La Guardia Urbana desaloja una finca municipal ¡®okupada¡¯ del Raval

La Guardia Urbana de Barcelona ha desalojado esta ma?ana a 30 ocupas de un edificio de viviendas de titularidad municipal situado en pleno coraz¨®n del Raval. El desalojo se ha salpicado de momentos de tensi¨®n y de toneladas de pol¨¦mica ya que ha sido la polic¨ªa local, de la alcaldesa Ada Colau, la que ha expulsado a los ocupantes.

Colau, meses antes de anunciar que se presentaba como candidata a la alcald¨ªa de Barcelona, abandono su cargo como portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) donde protagoniz¨® decenas de resistencias activas contra desahucios al grito de ¡°s¨ª se puede¡±. Precisamente el mismo grito que esta ma?ana pronunciaban algunos de los ocupas desalojados del n¨²mero 1 de la calle Sant Ramon. Una veintena de j¨®venes que accedieron a unos pisos -previo pago de entre 500 y 800 euros a una organizaci¨®n que vend¨ªa llaves de inmuebles que hab¨ªan okupado previamente- y que el Consistorio ten¨ªa preparados para ser entregados a otras familias que cumpl¨ªan los requisitos para ser merecedoras de un alquiler social.

El Ayuntamiento de Barcelona, con Xavier Trias al frente, compr¨® en octubre de 2013 los 11 pisos del n¨²mero 1 de la calle Sant Ramon. En julio de 2015 comenzaron las obras de rehabilitaci¨®n que hab¨ªan acabado hace unas semanas.? Seg¨²n fuentes municipales la empresa suministradora de la electricidad exig¨ªa la instalaci¨®n de una estaci¨®n transformadora para dar de alta los suministros por lo que no se entregar¨ªan los pisos hasta el verano. Las mismas fuentes aseguran que el lunes ¡°los servicios de vigilancia del Ayuntamiento comprobaron que el edificio estaba vac¨ªo¡±. Ayer, mi¨¦rcoles, por la tarde hab¨ªa cerca de 30 personas en el interior. La Guardia Urbana al detectar la presencia de ocupas se coloc¨® en la puerta del inmueble para evitar que entraran m¨¢s personas y para preparar un desalojo que ha tenido lugar esta ma?ana.

El Consistorio mantiene que los okupas no llevaban 72 horas en el edificio y por tanto la Guardia Urbana pod¨ªa realizar un desahucio express sin necesidad de que comenzara un largo proceso judicial hasta conseguir la orden de un juzgado. Los okupas por el contrario aseguran que llevan varios d¨ªas en el interior y, por tanto, que el desalojo de la Urbana no se ajusta a la legislaci¨®n.

Minutos antes de las ocho de la ma?ana, medio centenar de agentes de la Guardia Urbana de Barcelona han procedido a entrar en las viviendas. A golpes de maza han roto la puerta del portal mientras los vecinos se atrincheraban en sus viviendas llamando la atenci¨®n, a gritos, desde los balcones de los medios de comunicaci¨®n.

Los agentes fueron entrando piso a piso. Reventando puertas porque los ocupas no quer¨ªan abandonar los inmuebles. Uno de ellos, vaci¨® varios extintores en la escalera para impedir la actuaci¨®n policial por lo que los agentes tuvieron que utilizar mascarillas.

Tras varias horas desalojando a personas la Guardia Urbana dio por vac¨ªo el edifico. En el interior hab¨ªa 22 personas y un beb¨¦.

Pepe compart¨ªa piso con su hermana y su cu?ado. ¡°Llevamos varios d¨ªas dentro, yo pagu¨¦ 500 euros a un paquistan¨ª por la llave y nos metimos all¨ª porque somos vecinos con problemas¡±, denunciaba. Sergi de 25 a?os estaba en otro de los pisos junto a su esposa. Adquiri¨® la llave de la misma forma. Najim Namonbrui, de 28 a?os, mostraba una hoja y un tiquet de compra de comida a domicilio con el que pretend¨ªa justificar por un lado: ¡°Soy v¨ªctima de un estafador que me ha alquilado un piso que no era suyo por 528 euros¡± y por otro ¡°llevo en mi piso 15 d¨ªas comiendo de diferentes empresas de reparto a domicilio¡±.

