De ¡®pink panther¡¯ a traficante de marihuana
La Polic¨ªa desarticula una organizaci¨®n dedicada a cultivar la planta en Catalu?a y venderla en Italia
Los dos pink panthers decidieron redirigir sus carreras: de atracadores de joyer¨ªas de lujo a traficantes de marihuana y hach¨ªs afincados en la costa catalana. Y no es raro, los beneficios de esta droga son jugosos, Catalu?a ofrece el clima id¨®neo para cultivarla, y las semillas se pueden comprar legalmente en cualquier tienda. Un kilo de marihuana se vende a 1.500 euros en Espa?a y su precio? se multiplica a medida que recorre Europa. ¡°Cuando llega a Francia son 3.000 y si sube hasta los pa¨ªses n¨®rdicos, puede alcanzar los 6.000 euros el kilo¡±, explica un portavoz de la Polic¨ªa Nacional. Un negocio redondo que la polic¨ªa cercen¨® cuando detuvo a los dos exatracadores, con ¨®rdenes internacionales de extradici¨®n a Serbia. Llevaban al menos desde agosto del a?o pasado escondidos en Pineda de Mar (Barcelona), con identidades falsas b¨²lgaras.
Los agentes desmantelaron la organizaci¨®n el pasado 27 de febrero, arrestaron en total a 26 personas e intervinieron cinco grandes plantaciones de marihuana. La mayor se encontraba en un chal¨¦ en Vallgorguina (Barcelona). Los agentes acusan a los dos hombres, que se dedicaban a reclutar a temporeros serbios, de formar parte de la c¨²pula de la red. ¡°No confiaban en nadie de aqu¨ª¡±, explica el portavoz policial. Luego los trasladaban al domicilio en Pineda de Mar, y los pon¨ªan a trabajar en los cultivos. El destino final de la droga era principalmente Italia, que ha participado en la investigaci¨®n junto a la polic¨ªa Serbia, que fue quien dio el aviso a los agentes espa?oles, y los servicios de aduanas de Toulouse.
Entre los trabajadores de la red hab¨ªa transportistas, que conduc¨ªan los camiones que cruzaban la frontera, como si fuese un veh¨ªculo m¨¢s de mercader¨ªas, con la diferencia de que sus remolques viajaban atestadas de marihuana. Durante la investigaci¨®n, los agentes interceptaron cinco camiones en ruta, con m¨¢s de 300 kilos de droga, que iban a Italia, Francia, Alemania y Suecia.
Las ¨¢reas de descanso y las gasolineras eran los lugares donde traspasaban la droga desde los veh¨ªculos de la organizaci¨®n, que las llevaban en calas, a los remolques de los camiones. ¡°Buscaban un lugar donde pasar desapercibidos, como si fuesen un transportista m¨¢s¡±, cuenta el portavoz policial. El grupo contaba tambi¨¦n con laboratorios donde fabricaban productos derivados de la marihuana.
En los registros en 15 domicilios en Barcelona, Girona y Tarragona, la polic¨ªa encontr¨® abundante documentaci¨®n falsificada, que sospechan que daban a los temporeros, 58.000 euros, dos armas (una de ellas en una basura, despu¨¦s de que la arrojase uno de los sospechosos), cinco coches de alta gama y 2.237 plantas y 80 cogollos. Los detenidos pasaron a disposici¨®n del juez.
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