para poner patas arriba el Departamento m¨¢s denostado por los recortes. Es la primera persona que ocupa el despacho noble de la Maternitat (sede del Departamento) sin ser m¨¦dico. Lleg¨® en enero defendiendo que la sanidad catalana precisaba de un pol¨ªtico ¡ªes licenciado en filosof¨ªa y ciencias pol¨ªticas y ejerc¨ªa de profesor en ESADE¡ª para ¡°rehacer el consenso¡± en el sistema sanitario. Y para ello, ha empezado por desandar el controvertido camino de su antecesor, Boi Ruiz, y echar atr¨¢s todas sus pol¨¦micas medidas: ni Consorcio Sanitario de Lleida, ni proyecto VISC+ de venta de datos sanitarios. Adem¨¢s, es el art¨ªfice de lo que autodenomin¨® como la ¡°mayor desprivatizaci¨®n del sistema sanitario¡± al echar de la red hospitalaria p¨²blica a proveedores con ¨¢nimo de lucro. El plan de choque pactado entre JxS¨ª y la CUP, condicionado a la aprobaci¨®n de presupuestos, promet¨ªa inyectar 100 millones de euros y un respiro a un sector extremadamente tensionado por los recortes. Pero todo ha quedado en papel mojado.

Pregunta. No hay presupuestos y por tanto, tampoco plan de choque. ?C¨®mo repercutir¨¢ la pr¨®rroga presupuestaria en la sanidad catalana?

Respuesta. Salud ha perdido 317 millones, pero ahora no hay que lamentarse, sino ver qu¨¦ compromisos previstos podremos hacer aunque no haya presupuestos. Uno claro que no se podr¨¢ hacer es el plan de choque para reducir las listas de espera. Tampoco la inversi¨®n en equipamientos. Y quedar¨¢ muy afectado el plan estrat¨¦gico de investigaci¨®n e innovaci¨®n (PERIS). Pero estamos intentando salvar las inversiones territoriales (Viladecans, Terrassa, Sabadell, Matar¨®), una parte, aunque sea peque?a, del PERIS y toda la oferta de plazas para residentes.

P. ?Habr¨¢ m¨¢s recortes en sanidad?

¡°No se podr¨¢ llevar a cabo el plan de choque para reducir las listas de espera¡±

R. No habr¨¢ m¨¢s recortes porque el presupuesto de 2016 es la pr¨®rroga del de 2015 y estamos delante del mismo esquema de ingresos y gastos. Lo que s¨ª es cierto es que hay unos gastos en 2016 que no se hab¨ªan hecho durante en 2015 [el aumento del 1% del sueldo de los empleados o la subida de tarifas de los hospitales]. Hay que ver c¨®mo se va a reasignar el presupuesto de manera que este gasto adicional tendr¨¢ que compensarse con medidas de ahorro en otro campo.

P. El centro privado Cl¨ªnica del Vall¨¨s abandonar¨¢ la red p¨²blica en verano. ?C¨®mo se articular¨¢ la expulsi¨®n de otros cuatro hospitales con ¨¢nimo de lucro?

R. S¨®lo contaremos con operadores con af¨¢n de lucro en los territorios donde con el resto de proveedores no tenemos suficiente, por ejemplo en Lleida y Girona. All¨ª los hospitales p¨²blicos no podr¨ªan asumir toda la actividad y por eso el contrato con la Ponent y Cl¨ªnica Girona sigue en vigor. En el Hospital General de Catalunya hay que ver qu¨¦ parte de la actividad se puede hacer a trav¨¦s de los proveedores p¨²blicos de la misma zona y se trasladar¨¢ la actividad el 1 de enero. El caso de Sagrat Cor es m¨¢s complejo porque tiene una poblaci¨®n de referencia y hay que ver qui¨¦n se puede hacer cargo de la gesti¨®n de este hospital.

P. ?El Cl¨ªnic, por ejemplo?

R. Habr¨ªa la hip¨®tesis, entre otras muchas, de que el Cl¨ªnic se convirtiese en el responsable de la gesti¨®n del Sagrat Cor. No se trata de pasarle la actividad al Clinic con el mismo personal y presupuesto que tiene, sino ver qu¨¦ proveedor se har¨¢ cargo del Sagrat Cor. El Cl¨ªnic est¨¢ muy cerca de ese hospital y es una posibilidad entre otras.

P. ?Est¨¢ a favor de que los hospitales p¨²blicos hagan actividad privada?

R. No queremos prohibir la actividad privada de los operadores p¨²blicos porque es una fuente de financiaci¨®n a la que no podemos renunciar. En estos momentos hay muchos proveedores p¨²blicos que cuadran su presupuesto gracias a esa actividad privada que hacen. Lo que tenemos que hacer es regularla bien para minimizar todos los riesgos de equidad que esta actividad genera.

P. Barnacl¨ªnic es el paradigma. ?Qu¨¦ va a pasar con ella?

¡°Habr¨ªa la hip¨®tesis, entre otras, de que el Cl¨ªnic asumiese la gesti¨®n del Sagrat Cor¡±

R. Barnacl¨ªnic no es el ejemplo principal por el que mantenemos la actividad privada en los centros p¨²blicos porque qui¨¦n m¨¢s necesita hoy hacer actividad privada son otros hospitales del territorio. Pero en esta pol¨ªtica de mejora de la equidad, una de las medidas que hay que tomar es la conversi¨®n de la figura jur¨ªdica responsable de esta actividad privada en organizaciones sin af¨¢n de lucro.

P. ?Est¨¢ a favor de f¨®rmulas controvertidas como las UGAP o las EBAS en atenci¨®n primaria (AP)?

R. En AP estamos abriendo un proceso de participaci¨®n con profesionales y expertos para poner encima de la mesa un plan estrat¨¦gico de reforma de la AP. Y soy partidario de que, en el marco de la trasposici¨®n de la directiva europea sobre contrataci¨®n de servicios sociales p¨²blicos, la econom¨ªa social tenga preferencia, como la cooperativa de pediatras del Pirineu. La legitimidad social de la econom¨ªa social como operador de un servicio p¨²blico es mayor y por tanto ser¨¢ posible que haya proveedores en AP m¨¢s all¨¢ del Instituto Catal¨¢n de la Salud en la medida que est¨¦n especialmente legitimados.

P. Lleg¨® para rehacer el consenso y estos seis meses se ha dedicado a deshacer las medidas de Boi Ruiz. ?Fue ¨¦l qui¨¦n rompi¨® el consenso?

R. Yo no me lo he planteado en t¨¦rminos de deshacer. Estoy intentando aplicar mis principios y convicciones en las decisiones que tomamos. El consenso ha sido clave para el ¨¦xito de nuestro modelo sanitario. Es verdad que en los ¨²ltimos a?os la disminuci¨®n de los presupuestos y la evoluci¨®n del mapa pol¨ªtico hab¨ªa tensionado este consenso pero ahora es importante rehacerlo.