Arte de mujeres
La Fundaci¨®n Blueproject aborda la condici¨®n femenina a trav¨¦s de las obras de 16 creadoras
?Existe un arte femenino? ?La especificidad es necesaria para alcanzar la igualdad o m¨¢s bien una condena a permanecer en el gueto? Pese a ser objeto de m¨²ltiples debates y estudios, la cuesti¨®n, por el momento, no parece tener una respuesta un¨ªvoca. En cambio, es indudable el incremento del n¨²mero de artista mujeres y la desproporci¨®n entre su visibilidad y la de sus hom¨®logos masculinos. De ah¨ª que la Fundaci¨®n Blueproject empiece el a?o con HerSelves, exposici¨®n que re¨²ne las obras de 16 mujeres que reflexionan sobre la condici¨®n femenina y sus problem¨¢ticas desde una perspectiva personal no exenta de elementos autobiogr¨¢ficos.
Sin la veleidad de ofrecer una visi¨®n exhaustiva, la muestra, que tiene el aliciente a?adido de presentar artistas poco conocidas en Barcelona, despliega una visi¨®n heterog¨¦nea sobre ¡°aspectos culturales, sociales, sexuales o simb¨®licos relacionados con la figura femenina y sus problem¨¢ticas de representaci¨®n, identidad, liberaci¨®n, intimidad, deseo y percepci¨®n¡±, explica Aur¨¦lien Le Genissel, comisario del proyecto junto con el equipo de la Fundaci¨®n.
Las artistas, cuyo com¨²n denominador es una mirada que arranca desde sus propias vivencias personales, se expresan desde diversas disciplinas. S¨®lo hay una pintora, Sarah Maple, que combina elementos culturales contradictorios en una tela donde reinterpreta el Autorretrato con pelo corto, de Frida Kahlo, sustituyendo la c¨¦lebre artista mexicana con la cantante Britney Spears.
La selecci¨®n ofrece un panorama que va desde los autorretratos de corte abstracto de Joana Kohen, que proyectan deseos y anhelos en una ir¨®nica autorepresen-taci¨®n inspirada en el juego infantil Mr. Potato, hasta la videoperformance entre po¨¦tica y s¨¢dica de Eliza Bennett, que actualiza un saber ancestral bord¨¢ndose las manos en un proceso doloroso que alude tanto a la violencia de g¨¦nero como a la explotaci¨®n laboral.
Todas son j¨®venes y, sin embargo, sus problemas no son muy distintos de los de sus abuelas, como delatan los conflictos de pareja que sugieren las fotograf¨ªas de Kelli Connell, la dictadura de la moda que se refleja en las im¨¢genes de la ucraniana Dina Litovsky, las tensiones sexuales que afloran en la obra de Camille Moravia o los nuevos estereotipos de la era digital que se plasman en los v¨ªdeos de las youtubbers n¨®rdicas Arvida Bystr?m & Maja Malou Lyse.
Desde una perspectiva u otra, todas las piezas apuntan a las dificultades que caracterizan la lucha de las mujeres por su identidad, dignidad e igualdad. Lo resume un ne¨®n de la surafricana Frances Goodman, que retrata un rostro femenino de perfil que de forma alterna va escupiendo o tragando algo¡ palabras, convenciones, violencia, cualquier met¨¢fora funciona.
Abierta hasta el 26 de este mes, HerSelves se completa con Hasta agotar existencias, una performance de Ver¨®nica Navas que aborda un trance duro en la vida de una mujer, tal y como expresa el impactante subt¨ªtulo Ensayando para que la muerte de mi madre no me pille desprevenida.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.