Las atractivas cloacas del poder
¡®House of Cards¡¯ me enganch¨® cuando viv¨ªa en Washington para imaginar de cerca qu¨¦ pasaba entre la trastienda de la pol¨ªtica de los Estados Unidos
Debo reconocer y lamento que pueda ir en contra del esp¨ªritu de este art¨ªculo que no soy muy de mirar series de televisi¨®n. Como muchos, de peque?o y adolescente, miraba algunas series con mi familia. Pero nunca me enganchaba del todo a una. House of Cards fue una de las excepciones.
La serie de Netflix ¡ªuna adaptaci¨®n de una producci¨®n y novela brit¨¢nicas previas¡ª retrata las cloacas de la pol¨ªtica estadounidense de la mano del ambicioso matrimonio, de conveniencia, de Frank y Claire Underwood (protagonizados por Kevin Spacey y Robin Wright). Se estren¨® en 2013. A finales de ese a?o yo me mud¨¦ a Washington. No recuerdo exactamente cu¨¢ndo pero, tras haber o¨ªdo hablar tanto de la serie, un d¨ªa decid¨ª verla. Y me enganch¨¦.
Pensaba en Frank Underwood si cubr¨ªa un acto en la Casa Blanca
Era f¨¢cil saber lo que me atra¨ªa a m¨ª y a tantos otros colegas en la capital de Estados Unidos: la serie se desarrollaba en la ciudad en la que viv¨ªamos, abordaba asuntos de los que pod¨ªamos escribir y mostraba lugares conocidos. Como joven periodista interesado en pol¨ªtica estadounidense y en permanente aprendizaje sobre la psique del pa¨ªs, era apasionante imaginarse la trastienda del poder a partir de los tejemanejes de los Underwood. Desde c¨®mo se negocia y amenaza sin fin a legisladores para lograr que una ley tenga suficientes votos para ser aprobada o se maniobra oscuramente para convertirse en vicepresidente de Estados Unidos.
Sin pretender alardear, en el c¨¦nit de la serie, era imposible no pensar un poco en Frank Underwood si uno cubr¨ªa un acto en la Casa Blanca, en el Congreso o en campa?a electoral. Aunque la serie estuviera grabada sobre todo en Maryland, un Estado adyacente a la capital estadounidense.
La dej¨¦ en la cuarta temporada tras los giros de gui¨®n que rozaban la irrealidad
Washington es una burbuja en la que confluyen pol¨ªticos, asesores, lobistas, periodistas y un sinf¨ªn de expertos. Todos se necesitan mutuamente. House of Cards refleja un c¨®ctel de poder, esc¨¢ndalos, falsedades, traiciones y ambiciones desmedidas. Los Underwood ¡ªmanipuladores, estrategas permanentes¡ª parecen estar dispuestos a hacer cualquier cosa con tal de avanzar en sus objetivos en una partida de ajedrez interminable. Hasta el punto de hacer desaparecer rivales pol¨ªticos y periodistas, como la joven redactora que muere lanzada a las v¨ªas del metro. La gran pregunta: ?Eso pasa tambi¨¦n en el Washington real? Solo imaginar que la serie se pod¨ªa asemejar en algo a la realidad la hac¨ªa m¨¢s atractiva pero tambi¨¦n inquietante.
En un encuentro con ejecutivos tecnol¨®gicos, incluido el de Netflix, el entonces presidente estadounidense Barack Obama brome¨® en 2013 que le gustar¨ªa que Washington fuera tan ¡°despiadadamente efectivo¡± como en House of Cards. ¡°Este hombre est¨¢ logrando hacer muchas cosas¡±, ironiz¨® Obama sobre Frank Underwood, que entonces en la serie era el jefe de la bancada dem¨®crata en la C¨¢mara de Representantes.
Era imposible
dejar de ver en los
protagonistas a Bill y Hillary Clinton
House of Cards, que tuvo seis temporadas, tiene interesantes paralelismos con la vida real. Por ejemplo, es imposible no comparar el matrimonio Underwood con el de Bill y Hillary Clinton. Ambos, una pareja sedienta de poder, que se ayuda mutuamente a escalar pol¨ªticamente y siempre sospechosa de no ser del todo transparente, acusada de un sinf¨ªn de conspiraciones por parte de los republicanos. Sin embargo, hay tambi¨¦n divergencias notables: pese a intentarlo dos veces, Hillary nunca ha logrado alcanzar la presidencia de EE UU.
La serie tambi¨¦n logr¨® avanzarse a sus tiempos. Un candidato electoral recurre a informaci¨®n privada de ciudadanos en Internet para tratar de anticipar sus preferencias de voto. Pocos a?os despu¨¦s, se supo que Donald Trump y otros pol¨ªticos contrataron la consultora Cambridge Analytica para dise?ar estrategias electorales a partir de datos de usuarios de Facebook.
Vi House of Cards hasta la cuarta temporada. Luego me cans¨¦ por tener tantos giros de gui¨®n, que rozaban la irrealidad, y ser tan sangrienta. La serie se vio ensombrecida despu¨¦s de que Spacey fuera apartado de la ¨²ltima temporada tras ser acusado de abusos sexuales.
Fue de las primeras producciones propias de Netflix. El d¨ªa del estreno, la plataforma sub¨ªa de golpe todos los cap¨ªtulos de una temporada. Si uno ten¨ªa tiempo y ganas los pod¨ªa ver del tir¨®n en un fin de semana. House of Cards se acab¨® en 2018, el mismo a?o en que me fui de Washington.
Periodista arrojada a las v¨ªas del metro
1. A?o de estreno y origen. 2013, Estados Unidos.
2. Actores protagonistas. Kevin Spacey y Robin Wright.
3. Edad al verla y situaci¨®n. Empec¨¦ a verla con 26 a?os, con pareja o amigos.
4. La mejor escena. La muerte de la joven periodista Zoe Barnes arrojada a las v¨ªas del metro por Frank Underwood.
5. Serie que ve ahora. Ahora mismo no estoy viendo ninguna serie.
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