Los alcaldes de Tarragona piden m¨¢s controles en la petroqu¨ªmica

La explosi¨®n, hace dos semanas, del reactor de ¨®xido de etileno de la empresa Iqoxe, en La Canonja (Tarragona) marc¨® un antes y un despu¨¦s en la relaci¨®n que los municipios de su alrededor mantienen con el complejo petroqu¨ªmico. A las preocupaciones por la seguridad en el pol¨ªgono se suma el debate sobre el control de las emisiones de las f¨¢bricas, que sol¨ªa ser un terreno casi exclusivo de los colectivos ecologistas. Este lunes, m¨¢s de veinte alcaldes de Tarragona se han unido para reclamar a la Generalitat cambiar los protocolos de seguridad en casos de emergencias qu¨ªmicas.

Nunca fue tan visible como ahora la sensaci¨®n de intranquilidad que airean vecinos, trabajadores, ayuntamientos y representantes institucionales cercanos al mayor enclave qu¨ªmico del sur de Europa. La investigaci¨®n que dirige el juzgado de Tarragona, bajo estricto secreto de sumario, deber¨¢ aclarar qu¨¦ fall¨® en la explosi¨®n de Iqoxe. La Fiscal¨ªa tramita la instrucci¨®n a trav¨¦s de su ¨¢rea de inspecci¨®n de riesgos laborales, y no de medio ambiente, lo que focaliza las pesquisas en una presunta irregularidad de las condiciones de trabajo. La Generalitat tambi¨¦n ha abierto expediente para investigar lo sucedido y otro para dirimir si la empresa reinici¨® su actividad tras la explosi¨®n sin tener los permisos en regla. Se suman a cuatro sanciones impuestas por la Inspecci¨®n de Trabajo en los ¨²ltimos a?os por cuestiones de seguridad laboral y de salud, seg¨²n revel¨® tras la explosi¨®n el consejero de Trabajo, Chakir El Homrani.

M¨¢s all¨¢ de la evoluci¨®n judicial y administrativa del caso, el territorio ha activado el altavoz para reivindicar sus demandas. Ayuntamientos, sindicatos y vecinos reclaman aumentar las medidas de seguridad en la treintena de plantas qu¨ªmicas que operan en el tri¨¢ngulo comprendido entre Tarragona, La Canonja y Vila-seca.

La reuni¨®n de este lunes entre una veintena de alcaldes de la zona ha servido para hacer frente com¨²n en sus exigencias a la Generalitat: durante el encuentro, celebrado en el edificio del Centro de Coordinaci¨®n Operativa de Catalu?a (Cecat), situado a apenas cuatro kil¨®metros de distancia de la factor¨ªa de Iqoxe, los alcaldes han interpelado al viceconsejero de la Presidencia, Pau Vill¨°ria, y le han insistido en que la gesti¨®n de las crisis se asuma directamente desde Tarragona, en lugar de coordinarse desde Barcelona, como se viene haciendo desde 2007.

Los alcaldes se han hecho eco de la manifestaci¨®n de unas 3.000 personas que recorri¨® las calles de Tarragona el d¨ªa despu¨¦s de la explosi¨®n. Los vecinos pidieron entonces acabar con la ¡°impunidad¡± de la industria qu¨ªmica, y los representantes municipales han exigido que se actualicen los mecanismos de reacci¨®n ante un accidente qu¨ªmico. A su vez, han sostenido la conveniencia de dar ¡°mejor formaci¨®n a la ciudadan¨ªa¡± y una mayor transparencia de las informaciones relacionadas con el sector, ha explicado Pau Ricom¨¤, alcalde de Tarragona. ¡°La qu¨ªmica tiene que ser la primera interesada en tener el m¨¢ximo nivel de seguridad", ha abundado.

A estas reclamaciones se ha sumado la presidenta de la Diputaci¨®n de Tarragona, Noem¨ª Llaurad¨®. ¡°Por primera vez ha habido afectaci¨®n fuera del polo petroqu¨ªmico¡±, ha recordado en alusi¨®n al vecino del barrio de Torreforta que muri¨® en su casa a dos kil¨®metros de distancia de la planta siniestrada, tras un derrumbe provocado por un proyectil que sali¨® disparado del reactor.

¡°Que no sea de nuestra competencia, no significa que no sea de nuestra incumbencia¡±, ha dicho Llaurad¨® en un encuentro con la prensa, donde ha ido un paso m¨¢s all¨¢ y ha abierto la puerta a impulsar un debate social sobre cu¨¢l debe ser el futuro de la industria en Tarragona: ¡°Tenemos que avanzar hacia una qu¨ªmica m¨¢s verde, m¨¢s segura y sostenible, que sea capaz de convivir con los ciudadanos y con otros sectores econ¨®micos, como el turismo¡±, ha dicho.