El joyero predilecto de los ladrones napolitanos
Atracadores italianos planean en dos a?os y medio tres sofisticados asaltos al mismo representante de joyas de Cardedeu
Xavi recuerda perfectamente la primera vez. Eran las nueve de la ma?ana del 22 de septiembre de 2015: ¡°Bajo al garaje y salen dos se?ores, con cara de enfadados. Pens¨¦, hosti, ?qu¨¦ les pasa a estos? En ese momento no tienes la reacci¨®n r¨¢pida, aunque tampoco creo que hubiese podido hacer nada. El que iba delante era bastante bestia, bastante fuerte. Me cogi¨® con los brazos, a la altura de la boca, y me hiri¨® en un ojo de la misma estrujada. Como no pod¨ªa respirar, intent¨¦ quitar las manos, quiz¨¢ pens¨® que me quer¨ªa escapar, y apret¨® m¨¢s. Luego me meti¨® en el maletero del coche, me at¨® de pies y manos y cerr¨®¡±.
Xavi, nombre ficticio, se pas¨® 20 minutos pateando el maletero y gritando en el aparcamiento de su casa, hasta que un vecino le oy¨® y avis¨® a la Guardia Urbana. Necesit¨® tres puntos en la c¨®rnea, que le cortaron, adem¨¢s de otros golpes y magulladuras por la cara. Los ladrones se llevaron joyas valoradas en 340.000 euros. En menos de dos a?os y medio, Xavi, un representante de joyas de Cardedeu (Barcelona), de 66 a?os, ha sido el objetivo de atracadores italianos en tres ocasiones.
La segunda vez tampoco se le ha olvidado. Eran las nueve de la ma?ana del 25 de noviembre de 2016: ¡°Estaba desayunando en un hotel de Figueres y me suena el tel¨¦fono. Pon¨ªa: Francesc Mossos. 'Xavi, ?est¨¢s en Figueres? ?Dentro del hotel?' Y pens¨¦, qu¨¦ control¡±. Lo que ven¨ªa a continuaci¨®n, no le iba a gustar: ¡°Est¨¢te tranquilo, pero te est¨¢n siguiendo. Nosotros tambi¨¦n a ellos. Deber¨ªas esperarte 45 minutos para salir¡±. Xavi esper¨® "como pudo", con una "tensi¨®n por dentro fuerte", y cuando le dijeron, sali¨®. ¡°Te encontrar¨¢s en el hall uno con mala pinta, pero es de los nuestros¡±, le advirtieron. ¡°Ya en la calle, not¨¦ dos sombras detr¨¢s de m¨ª, pero ni me gir¨¦. Estaba bastante cagadito. Cuando ya llegaba al cap¨® de mi coche, entr¨® otro coche quemando rueda. Salieron dos hombres corriendo hacia m¨ª, a gritos de ¡®?polic¨ªa!¡¯¡±.
¡°La detenci¨®n fue dura¡±, admite Rub¨¦n Carrera, sargento de la unidad de atracos de Mossos, con los atracadores a escasos cinco metros de Xavi, y tap¨¢ndose ya la cara. El joyero se meti¨® en el coche, cerr¨® con pestillo, como le hab¨ªan indicado los polic¨ªas, y dej¨® las maletas cargadas de joyas en los asientos traseros. Desde all¨ª pudo ver c¨®mo los Mossos se echaron encima de los dos ladrones que iban a pie. Dos m¨¢s les esperaban en un coche al que le frenaron el paso con otro veh¨ªculo. Los Mossos tuvieron que sacar al conductor, que segu¨ªa acelerando, rompiendo el cristal del piloto. Dos polic¨ªas resultaron heridos, pero lograron detener a los cuatro, todos de N¨¢poles, de entre 50 y 62 a?os.
La operaci¨®n se les vino encima de forma inesperada. ¡°Casi tuvimos que dibujar en una servilleta el dispositivo¡±, bromea Carrera. Dos d¨ªas antes, en un control preventivo de robos en Granollers, los Mossos hab¨ªan identificado a unos hombres, que llevaban guantes y cinta americana en su coche. Cuando la informaci¨®n lleg¨® a la unidad de atracos, comprobaron que probablemente eran los autores del asalto a Xavi en su aparcamiento, un a?o antes. Creyeron que se habr¨ªan ido ya, ahuyentados por la identificaci¨®n casual, pero mantuvieron vigilancia sobre otro veh¨ªculo que estaba en el lugar. Dos d¨ªas despu¨¦s, lo siguieron hasta el hotel en Figueres y all¨ª se sorprendieron al encontrar aparcado el coche de Xavi. No dudaron de que de nuevo era su objetivo.