Pero el que acapar¨® la mayor atenci¨®n fue Hatim. Un joven de 29 a?os que viv¨ªa en el primer piso junto con su esposa de 18 a?os y un beb¨¦ de meses que mostraba continuamente. Hatim, en tirantes pese a la baja temperatura, gritaba contra los agentes, contra el equipo de gobierno, suplicaba empleo y denunciaba: ¡°Este edificio es para aquellos que tienen dinero porque ahora el Raval est¨¢ de moda¡±.

Los servicios sociales del Ayuntamiento, el Centro de Urgencias y Emergencias Sociales de Barcelona (CUESB), atendieron a diez de los ocupas y solo tres aceptaron una alternativa de realojo. Los t¨¦cnicos han considerado que siete de los desahuciados tienen o red social o recursos econ¨®micos.

Cr¨ªtica pol¨ªtica

Las cr¨ªticas pol¨ªticas a la actuaci¨®n de Consistorio no han tardado en llegar. La concejal de la CUP, Eul¨¤lia Reguant, se ha personado en el lugar y ha defendido que ¡°las okupaciones en la inmensa mayor¨ªa de veces, responden a una necesidad vital de tener un techo en el que vivir¡±. Reguant ha denunciado al ¡°Ayuntamiento quien directamente ha ordenado a la Urbana¡± realizar un desalojo que seg¨²n la concejal de la CUP no pod¨ªa ser ¡°express¡±.

Por su parte, el l¨ªder de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch, ha calificado de ¡°esc¨¢ndalo¡± la okupaci¨®n de un inmueble destinado al alquiler social. ¡°?C¨®mo es posible que el Gobierno no fuera consciente (de la okupaci¨®n) teniendo en cuenta que se trata de una propiedad municipal?¡±, ha criticado despu¨¦s de calificar el problema de la droga en el Raval como un retorno a los a?os 80.

La desocupaci¨®n fue criticada por toda la oposici¨®n. Merc¨¨ Homs, del PDeCAT, denunci¨® que el gobierno de Colau permite ocupaciones en edificios municipales.? Jaume Collboni, del PSC, critic¨® la ¡°dejadez y descontrol¡± de Colau ante los narcopisos

La l¨ªder de Ciudadanos, Carina Mej¨ªas, ha criticado la ¡°dejadez de Colau a la hora de velar pore los edificios de titularidad municipal evita que las familias vulnerables accedan a vivienda social¡±. Mej¨ªas ha pedido que se luche contra ¡°las mafias¡± de la ocupaci¨®n y de los contratos falsos.

El l¨ªder del PP, Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz, ha pedido ¡°poner fin y freno a las ocupaciones ilegales¡±. El popular ha recordado que el discurso permisivo de Colau hacia los ¡°okupas¡± ha generado un efecto llamada.

La teniente de alcalde de Derechos Sociales del Ayuntamiento, Laia Ortiz, se ha defendido? explicando que el Consistorio tiene la obligaci¨®n de ¡°defender y preservar el patrimonio municipal¡±. ¡°No puede ser que el primero que entra, lo utilice¡±, ha afirmado y ha defendido que la ¡°responsabilidad del Ayuntamiento es que el acceso a la vivienda p¨²blica se rija por criterios transparentes sobre quien tiene derecho a estas viviendas¡±, informa Clara Blanchar

Por su parte, el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, exigi¨® el nombramiento de un ¡°consejero de Interior¡± para abordar el problema del tr¨¢fico de drogas que ¡°excede el ¨¢mbito metropolitano¡±.