Chaikovski contra Napole¨®n en el Palau

Una solista de gran talento, la violonchelista francesa Anne Gastinel, fue la gran triunfadora del nuevo concierto de la Orquestra Simf¨°nica del Vall¨¨s en el Palau. El bien hilvanado programa, titulado Chaikovski contra Napole¨®n, dirigido con trazo grueso y cierto estruendo por James Ross, culmin¨® con la famosa Obertura 1812,que glosa con repique de campanas y ca?onazos la victoria del ej¨¦rcito ruso contra la invasi¨®n napole¨®nica.

La proyecci¨®n la pel¨ªcula muda Blind date (Cita a ciegas), de Gregg Lachow, aport¨® gui?os chaplinianos y toques surrealistas a una versi¨®n, musicalmente discreta, de la suite de la ¨®pera H¨¢ry J¨¢nos, de Zolt¨¢n Kod¨¢ly. En su divertida ¨®pera, estrenada en Budapest en 1926, el compositor y pedagogo h¨²ngaro narra las aventuras de un h¨²sar del ej¨¦rcito austriaco, veterano de las guerras napole¨®nicas, bebedor y fanfarr¨®n, que cuenta proezas b¨¦licas tan falsas como delirantes, e incluso se vanagloria de haber conquistado el amor de Mar¨ªa Luisa, esposa de Napole¨®n.

Para darle vida en conciertos, Kod¨¢ly prepar¨® una suite orquestal cuyo estreno mundial tuvo lugar el 24 de marzo de 1927 en el Gran Teatro del Liceo, a cargo de la Orquesta Pau Casals dirigida por Antal Fleischer. Ross, que abri¨® el programa con una ampulosa versi¨®n de la Marcha h¨²ngara de La condenaci¨®n de Fausto, de Berlioz, no pas¨® de discreto en la suite, en la que el sonido del c¨ªmbalo, instrumento clave en la m¨²sica popular gitana, empleado con maestr¨ªa por Kodaly, fue sustituido por un m¨¢s anodino, aunque bien tocado, teclado electr¨®nico.

En la pel¨ªcula, protagonizada por Megan Murphy y Doug Fitch, que salieron a saludar, una mujer ve con disgusto prolongada su jornada en la oficina por un encargo de ¨²ltima hora, y fantasea con una cita a ciegas en la que acaba encontr¨¢ndose con un moderno y surrealista H¨¢ry J¨¢nos. Juega con algunas claves de la trama oper¨ªstica y entretiene, pero distrae en exceso, lo que perjudica el disfrute de una m¨²sica de fascinantes colores y ra¨ªces folcl¨®ricas.

En las mozartianas Variaciones sobre un tema rococ¨® de Chaikovski, con una orquesta m¨¢s atenta a los matices, cautiv¨® la musicalidad y el sonido pleno e intenso en todos los registros de Anne Gastinel, de l¨ªnea elegante y bello sonido que recuerda al gran Pierre Fournier.

La Simf¨°nica de Vall¨¨s, con alumnos de su joven orquesta y del Conservatori del Liceo, altern¨® momentos de brillantez con episodios menos logrados en la Obertura 1812. Los ca?onazos, a golpes de gran caja, fueron anunciados, en un gag que pod¨ªan haberse ahorrado, con la onomatopeya ?Boom! en una pancarta.