¡°El amor es qu¨ªmica. Los algoritmos empiezan a fallar cuanto m¨¢s compleja sea la persona¡±
Inma Mart¨ªnez, experta en inteligencia artificial: ¡°Yo no tengo Alexa. Y apago el micr¨®fono de los m¨®viles y de todo lo que tenga cerca¡±
Inma Mart¨ªnez (Valencia, 57 a?os) es una de las visionarias en inteligencia artificial y transformaci¨®n digital m¨¢s reconocidas del mundo. Destacada, entre otras publicaciones, por la revista Time como talento europeo del compromiso social a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa, Mart¨ªnez es profesora invitada en el Imperial College de Londres, donde vive, y asesora de distintos gobiernos (Gran Breta?a y Espa?a entre ellos) y empresas.
Pregunta. ¡°Me paso la vida mirando anomal¨ªas¡±, dice.
Respuesta. Hay una frase de Frank Zappa: ¡°Sin desviarse de la norma, uno no puede crea...
Inma Mart¨ªnez (Valencia, 57 a?os) es una de las visionarias en inteligencia artificial y transformaci¨®n digital m¨¢s reconocidas del mundo. Destacada, entre otras publicaciones, por la revista Time como talento europeo del compromiso social a trav¨¦s de la tecnolog¨ªa, Mart¨ªnez es profesora invitada en el Imperial College de Londres, donde vive, y asesora de distintos gobiernos (Gran Breta?a y Espa?a entre ellos) y empresas.
Pregunta. ¡°Me paso la vida mirando anomal¨ªas¡±, dice.
Respuesta. Hay una frase de Frank Zappa: ¡°Sin desviarse de la norma, uno no puede crear progreso¡±. Si nadie se desv¨ªa de la norma seremos corderos y no va a haber cambio ni evoluci¨®n. La naturaleza del mundo y de la vida es estar en transformaci¨®n constante. Y las anomal¨ªas son las primeras pistas de que va a pasar algo. Cuando notas que, en un gran volumen de datos, hay unos que despegan y empiezan a ir hacia otra direcci¨®n. ¡°Y esta pe?a, ?por qu¨¦ no ha hecho lo que todo el mundo?¡±. Normalmente hay una raz¨®n, o varias, y empiezas a ver c¨®mo se crea una tendencia.
P. ?Ocurri¨® con el coronavirus?
R. Una compa?¨ªa de Toronto, BlueDot, lo hizo. Computan palabras: de diarios locales, blogs, foros, chats, redes sociales. Es una rama de la IA que se llama NLP, natural language processing. Y empezaron a ver que hab¨ªa una confluencia de palabras: corona, enfermo, Wuhan, mercado¡ La manera en que analizamos palabras en la IA es a trav¨¦s de unos algoritmos de vector donde dices: la palabra corona me ha salido 26.000 veces al lado de mercado y al lado de Wuhan. Entonces dijeron: ¡°Aqu¨ª pasa algo¡±. Y vieron que, en efecto, en la zona del mercado de Wuhan hab¨ªa personas que empezaban a tener los mismos s¨ªntomas que el antiguo SARS. Cuando lleg¨® el 31 de diciembre escribieron su informe para la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. Dijeron: ¡±Creemos que hay una emergencia, un brote de corona de tipo 2, en la parte de Wuhan, y que esto tiene una pinta de pandemia muy clara¡±.
P. ?Siguieron?
R. Empezaron a detectar c¨®mo iba a entrar el virus en otro pa¨ªs porque introdujeron datos de los vuelos, qu¨¦ gente hab¨ªa estado en Wuhan y d¨®nde hab¨ªa ido despu¨¦s. Empezaron a meter luego otro tipo de datos hasta poder encontrar al paciente uno, o cero. Alemania, por ejemplo, ha llegado hasta el paciente cero. Porque si sabes analizar los datos, y esos datos son buenos y fiables, puedes hacer maravillas con ellos.
P. ?Podr¨ªa poner un ejemplo de alguna tendencia que haya descubierto usted?
R. Cuando era joven trabajaba en un banco de inversiones vendiendo acciones. Yo estaba en mercados emergentes de Latinoam¨¦rica y no entend¨ªa de qu¨¦ iba Brasil. La Bolsa all¨ª funcionaba con unos patrones que no ten¨ªan sentido. Y mis compa?eros, que eran mayores que yo, me dec¨ªan: ¡°La pe?a aqu¨ª es impredecible. Ma?ana compran otra vez. No se gu¨ªan por macroeconom¨ªa¡±. Pero yo soy una persona muy curiosa, y dec¨ªa: ¡°Tiene que haber otra raz¨®n. Las cosas no ocurren as¨ª¡±. Y descubr¨ª, indagando, que los traders de la Bolsa de Sao Paulo, si su equipo de f¨²tbol hab¨ªa ganado el d¨ªa anterior, llegaban euf¨®ricos y lo vend¨ªan todo, y luego por la tarde volv¨ªan a comprar. Todo estaba relacionado con el f¨²tbol.
