Jorge Blass, magia y asombro sin compinches
La sala Poliorama programa el espect¨¢culo ¡®Palabra de Mago¡¯
Jorge Blass ha tra¨ªdo a Barcelona su espect¨¢culo Palabra de mago (Poliorama). Jorge Blass es un excelente mago que lleva una honesta campa?a contra el actual abuso por parte de algunos colegas de los compinches (falsos espectadores c¨®mplices del ilusionista). Durante el espect¨¢culo lo dice una vez y claro: no hay compinches. Y me lo creo.
Palabra de mago empieza con un v¨ªdeo en el que David Copperfield, a quien ha vendido un efecto que incluye en el espect¨¢culo, ensalza a su colega espa?ol. No hace falta que Copperfield d¨¦ garant¨ªas de nada porque Blass se gana al p¨²blico ¨¦l solito. Combina t¨¦cnicas que van desde la magia de cerca a la de gran aparato pasando por un juego de cartas que hacen todos los espectadores a quienes, en un porcentaje considerable, les sale bien para pasmo de quien entr¨® en el teatro consider¨¢ndose un muggle en la terminolog¨ªa potteriana (ser humano sin poderes m¨¢gicos). Blass los convoca a quedar fascinados consigo mismos.
El encanto de la, poca, magia de cerca que se practica en el espect¨¢culo provoca una perplejidad comparable al impacto seguro que producen los grandes efectos. Como es l¨®gico, el m¨®vil y la tableta se incorporan al armario de instrumentos m¨¢gicos.
En el repertorio que presenta Blass en Barcelona hay muchos efectos conocidos. Su firma est¨¢ en la versi¨®n que realiza de ellos. La partici¨®n de la mujer se hace en una caja transparente despu¨¦s de proyectar un v¨ªdeo con una peque?a antolog¨ªa de c¨®mo los magos lo vienen haciendo desde principios del siglo pasado.
Puestos a levitar no lo hace solamente la se?orita. Blass la acompa?a en el aire. Y al cl¨¢sico juego de los anillos que se entrelazan y separan le a?ade un efecto de suspensi¨®n de los mismos que construye uno de los mejores momentos de la noche.
En el cap¨ªtulo de reparos, adem¨¢s de mencionar la angustiante estrechez de un pantal¨®n tras un efecto fregoliano de transformismo, hay que citar la trasnochada est¨¦tica, en vestimenta y coreograf¨ªa, que hace lucir a las partenaires con quienes mantiene un rancio mon¨®logo humor¨ªstico.
No estar¨ªa mal introducir un concepto esc¨¦nico m¨¢s integral para que vista un repertorio de trucos que aseguran el asombro incr¨¦dulo del p¨²blico. Hora y media de buena magia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.