¡°Dos veces. As¨ª que pens¨¦: ya est¨¢, ya se me ha acabado el mal rollo¡±, recuerda Xavi por tel¨¦fono. Pero todav¨ªa le quedaba un tercer mal trago. Era la ma?ana del 17 de enero de 2018. ¡°Conduc¨ªa por la Ronda de Dalt de Barcelona y recibo una llamada de la polic¨ªa municipal de Cardedeu: ?Has contratado vigilancia personal?¡±. Los agentes hab¨ªan visto un coche sospechoso con dos hombres, uno de ellos con pinganillo, que parec¨ªa que segu¨ªa a Xavi. El veh¨ªculo era un Renault Captur gris. Xavi mir¨® por el retrovisor: ah¨ª estaba el Renault Captur. Esta vez fue ¨¦l quien marc¨® el n¨²mero de tel¨¦fono de Francesc Mossos.
Durante dos semanas, tuvo vigilancia policial. Los atracadores le hab¨ªan puesto un geolocalizador en el coche. ¡°Han sido muy tensas. Milagrosamente, duermo bastante bien, pero durante el d¨ªa me he tenido que tomar pastillas para la ansiedad¡±, admite. Hubo episodios delicados, renunci¨® a alguna visita, e incluso los Mossos tuvieron que trasladarle en su propio coche. El 1 de febrero, de nuevo a primera hora de la ma?ana, Xavi acudi¨® a su ¨²ltima joyer¨ªa, en Figueres. Aparc¨® el coche en carga y descarga, y, sin bajarse, esper¨® instrucciones de los Mossos. Cuando le dijeron que ya era seguro, sali¨®. ¡°Hab¨ªa un par de ellos, de rodillas en el suelo, esposados¡±. Las maletas que llevaba ese d¨ªa estaban vac¨ªas. La joyer¨ªa ni siquiera hab¨ªa abierto.
Los cuatro detenidos eran de nuevo italianos, tambi¨¦n de N¨¢poles, de entre 38 y 54 a?os, con antecedentes en su pa¨ªs, la mayor¨ªa por robos, y estancias en prisi¨®n. ¡°Es siempre el mismo perfil: var¨®n, del sur de Italia, de la misma edad¡±, cuenta Carrera. En su unidad investigan la relaci¨®n entre los tres asaltos, sus autores y la informaci¨®n que les llev¨® siempre a Xavi. Los tres casos han sido llevados por el mismo juzgado: el de instrucci¨®n 1 de Granollers.
Xavi se ha jubilado despu¨¦s de 41 a?os ejerciendo de representante de joyas (desde que ten¨ªa 24). Y pide que quede bastante claro. No tiene muestrario. "Los 45 euros que pueda llevar encima no valen la pena", dice, sin perder el sentido del humor. Est¨¢ muy agradecido con los Mossos ¨C ¡°el trato ha sido inmejorable, siempre me he sentido seguro¡±-. Pero no est¨¢ tranquilo del todo: ¡°Hasta se me seca la boca cuando hablo del tema¡±
Robos a la baja
Los asaltos a representantes de joyas van a la baja. En 2017, los Mossos tuvieron un caso. En 2016 y 2015, cinco, y en 2014, dos. La polic¨ªa catalana tiene una media que oscila entre dos y tres al a?o. Las ¨²ltimas cifras del Colegio Oficial de Joyeros tambi¨¦n apuntan al descenso. Seg¨²n sus datos, en 2016 (¨²ltimo dato disponible) robaron a seis representantes. Un dato que queda muy por debajo de los 23 casos de 2009. Ese descenso se explica con la evoluci¨®n del oficio.
"Yo hab¨ªa llegado a llevar el valor de un piso, en el maletero del coche", explica Roman Pallar¨¦s, presidente de la secci¨®n de comercio del Colegio Oficial de Joyeros de Catalu?a. "Al final, no quedaba ning¨²n representante al que no hubiesen atracado", recuerda, entre ellos, diversos muertos. Pero de eso hace mucho.
Ahora, la mayor¨ªa de las muestras no son valiosas ("no dar¨ªan ni para pagar un mes de hipoteca", dice). Se hacen con plata o circonita. Y casi todos los representantes trabajan con fotograf¨ªas de alta calidad en lugar de muestras "Como mucho, se lleva una en el bolsillo. O si es un nuevo cliente, cuatro piezas", asegura. Si alguien necesita un muestrario f¨ªsico, se hacen showrooms, o se va a la empresa.
Como en todas las profesiones, Pallar¨¦s asegura que siempre hay excepciones, como el caso de Xavi. Y augura un futuro complicado para los representantes que van tienda a tienda. "Cada vez ser¨¢ m¨¢s obsoleto, se har¨¢ todo con las webs", indica.
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