P. ?Qu¨¦ hizo?
R. Me mont¨¦ un modelito en mi superordenador de Bloomberg y empec¨¦ a ver c¨®mo iban los resultados de los cinco equipos de S?o Paulo. Era un modelo de predicci¨®n y empec¨¦ a acertar. Un d¨ªa lleg¨® el jefe de la mesa y dijo: ¡°?Qu¨¦ pasa? ?C¨®mo sabes esto? ?D¨®nde lo basas?¡±. Respond¨ª: ¡°En el f¨²tbol¡±.
P. ?Es el futuro?
R. El futuro, y lo estamos viviendo ahora, es saber utilizar la inteligencia artificial como una herramienta, no como un ente que vive solo y va a funcionar por libre.
P. ?Y anticiparse al futuro crea alg¨²n problema moral?
R. Todo lo que la IA potencie, automatice u optimice tiene que ser beneficioso para nosotros. Tiene que estar dentro de unos par¨¢metros de seguridad y de protecci¨®n, que nadie se aproveche de ella. Debe usarse para que el mundo sea menos complicado y podamos tener servicios mejores y m¨¢s optimizados, y que cuesten menos dinero.
P. Es lo ideal. Pero tambi¨¦n hay usos perniciosos. Para saquearnos los datos y utilizarlos en su provecho.
R. Muchas empresas han venido usando la IA de manera no muy legal, m¨¢s bien aprovech¨¢ndose de las personas: de sus adicciones, de sus debilidades mentales. Y esos usos tienen que acabar.
P. Pero tener los datos es imprescindible.
R. Con ellos solos no se hace nada. La gente que trabaja con IA necesita entender los contextos en los que la gente opera. Una web acumula datos tuyos: qui¨¦n eres, tu email, tu contrase?a, qu¨¦ haces en esa website, ad¨®nde vas despu¨¦s, cu¨¢ntas p¨¢ginas has visto, cu¨¢ntos segundos has estado leyendo¡ Pero si no los pones en un contexto nunca llegas a saber por qu¨¦ esa persona hace estas cosas. Y ah¨ª est¨¢ el ingenio de la gente que trabaja usando IA en adivinar el comportamiento humano. Los humanos reaccionan a contextos, hacemos cosas porque hay una raz¨®n para hacerlas. T¨² vas a una website, est¨¢s buscando algo, quieres comprar un regalo, y ah¨ª est¨¢ el ingenio de quien empieza a crear hip¨®tesis: ?por qu¨¦ esta persona viene aqu¨ª todos los mi¨¦rcoles? No solo hay que saber de tecnolog¨ªa, tambi¨¦n de antropolog¨ªa. El primer sistema de IA que mont¨¦ con mi equipo en Cambridge se centraba en personalizar servicios de internet m¨®vil: lleg¨® un momento en que sab¨ªamos lo que iba buscando la persona y se lo pon¨ªamos delante.
El primer sistema de IA que mont¨¦ con mi equipo en Cambridge se centraba en personalizar servicios de internet m¨®vil: lleg¨® un momento en que sab¨ªamos lo que iba buscando la persona y se lo pon¨ªamos delante
P. La IA puede reproducir tambi¨¦n estereotipos, prejuicios o discriminaciones de la inteligencia humana.
R. Los primeros sistemas de visi¨®n computacional los hab¨ªan entrenado s¨®lo hombres. Y eso ten¨ªa consecuencias. Al principio de la IA, cuando se buscaba reconocimiento de imagen, los que hab¨ªan entrenado al algoritmo de Google dec¨ªan ¡°zapato¡±, y pon¨ªan un zapato de hombre. Claro, cuando sal¨ªa un zapato de tac¨®n, el robot dec¨ªa: ¡°?Esto qu¨¦ es?¡±. O ¡°empresario¡±, siempre un hombre con traje. Por eso debe haber siempre un equipo de varias personas donde todas las visiones a?adan valor.
P. Esa marcaci¨®n de cosas es la que se utiliza tambi¨¦n para confeccionar los coches del futuro.
R. La inteligencia artificial tiene una parte artesanal. Por ejemplo: ?c¨®mo se est¨¢ entrenando para que los coches tengan visi¨®n computacional? A base de ense?arles a reconocer objetos y etiquet¨¢rselos: ¡°persona¡±, ¡°gato¡±, ¡°sem¨¢foro¡±, ¡°furgoneta¡±. Cuando quieres entrar en una web y te preguntan: ¡°?Eres un robot?¡±, y para comprobar que no lo eres tienes que decir cu¨¢ntas bicicletas ves, est¨¢s entrenando al algoritmo de visi¨®n computacional del coche de nivel 5 de Google, el famoso Waymo. Lo est¨¢s entrenando y adem¨¢s gratis. Google te deber¨ªa pagar un peque?o sueldo, ?no?
