Bob Dylan, siempre joven en Catalu?a
La influencia del cantautor premio Nobel de Literatura en la escena catalana empez¨® a finales de los sesenta
¡°Tinc nevera, toca-discos / i una tele amb dos canals, / una aranya gran de ll¨¤grimes / i sillons funcionals.
Els sis-cents vaig canviar-lo / per un nou mil quatre-cents / i a l'estiu vaig a fer bronze / a Lloret.
He comprat un pis a Mandri / amb terrassa i gradulux, / la mam¨¤ t¨¦ cinc parades / al Ninot de llegums cuits".
Tal vez no suenen a palabras de un premio Nobel y, en realidad, no lo son pero as¨ª fue como entr¨® Bob Dylan en este pa¨ªs y as¨ª fue como muchos le o¨ªmos antes de saber quien era. Y no debe de ser casual que fuera Pere Quart, poeta de solvencia contrastada y alejado de cualquier sospecha, el que en 1966 adapt¨® (a su manera, no se puede hablar ni siquiera de par¨¢frasis) una canci¨®n del Nobel de Minnesota: su Tombstone blues se convirti¨® en el Roman?o del fill de v¨ªdua que Els Tres Tambors grabaron en su primer disco para Belter. Esta es la irrupci¨®n que podr¨ªamos denominar oficial de Bob Dylan.
En 1968 el Duo Ausona de Vic grab¨® con tonos folk Bon viatge Angelina (Farewell, Angelina) y otro grupo barcelon¨¦s, Els Corbs, incluyeron en su segundo disco El senyor del tambor (Mr. Tambourine Man). Al no disponer de fechas exactas de publicaci¨®n es dif¨ªcil saber si fueron anteriores o posteriores al Roman?o del fill de v¨ªdua aunque en ambos casos su sonoridad parecer¨ªa indicar que no se grabaron por influencia directa del propio Dylan.
Sea como fuere lo cierto es que Bob Dylan no entr¨® en nuestro panorama de la mano de los cantautores que en los a?os sesenta comenzaban su andadura, camino que podr¨ªa haberse imaginado como el m¨¢s l¨®gico. La Nova Can?¨® era franc¨®fona y se miraba m¨¢s en Georges Brassens y en Jacques Brel que en los creadores norteamericanos. Fue necesario esperar a las revoluciones sociales y culturales de finales de la d¨¦cada de 1960. La lucha contra el establishment, los derechos civiles y unas gotas de hippismo giraron la vista de una juventud inquieta hacia los Estados Unidos y en lo que se denomin¨® movimiento folk en el que tanto cab¨ªan canciones populares o tradicionales, espirituales negros, viejos revolucionarios como Woody Guthrie y j¨®venes rebeldes con esperanzas como Joan Baez o, por supuesto, Bob Dylan.
Dylan era hijo directo de Guthrie que buscaba los temas de sus canciones en las noticias del diario y, en esos a?os, los diarios hispanos estaban cargados de noticias que pod¨ªan convertirse en canciones de alto contenido social y reivindicativo. En ese contexto fue el Grup de Folk barcelon¨¦s el que comenz¨® en 1968 a traducir y difundir las canciones de Dylan. Temas como Escolta-ho en el vent (Blowin in the Wind) o Els temps est¨¤n canviant (The Times They Are A-Changin?) pasaron r¨¢pidamente a formar parte de la banda sonora de una generaci¨®n, cantados en festivales y manifestaciones. La editora Als 4 Vents grab¨® varios discos con canciones de Dylan.
Ya en 1968 el Hogar del Libro public¨® el hist¨®rico cancionero Folk Songs que conten¨ªa una secci¨®n dedicada a Dylan con ocho canciones. Entre los traductores Pau Riba (que nunca lleg¨® a grabar sus versiones), Josep Maria Camarasa, Albert Batiste, Ram¨®n Casajuna, Gabriel Jaraba y Quico Pi de la Serra, el ¨²nico cantautor de la escuela cl¨¢sica que se acerc¨® directamente a los versos de Dylan pero tampoco lleg¨® a grabar esa ¨²nica canci¨®n (Deixa-ho correr, ja est¨¤ fet). Sus compa?eros de la Nova Can?¨® (Serrat, Raimon, Maria del Mar Bonet, Llu¨ªs Llach,...) nunca exteriorizaron ese inter¨¦s.
En el mismo 1968, mientras se produc¨ªa la eclosi¨®n dylaniana del Grup de Folk, en Sevilla Los Payos, con un punto de vista bastante diferente y meses antes de su machacante Mar¨ªa Isabel, convert¨ªan en rumba el Farewell, Angelina. Pasar¨ªan bastante tiempo antes de que la canci¨®n en castellano reivindicase la figura de Dylan.
A partir de los a?os setenta Dylan se consolid¨® como algo natural en la escena catalana. Entre otros, en 1994 Sopa de Cabra adapt¨® I Shall Be Releaed, mientras que en 2010 Sanjosex grab¨® un tema expl¨ªcitamente titulado Bob Dylan. En 1991 Loquillo le puso un toque rockabilly a Los tiempos est¨¢n cambiando. Tambi¨¦n el ex subdirector de pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica de la Generalitat, Isidor Mar¨ª, cant¨® sus propias versiones de Dylan, incluyendo un Blowin in the Wind diferente al del Grup de Folk. Hasta la Salseta del Poble Sec se atrevi¨® con Like a Rolling Stone. Miquel Cors, Paul Fuster, Oriol Tramvia, Mazoni, Pascal Comelade, Falsterbo, Grec, Xavier Bar¨® o Sui Generis.
De todas formas dos nombres merecen el calificativo de dylanianos con may¨²sculas: Gerard Quintana, cantante de Sopa de Cabra, y Jordi Batiste, fundador de El Tres Tambors y del Grup de Folk y alter ego de Rocky Muntanyola. Juntos formaron en 1998 Els Miralls de Dylan, banda dise?ada para interpretar en formato ac¨²stico solo sus canciones y ya llevan tres discos dedicados exclusivamente al reciente premio Nobel. El tercero, de 2012, llevaba un t¨ªtulo sugerente, y m¨¢s en estos momentos, Forever young-Per sempre jove.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.