Juicio a un narco que enca?on¨® a un guardia civil tras quitarle la pistola
El vendedor de hero¨ªna, que escapaba de un control con varias dosis, fue reducido de un disparo en la pierna por otro agente
Ocurri¨® en Vilagarc¨ªa de Arousa (Pontevedra) durante uno de tantos controles de vigilancia que casi a diario montan las brigadas antidroga contra narcotraficantes de la zona, aunque este a punto estuvo de tener un final luctuoso, tanto para la Guardia Civil como para su objetivo. Un vendedor de hero¨ªna se sentar¨¢ el mi¨¦rcoles en el banquillo en Pontevedra tras caer en una persecuci¨®n policial en la que le enca?on¨® a uno de los agentes tras quitarle el arma. La fiscal¨ªa pide para ¨¦l ocho a?os de c¨¢rcel.
Miembros de la Polic¨ªa Judicial controlaban el entorno del domicilio de un conocido vendedor de hero¨ªna, con antecedentes penales, cuando el presunto traficante sali¨® de su casa para atender la llamada de un cliente al que iba a entregarle varias dosis y subi¨® a un coche. En ese instante, los dos guardias sin uniforme le cortaron el paso.
Acto seguido se acercaron a la ventanilla y al mostrarle al conductor sus placas identificativas, este sali¨® bruscamente del coche y comenz¨® a correr a toda velocidad con una bolsa en la mano donde luego se comprob¨® que llevaba 122 gramos de hero¨ªna, seg¨²n el relato de los hechos que hizo la Fiscal¨ªa.
Comenz¨® as¨ª una persecuci¨®n que dur¨® un buen rato hasta que el traficante se top¨® con el muro de una finca privada. No se lo pens¨® dos veces y lo salt¨® para que los guardias no le alcanzasen pero, por si acaso, antes se deshizo de la bolsa, tir¨¢ndola dentro de otro terreno colindante para ocultar la prueba.
Mientras segu¨ªa su huida a toda velocidad sin que los agentes lo perdieran de vista en ning¨²n momento, se encontr¨® con un segundo obst¨¢culo, otro muro de m¨¢s de 150 cent¨ªmetros de altura que tambi¨¦n intent¨® saltar. Pero al hacerlo, el fugado cay¨® de espaldas y qued¨® paralizado, tumbado en el suelo y dando quejidos de dolor.
Cuando uno de los agentes le dio alcance, se acerc¨® para auxiliarlo y detenerlo, y en ese momento el supuesto traficante le agarr¨® de un pie con intenci¨®n de tirarlo tambi¨¦n al suelo. El guardia pudo defenderse y cuando crey¨® que ya lo ten¨ªa bien pillado para ponerle los grilletes, el narco le inmoviliz¨® la cabeza con sus piernas hasta que lleg¨® el segundo agente para auxiliarle.
Despu¨¦s, mientras los guardias intentaban ponerle de nuevo los grilletes al hostigado objetivo, este se volvi¨® m¨¢s agresivo, insultando y amenazando a sus perseguidores: ¡±Hijos de puta, ahora si que os mato, cuando os vea os pego dos tiros¡±, al mismo tiempo que pateaba y golpeaba a los agentes para evitar que lo esposasen.
Cuando al fin parec¨ªa que los agentes ten¨ªan al fugitivo completamente inmovilizado, este logr¨® soltarse una mano y alcanzar el arma reglamentaria de uno de ellos, la sac¨® de la funda y dirigi¨® el ca?¨®n del arma hacia el guardia civil. Mientras le apuntaba, su compa?ero le dispar¨® en la pierna pero, aun as¨ª, el forcejeo no termin¨®. El presunto narco, todav¨ªa empu?ando el arma, golpe¨® fuertemente con sus manos el t¨®rax del agente y el otro guardia hizo un segundo disparo, logrando al fin recuperar el arma y reducir al agresor.
Cuando llegaron al lugar otras unidades de refuerzo de la Guardia Civil se inspeccion¨® la zona en busca de la bolsa que hab¨ªa tirado fugitivo. Adem¨¢s del estupefaciente perfectamente envasado para su venta en tres paquetes, los agentes encontraron en su interior un cuchillo, unas tijeras y una b¨¢scula digital de precisi¨®n. La droga adulterada, con un ¨ªndice de pureza de apenas un 30% hubiera alcanzado un valor de 16.000 euros en el mercado negro.
El presunto vendedor ser¨¢ juzgado este mi¨¦rcoles en la Audiencia de Pontevedra por narcotr¨¢fico, atentado a la autoridad y lesiones, delitos por los que el Ministerio Fiscal pide para ¨¦l una condena de ocho a?os de prisi¨®n y multa de 45.000 euros.
Los dos guardias tuvieron que ser atendidos por diversas lesiones. A uno de ellos le diagnosticaron traumatismos en manos y brazos por lo que precis¨® una escayola, mientras el otro result¨® lesionado en el t¨®rax y estern¨®n.
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