Puigdemont y Junqueras lanzan a Rajoy una ¨²ltima llamada al di¨¢logo

A falta de medio a?o para que expire el plazo al que se comprometi¨® Carles Puigdemont para convocar una consulta independentista, el presidente de la Generalitat y su vicepresidente, Oriol Junqueras, piden al Gobierno abrir una negociaci¨®n con el objetivo de pactar ¡°un refer¨¦ndum acordado¡±. En un art¨ªculo conjunto publicado en EL PA?S, ambos dirigentes sit¨²an como ejemplo el acuerdo entre Reino Unido y Escocia, reprochan ¡°la preocupante ausencia de voluntad de di¨¢logo¡± hasta ahora y alertan de que, de no haber acuerdo, har¨¢n lo ¡°indecible¡± para poder celebrar la votaci¨®n este a?o.

En lo que se puede interpretar como una ¨²ltima llamada para resolver por la v¨ªa pactada la cuesti¨®n catalana, los dos dirigentes soberanistas intentan proyectar una imagen utilizada habitualmente por Puigdemont: ¡°Nosotros ya estamos sentados en la mesa de di¨¢logo. ?Van a tardar mucho los dem¨¢s invitados?¡±. Y, dirigi¨¦ndose a la sociedad espa?ola, piden: ¡°Cuando sea demasiado tarde, por favor no nos miren a nosotros. Sean, por una vez, tan exigentes, cr¨ªticos e implacables con sus gobernantes inm¨®viles como lo han sido con nosotros¡±.

La carta firmada por Puigdemont y Junqueras sit¨²a al Ejecutivo catal¨¢n entre la apuesta decidida por convocar el refer¨¦ndum unilateral si no hay interlocuci¨®n y la mano tendida a negociar hasta el ¨²ltimo instante un camino acordado ¡ª¡°es el que desear¨ªamos¡±, dicen¡ª. El t¨ªtulo del art¨ªculo es inequ¨ªvoco: Que gane el di¨¢logo, que las urnas decidan. Pese a que el Govern da por fracasada la Operaci¨®n Di¨¢logo anunciada desde La Moncloa, los dos mandatarios catalanes afirman que ¡°es la hora de la pol¨ªtica¡±.

Siguen sin desvelar cu¨¢ndo expirar¨¢ su disposici¨®n a sentarse a negociar, pero de su carta se desprende que siguen abiertos a pactar la pregunta del refer¨¦ndum, la fecha de su celebraci¨®n e incluso la posibilidad de que se incluya una oferta alternativa a la independencia propuesta por el Ejecutivo central. La ¨²nica fecha en el calendario es la de la segunda quincena de septiembre, para cuando se convocar¨ªa un refer¨¦ndum que, defienden, apoya el 80% de los catalanes, sean partidarios de la independencia o no.

Desencuentro avanzado

La misiva llega cuando el desencuentro entre los Gobiernos central y catal¨¢n est¨¢ muy avanzado y en un momento de creciente tensi¨®n por las condenas del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a sobre el expresidente de la Generalitat Artur Mas y quienes fueron dos de sus consejeras, Joana Ortega e Irene Rigau, por organizar la consulta del 9-N, prohibida por el Tribunal Constitucional. Su inhabilitaci¨®n ha llegado sin que Rajoy y Puigdemont hayan sido capaces de iniciar una interlocuci¨®n para alcanzar acuerdos.

La Moncloa est¨¢ abierta a discutir los agravios que denuncia la Generalitat e incluso a plantear una oferta en materia de inversiones y competencias, pero ni se plantea discutir sobre la celebraci¨®n de una consulta independentista. Y ese punto, para el Ejecutivo aut¨®nomo, es irrenunciable, pese a que formara parte, como uno m¨¢s, del listado de 46 reivindicaciones que el presidente catal¨¢n traslad¨® en abril de 2016 a Rajoy.

En la reuni¨®n secreta mantenida entre ambos presidentes el pasado 11 de enero se puso de manifiesto que las diferencias est¨¢n tan alejadas que no merece la pena simular un deshielo de relaciones en un encuentro. El Gobierno catal¨¢n ha mantenido la velocidad de desarrollo de sus trabajos para una supuesta desconexi¨®n. Y lo mismo ha hecho el grupo que le apoya en el Parlament, Junts pel S¨ª, que hace dos semanas inici¨® la reforma del reglamento de la C¨¢mara para poder aprobar por la v¨ªa expr¨¦s y sin debate la ley de desconexi¨®n. La coalici¨®n independentista y la CUP no han eludido desobedecer resoluciones del Constitucional en su actividad parlamentaria.

Ahora, Puigdemont y Junqueras, bajo el riesgo de que les traten de ¡°ilusos¡± ¡ªsobre todo desde el punto de vista de los independentistas convencidos de que el Gobierno central no se plegar¨¢ a negociar una consulta¡ª dicen que vuelven a insistir en el di¨¢logo ante aquellos que, en su opini¨®n, ¡°han decidido delegar en los tribunales su responsabilidad pol¨ªtica¡±. Aunque no las citan, les ayudan las palabras expresadas por el expresidente del Constitucional Francisco P¨¦rez de los Cobos cuando sostuvo que la interlocuci¨®n se ha convertido en una ¡°necesidad inexcusable y urgente¡± para solventar la cuesti¨®n catalana.

S¨ª se valen de uno de los ¨²ltimos informes de la Comisi¨®n de Venecia, organismo perteneciente al Consejo de Europa, que criticaba el hecho de que el alto tribunal disponga de la capacidad de ¡°ejecutar sus propias sentencias¡±, gracias a la reforma impulsada por el Gobierno del PP para frenar los embates independentistas. Para el presidente auton¨®mico y su n¨²mero dos, ¡°Europa ya se ha percatado¡± de que las actuaciones del Gobierno central van en la l¨ªnea de ¡°esconderse¡± detr¨¢s de la justicia y comprometer a ¡°un poder fundamental para la salud del Estado de derecho¡±.