Tres ataques en una semana a centros de menores migrantes en Catalu?a
La Generalitat tacha de racistas las agresiones a los j¨®venes pero niega que sea una ¡°situaci¨®n preocupante¡±
Escena primera. S¨¢bado por la tarde. Un grupo de j¨®venes escucha m¨²sica, bebe y fuma en un t¨ªpico botell¨®n en Castelldefels (Barcelona). Son poco m¨¢s de las seis de la tarde. A esa hora, otro grupo de adolescentes migrantes se cruza con ellos de camino al albergue Cal Ganxo, donde viven desde diciembre. Discuten y acaban a pedradas. No es la primera pelea. Escena segunda. Tres horas m¨¢s tarde, los j¨®venes del botell¨®n deciden ajustar cuentas con los de Cal Ganxo. Son las nueve y media de la noche. 25 de ellos, encapuchados, entran violentamente en la escuela, arrancan mobiliario e intentan agredir a menores y educadores. Tiran a uno de los j¨®venes tutelado de un muro y le apedrean. Acaba en el hospital con un ataque de ansiedad. Dos educadores tienen contusiones. Escena tercera. Es ya domingo. Los j¨®venes de Castelldefels re¨²nen a m¨¢s de 60 personas y vuelven a Cal Ganxo. Los Mossos d¡¯Esquadra impiden que entren de nuevo.
El incidente, dividido en tres episodios, supone el ataque m¨¢s grave que, seg¨²n la Generalitat, se ha producido nunca en un centro de menores tutelados. La Administraci¨®n catalana habla de una agresi¨®n racista intolerable e injustificable, lo denunciar¨¢ ante la Fiscal¨ªa de delitos de odio y se presentar¨¢ como acusaci¨®n particular en la causa judicial. La alcaldesa de Castelldefels, Mar¨ªa Miranda (PSC), rebaj¨® el tono y se refiri¨® a peleas entre j¨®venes del municipio y menores migrantes.
La llegada a Catalu?a de estos adolescentes ha colapsado a la Generalitat y empieza a dar se?ales preocupantes de problemas de convivencia, con tres ataques a centros de menores en una semana. En 2017 llegaron 1.489 menores inmigrantes no acompa?ados; en 2018, 3.659.
Can Xatrac, en Canet de Mar (Barcelona), es el otro centro atacado. Escena primera. 28 de febrero. Unos 40 vecinos protestan frente al Ayuntamiento de la localidad por la inseguridad que achacan a los menores migrantes. Un grupo de ellos y educadoras pasan por delante y los concentrados les abuchean. Una mujer incluso mueve la mano como si oliesen mal. Varias instituciones, entre ellas SOS Racismo y la Generalitat, califican la protesta de acto ¡°racista, xen¨®fobo e intolerable¡±. Escena segunda. Cinco d¨ªas despu¨¦s, 5 de marzo, un hombre armado con un machete entra en el centro Can Xatrac donde viven medio centenar de menores migrantes desde octubre. No hiere a nadie. La polic¨ªa le detiene por amenazas y el juez le deja en libertad con cargos.
Llegada masiva
Can Xatrac, la casa de colonias de Canet de Mar donde viven los menores, pertenece a la alcaldesa del municipio, Blanca Arbell (ERC). ¡°Eso ha sido aprovechado pol¨ªticamente¡±, denuncia la regidora, sobre las protestas por la inseguridad y los j¨®venes. La localidad, como en a?os anteriores, sufre robos en domicilios, pero las cifras han bajado, seg¨²n Polic¨ªa Local y Mossos. ¡°Son mafias de fuera¡±, a?ade la alcaldesa, sobre los autores. Pero los datos sirven de poco ante quienes est¨¢n convencidos de lo contrario. El due?o de un local cercano adonde se re¨²nen los menores les atribuye los robos y la inseguridad. Jes¨²s, jubilado, augura que ¡°el racismo ir¨¢ a m¨¢s porque no se puede abrir la puerta y que entren todos¡±. El contrapunto lo pone una mujer que vive al lado de Can Xatrac y explica que jam¨¢s ha tenido problemas con los menores.
¡°El racismo se define por atribuir a un colectivo hechos y caracter¨ªsticas de individuos¡±, subray¨® ayer el secretario de Igualdad, Migraciones y Ciudadan¨ªa de la Generalitat, Oriol Amor¨®s, sobre los ¨²ltimos episodios. Pero insisti¨® en que en la mayor¨ªa de centros de acogida de Catalu?a ¡ªunos 150¡ª hay una buena acogida de los menores. ¡°No creemos que haya una situaci¨®n preocupante¡±, afirm¨®, sobre la convivencia, aunque admiti¨® que la Generalitat se ha visto desbordada con la llegada (145% m¨¢s) de estos j¨®venes a los que tutela hasta la mayor¨ªa de edad. El Govern no facilit¨® la cifra de incidentes contra los centros, que abre con discreci¨®n.
Cal Ganxo, en Castelldefels, segu¨ªa ayer custodiado por los Mossos y la Polic¨ªa Local. C. M. de 23 a?os, particip¨® en el asalto. ¡°Como no nos hace caso ni Dios, fuimos a plantarnos¡±, alega sobre el conflicto entre su grupo, j¨®venes de entre 17 y 24 a?os, y los menores migrantes. ¡°Te piden un cigarro o un porro y si no lo das, te rayan o te dan una patada en el coche¡±, pone a modo de ejemplo de una situaci¨®n que dice que hace un mes y medio que dura. Niega que se quejen por motivos racistas, pero afirma que desde que los menores est¨¢n en el pueblo ¡°han subido los robos, los coches est¨¢n reventados y da miedo salir por la noche porque est¨¢ plagado de moros¡±. Los menores van a ser reubicados en otro centro, como ya estaba acordado con el Ayuntamiento de Castelldefels, pero la Generalitat no aclara cu¨¢ndo.
La alcaldesa de Canet de Mar asegura que ¡°se est¨¢ rebajando la tensi¨®n¡± despu¨¦s de dos semanas movidas en el municipio. ¡°Mucha gente se ha dado cuenta de la irresponsabilidad de criminalizar y estigmatizar¡±, a?ade.
La Red de Refugiados avisa de la ¡°escalada de violencia¡±
La Red Espa?ola de Inmigraci¨®n y Ayuda al Refugiado anunci¨® ayer que se personar¨¢ como acusaci¨®n popular en el ataque a un centro de menores migrantes no acompa?ados en Castelldefels. En un comunicado de prensa, la entidad conden¨® los ataques y mostr¨® su preocupaci¨®n por "la escalada de violencia y los graves incidentes" que, seg¨²n la Red, est¨¢ provocada por "la parquedad de los medios y la nula implicaci¨®n realista de las Administraciones". Y denunci¨® que a pesar del incremento del n¨²mero de plazas para acoger a los menores no acompa?ados, las instituciones no generan "soluciones eficaces que permitan una convivencia, mediaci¨®n vecinal o un incremento de las plazas en servicios vinculados a la acogida".
La Mesa del Tercer Sector, que agrupa a m¨¢s de 3.000 entidades sociales en Catalu?a, conden¨® los ataques "xen¨®fobos" y exigi¨® que los partidos pol¨ªticos no utilicen la inmigraci¨®n con fines electoralistas. El defensor del pueblo catal¨¢n tach¨® de "muy grave" lo ocurrido.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.