Barcelona es la ¡°ciudad de las luces¡± durante tres d¨ªas

La respuesta ciudadana a cualquier actividad cultural gratuita es masiva. En Barcelona y en cualquier otro lugar. Y si es al aire libre, m¨¢s. Ah¨ª radica gran parte del ¨¦xito del festival de la luz de Barcelona, el Llum BCN, que cada a?o convoca a mayor n¨²mero de personas (el a?o pasado 170.000) para ver las ¨²ltimas novedades en el arte que protagoniza a luz en movimiento y convierten a Barcelona, con permiso de Par¨ªs, en la ciudad de la luz durante tres d¨ªas.

El a?o pasado, tras seis ediciones, se apost¨® por cambiar los entornos hist¨®ricos del centro de la ciudad por los industriales de Poblenou. Y el festival sum¨® un nuevo ¨¦xito, pese a que la lluvia hizo acto de presencia varias noches. El DHUB es el epicentro. Del museo de Gl¨°ries parten las rutas donde pueden verse las 45 propuestas: 20 instalaciones de artistas y 15 de escuelas de arquitectura, arte y dise?o.

Entre las iniciativas destacadas del festival comisariado este a?o por Maria G¨¹ell, la de Xavi Lloses que presenta Nautilius, una escultura sonora en el Centre Comercial Gl¨°ries. Alex Posada y Xavi Bayona proyectan Polyedra en el edificio de los Encants; Francesca Llopis lanza la pregunta I tu, qu¨¨ posaries sota el focus? en el Espai Omnium; Tilt ha instalado un bosque de gigantes peon¨ªas, Colour Peonies, en la calle Almog¨¤vers; Manolo Laguillo propone m¨²ltiples salidas a trav¨¦s de su Emerg¨¨ncies, ocupando algunas de las escaleras de emergencia de la zona. Tambi¨¦n, la proyecci¨®n sobre agua de Joanie Lemercier en el lago del DHUB que provoca comentarios de admiraci¨®n pero tambi¨¦n del tipo: ¡°es como Port Aventura¡± de los primeros visitantes. Ligh Leaks, de Kyle McDonals y Jona Jongeljan transforman en una enorme discoteca sesentera Can Framis; Cube.BZ con R¨¦quiem por una f¨¢brica, muestran la necesaria memoria, te?ida de rojo, del pasado fabril del barrio, mientras que Protopixel permite controlar el aspecto de la enorme Torre Gl¨°ries con la mano y Aqu¨ª Houston nos adentra con Plou n¨²volen una nube sensorial en la plaza de Gl¨°ries.

Por su parte, las 15 escuelas participantes presentan trabajos tan interesantes como el cubo sin fin Alice (Elisava); la on¨ªrica e interactiva Noctulica (Eina) y Fils d¡¯hist¨°ria (ETSA), representaci¨®n f¨ªsica de las redes sociales que nos controlan.

La cantidad de propuestas hacen que sea necesario un mapa para no perderse y para verlo todo. Pero no hay p¨¦rdida. Antoni Arola ha creado un enorme rayo verde de l¨¢ser que delimita el per¨ªmetro de todo el festival. Solo hay que seguirlo. Hay alguno que nunca tiene bastante y fotograf¨ªa incluso las estructuras multicolores del centro comercial de Gl¨°ries hasta que alguien le dice: ¡°?Qu¨¦ eso lleva toda la vida aqu¨ª!¡±