?rika Rodr¨ªguez, directora de la Fundaci¨®n Carolina: ¡°Los latinoamericanos est¨¢n unidos bajo el paraguas del miedo¡±

La directora de la Fundaci¨®n Carolina, ?rika Rodr¨ªguez (Bogot¨¢, 46 a?os), doctorada en relaciones internacionales y experta en seguridad, aprovecha una visita a Chile para analizar c¨®mo el crimen organizado ha afectado a las sociedades en Am¨¦rica Latina. La soci¨®loga advierte en el Centro Cultural de Espa?a, en el municipio de Providencia, que el miedo que genera las altas tasas de delincuencias suele venir acompa?ado de polarizaci¨®n pol¨ªtica, pol¨ªticas de mano dura o el punitivismo. ¡°En la b¨²squeda de la seguridad podemos perder la libertad¡±, se?ala Rodr¨ªguez, quien en su apretada agenda, sostuvo un encuentro con la expresidenta Michelle Bachelet (2006-2010 y 2014-2018), para discutir los problemas que aquejan a la regi¨®n.

En su paso por el pa¨ªs sudamericano la segunda semana de agosto, la directora de la Fundaci¨®n Carolina, que anualmente entrega becas para que iberoamericanos puedan realizar estudios de posgrado en Espa?a, tambi¨¦n se reuni¨® con la rectora de la Universidad de Chile, Rosa Dev¨¦s, con la de la Universidad Tecnol¨®gica Metropolitana, Marisol Dur¨¢n y con la secretaria ejecutiva del Consejo de Rectoras y Rectores de las Universidades Chilenas (CRUCH), Ang¨¦lica Bosch, con el objetivo de estrechar relaciones con instituciones de educaci¨®n superior.

Pregunta. En Chile estamos viviendo una ola de cr¨ªmenes, caracterizados por un mayor n¨²mero de homicidios y m¨¢s violentos, que antes no eran comunes. Como experta en seguridad, ?C¨®mo ha visto el caso chileno?

Respuesta. Lo dram¨¢tico de esto es que no es chileno. El problema es que estamos afrontando en un problema regional. Algo generalizado en toda la regi¨®n es que la gente tiene miedo y eso es fundamental porque el miedo no nos permite vivir libres. Y, cuando la libertad se ve coartada por el miedo, entonces vienen otros agentes peligrosos como, por ejemplo, la polarizaci¨®n pol¨ªtica, las pol¨ªticas de mano dura o el punitivismo. Es un tema que hay ver con mucho cuidado porque en la b¨²squeda de la seguridad podemos perder la libertad. Y el caso de Chile es muy interesante porque ha sido un proceso en el que ha habido un aumento importante de violencia, que tambi¨¦n han vivido otras capitales como Montevideo, donde antes no se ve¨ªa violencia. Lo que tenemos que preguntarnos es ?Cu¨¢les han sido las din¨¢micas que han permitido que esto ocurriera? Porque no es solamente la presencia de un actor criminal lo que genera la violencia, tambi¨¦n son las din¨¢micas de relaciones, las oportunidades que se crean por carencias del sistema judicial y c¨®mo se ancla eso con las deficiencias sociales, si hay un nicho de vulnerabilidad que es aprovechado por el crimen organizado.

P. ?El crimen organizado vino a suplir necesidades?

R. A suplir necesidades y a aprovecharse de carencias que tenemos en algunos sectores, a crear mercados ilegales, porque no es solo el mercado del narcotr¨¢fico, hay muchos mercados ilegales m¨¢s de los que ellos se nutren.

P. ?C¨®mo est¨¢ enfrentando Am¨¦rica Latina este fen¨®meno? ?Est¨¢ unida?

R. Desafortunadamente no est¨¢ unida, no est¨¢ unida para esto ni para la mayor parte de temas. Hay un d¨¦ficit regional de discurso, hay una cosa com¨²n que es el miedo, los latinoamericanos est¨¢n unidos bajo el paraguas del miedo. Y hay otro punto, que desafortunadamente ha funcionado muy bien, es que las cadenas de valor agregado del crimen s¨ª se han articulado muy bien entre ellas, aprovechando lo que hab¨ªa en cada pa¨ªs.

P. Se ha fusionado lo local con lo internacional.

R. Exactamente, entonces lo que no hemos conseguido nunca desde el punto de vista legal, de crear una cadena de valor agregado regional, el crimen organizado lo aprovech¨®.

P. Y en este problema, ?C¨®mo se involucra la academia?

R. Este es un problema de todos: aqu¨ª tiene que estar la academia, el sector privado, los pol¨ªticos y hay que crear di¨¢logos porque a todos nos afecta y porque la p¨¦rdida de democracia nos afecta tambi¨¦n a todos. Si damos respuestas que violan los derechos humanos, si hacemos pol¨ªticas que crean inseguridad jur¨ªdica, las propias empresas lo van a resentir. Entonces, hay que salir de esta situaci¨®n con un di¨¢logo amplio. La universidad concretamente tiene que plantear an¨¢lisis y propuestas de salida, pero tambi¨¦n oportunidades, porque no nos podemos olvidar que la educaci¨®n cumple una funci¨®n p¨²blica. Entonces, la universidad hay que articularla en su rol de investigaci¨®n y de an¨¢lisis, pero tambi¨¦n en su papel de actor social relevante.

P. Otro tema regional es la crisis venezolana, ?C¨®mo ve que se ha abordado a nivel regional?

R. Es un problema muy grave y vemos con mucha preocupaci¨®n la falta de transparencia en un proceso electoral. Evidentemente queremos que los venezolanos vivan en democracia y que se respete el resultado de las urnas. Pero, por otro lado, hay una cosa muy preocupante y es que Venezuela siempre ha sido un polarizador regional, no por s¨ª misma, sino porque genera bloques dentro de la regi¨®n. Al final se vuelve un arma arrojadiza entre pa¨ªses, pero, m¨¢s grave a¨²n, es que hay una utilizaci¨®n y banalizaci¨®n de la diplomacia. Entonces, que se rompan las relaciones diplom¨¢ticas entre dos pa¨ªses por el cuestionamiento que se hizo por parte de Chile y otros pa¨ªses es muy grave. Romper las relaciones diplom¨¢ticas, no es que dos presidentes se dejen de hablar entre s¨ª, es romper todo el proceso de relacionamiento, de protecci¨®n de los ciudadanos de uno y otro pa¨ªs, de interacci¨®n que permite a las empresas trabajar. La ruptura de la diplomacia no nos permite resolver los problemas comunes: c¨®mo vamos a hablar de migraci¨®n si tenemos rotas las relaciones, c¨®mo vamos a hablar de tr¨¢ficos criminales, c¨®mo vamos a hablar de cambio clim¨¢tico, sin las relaciones externas y la diplomacia no se pueden abordar con la seriedad que merecen.

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