Los invisibles de Madrid

?lex, de 46 a?os, vivi¨® cuatro a?os en la calle y muri¨® el pasado verano en Coslada por las duras condiciones de vida. El colectivo Invisibles de Coslada denuncia la ineficacia de la pol¨ªtica social del Ayuntamiento coslade?o para atender a las personas sin techo y temen que la tragedia de ?lex vuelva a ocurrir. ¡°Hasta hace nada los extranjeros sin techo carec¨ªan de cobertura sanitaria y queda por conseguir su atenci¨®n integral¡±, denuncia Loli P¨¦rez, miembro del colectivo que se surgi¨® del movimiento 15M.

¡°Te levantas a las cinco de la ma?ana, haces algo de ejercicio para quitarte el fr¨ªo y no desayunas. Si hay suerte, m¨¢s tarde, Cruz Roja te trae un caldo caliente¡± explica Dan, un rumano que lleg¨® a Espa?a hace ocho a?os. Cuando dej¨® de trabajar en la construcci¨®n hace cuatros a?os se vio obligado a vivir en las calles de Coslada. Tiene 47 a?os, pero su rostro cansado y las secuelas del alcoholismo le suman a?os que no ha vivido.

Fuentes de la Concejal¨ªa de Servicios Sociales, Mayores e Igualdad de Coslada explican que subvencionan y apoyan a dos ONG para atender a la poblaci¨®n del municipio que se encuentra en situaci¨®n de riesgo social y ¡°en concreto para personas sin hogar, adem¨¢s de realizar las funciones propias de Servicios Sociales¡±.

¡°Criminalizar a las personas sin techo y acusarlas de que no ponen de su parte para salir del agujero es lo peor que podemos hacer¡±, explica P¨¦rez, de Invisibles de Coslada. ¡°No estamos en sus zapatos para entender que muchos de ellos no cuentan con su familia para ayudarles; ni trabajo; ni casa; ni autoestima; ni esperanza, por lo que no pueden solucionar la situaci¨®n sin ayuda¡±, aclara.

Viorel, de 60 a?os, sufri¨® un rev¨¦s que lo dej¨® en la calle. La muerte de su esposa desencaden¨® una seguidilla de malas decisiones que lo arrastr¨® a la calle con un carrito de la compra donde guarda sus pertenencias. ¡°Quiero trabajar, pero sin papeles y sin vivienda es imposible¡±, lamenta. Con la mirada perdida y como si hablara sobre otra persona recuerda sus a?os de estudiante de historia en la Universidad de Ruman¨ªa, a su hijo que vive en Italia y con el que no tiene relaci¨®n y el trabajo de jardinero que alguna vez tuvo en Espa?a.

Se trata de un colectivo ¡°muy vulnerable, porque en muchos casos son extranjeros sin papeles, no hablan bien castellano y tienen miedo; se encuentran en tierra de nadie¡±, detalla P¨¦rez, que estima que en Coslada hay al menos una decena de personas que viven en la calle. ¡°Quiz¨¢ hay m¨¢s, pero no se sabe porque no hay datos oficiales facilitados por el Ayuntamiento¡±. En poblaciones como San Fernando y Coslada, que son lim¨ªtrofes entre s¨ª y suman alrededor de 186.000 habitantes, no hay un albergue, refugio o vivienda donde puedan pernoctar las personas sin hogar.

Trabajo, hogar y pareja

Seg¨²n el ¨²ltimo estudio del Instituto Nacional de Estad¨ªstica (INE), la Comunidad de Madrid es la segunda con m¨¢s poblaci¨®n sin hogar, por detr¨¢s de Catalu?a. Los principales motivos por los que las personas se quedan sin hogar son: la p¨¦rdida del trabajo (el 45,0%), no poder hacer frente al pago del alojamiento (26,0%) y la separaci¨®n de su pareja (20,9%).

Seg¨²n el ¨²ltimo Recuento Nocturno de Personas sin hogar en la ciudad de Madrid, 764 personas viven en la calle y 1.141 en albergues (no se localiza a la totalidad de las personas que duermen en las calles de Madrid). El n¨²mero de personas sin hogar en el casco urbano madrile?o ha aumentado entre un 5 y un 7% desde el 2009.

Dar¨ªo P¨¦rez Madera, responsable del Samur Social y Atenci¨®n a Personas sin Hogar del Ayuntamiento de Madrid, afirma que las personas sin hogar ¡°suelen ser hombres solos, en situaci¨®n de desarraigo, sin recursos econ¨®micos ni apoyo familiar, con problem¨¢ticas a?adidas como adicciones y trastornos mentales. Sin olvidar la cada vez m¨¢s importante presencia de personas extranjeras que llega ya al 50% y de edades comprendidas entre los 18 y los 25 a?os¡±.

M¨¢s all¨¢ de los datos, hay personas ¡°con sus circunstancias y necesidades espec¨ªficas. Quiz¨¢ sea nuestro vecino al que hace nada encontr¨¢bamos en el ascensor o puede que un d¨ªa nos ocurra a nosotros¡±, reflexiona Bosco Garc¨ªa, portavoz de la asociaci¨®n Realidades para la Integraci¨®n que ayuda a personas sin hogar en la Comunidad. ¡°Lo importante es que dejen de ser tratados como invisibles¡±, se?ala.

Los colectivos que ayudan a las personas sin hogar consideran que lo que necesitan para rehacer sus vidas es dotar de m¨¢s recursos a los servicios sociales municipales, invertir en infraestructuras de alojamiento y vivienda, una atenci¨®n integral y personalizada de cada caso para paliar los problemas mentales derivados de la vida en la calle o adicciones, as¨ª como campa?as de visualizaci¨®n de las personas sin hogar ¡°porque es un problema social que se esconde y por tanto no se soluciona¡± explica Garc¨ªa.

Las personas que se encuentran en situaci¨®n de extrema pobreza tienen derecho a recibir la Renta Madrile?a de Inserci¨®n, una ayuda de alrededor de 450 euros, ¡°pero la perciben menos de la quinta parte de las familias a las que corresponde¡±, sostiene Carlos Pereda, soci¨®logo y miembro del Movimiento 15M en Madrid (Invisibles de Tetu¨¢n).

El voluntariado es una baza importante para ayudar a las personas m¨¢s desfavorecidas. ¡°La sociedad madrile?a, sobre todo los j¨®venes, es solidaria. Solo en las unidades m¨®viles de ayuda a las personas sin hogar del Corredor del Henares hemos contado con 60 personas voluntarias durante el a?o 2015¡±, apunta Natalia Araujo, Portavoz de Cruz Roja de Madrid.