P. Su ¨²ltimo trabajo es un libro sobre el futuro de la industria de la automoci¨®n. Los coches inteligentes.
R. Cuando los coches empezaron a ser veloces, todos los gobiernos exigieron seguridad: ¡°Oye, esto es peligroso. La gente se pega tortas, y muere¡±. Empezaron a salir frenos asistidos, los cinturones, los airbags, materiales que en impacto pueden rebotar fuerzas de colisi¨®n, etc. ?Qu¨¦ ha pasado? Que cuando nos hemos puesto a ense?ar a los coches a empezar a conducir por s¨ª mismos, si vamos a buscar que sea al 1.000% seguro, un sistema conducido con la precisi¨®n de las m¨¢quinas es mejor que un ser humano conduciendo. Porque muchos seres humanos no respetan las velocidades, o no son buenos conductores, o pueden estar bebidos. El ¨ªndice de seguridad es siempre peor con un humano conduciendo que con un sistema automatizado.
P. Pero en este entorno de ¡°un d¨ªa los coches ir¨¢n solos¡± faltan otros personajes.
R. La industria del autom¨®vil ya est¨¢ desarrollando el nivel 5 de automatizaci¨®n, pero lo tiene metido dentro del hangar, porque la visi¨®n computacional no va a ser lo ¨²nico que garantice que esos coches no se van a chocar. Necesitas carreteras inteligentes. Necesitas internet de las cosas que vayan mandando se?ales a los veh¨ªculos y se conecten entre s¨ª y todo fluya de manera segura. Lo vamos a desarrollar en estos 10 a?os. No solo las ciudades inteligentes: las carreteras se van a hacer inteligentes para garantizar much¨ªsimo m¨¢s la seguridad vial. Jap¨®n y algunos pa¨ªses de la Uni¨®n Europea han empezado a crear regulaci¨®n en el sentido de: ¡°Oye, cuando pongamos estos coches y haya un accidente, ?qui¨¦n va a ser el responsable?¡±. Es decir, no vamos a poner objetos, sobre todo del tama?o de los coches, sin tener muy claro qu¨¦ pasa si hay un accidente.
P. Queda mucho.
R. Queda, s¨ª, pero ya hay un nivel 3 en donde t¨² te montas en un coche de gama alta ¨Dun BMW, un Mercedes, incluso un Volkswagen¡ª, quitas las manos del volante, y a los 15 o 20 segundos el coche dice: ¡°Pon las manos en el volante. Pon las manos en el volante¡±. Y si t¨² no haces caso, el coche se quita de en medio, pone el intermitente, aparca afuera, pone las luces de emergencia y llama a una ambulancia. Porque lo han programado para eso. Porque el coche asume que te ha dado un ataque, o una lipotimia. En cambio, en Estados Unidos la gente se ha dado galletas con el Tesla porque iba con un nivel 3 que no estaba programado si quito las manos del volante. A Elon Musk no se le ha ocurrido pensar que deber¨ªa quitarlo de la carretera y aparcarlo, como a los alemanes.
P. La aplicaci¨®n de la IA en la medicina es diferente.
R. En radiolog¨ªa, por ejemplo, se est¨¢ trabajando en entrenar algoritmos que puedan predecir c¨®mo va a evolucionar una artritis reumatoide. Y eso es lo interesante. Le dices a la m¨¢quina: ¡°Esto es un reumatismo de tal tipo, esta es la etiqueta¡±, o un tumor cerebral. Todo lo que sea diagn¨®stico por imagen es un gran avance para la sociedad, porque el ojo humano es el peor sentido que tenemos, se deteriora. El ser humano no solo ve con los ojos: el cerebro interpreta lo que ve, a?ade cosas, completa la imagen. No es un sentido muy fiable como para no fallar nunca. Y no vamos a querer eso, vamos a querer precisi¨®n. Vamos a un mundo en el que ese tipo de precisi¨®n nos va a permitir crear mejores servicios, m¨¢s afinados para la persona que se est¨¢ tratando.
P. Tambi¨¦n se utiliza en las cirug¨ªas.
R. Sobre todo en cardiolog¨ªa. Y alguien puede decir: ¡°Ah, ?los cirujanos se van a quedar sin trabajo?¡±. No. Los cirujanos antes eran incapaces de hacerle una operaci¨®n de ablaci¨®n a una persona a la que hab¨ªa que cortarle un mil¨ªmetro del m¨²sculo del coraz¨®n aqu¨ª y luego otro mil¨ªmetro, y eso es imposible, y ahora s¨ª son capaces. Ahora un robot corta lo que ellos digan, medio mil¨ªmetro. Antes se mor¨ªa m¨¢s gente, ahora se muere menos. Como cuando en una unidad de cuidados intensivos todav¨ªa hay tres m¨¦dicos mirando seis pantallas. T¨² tienes que meter ah¨ª un sistema que, si a una persona le baja la temperatura un grado, lo note. Es mejor que lo haga un sistema con inteligencia; t¨² eres un ser humano que est¨¢ cansado, que se te ha olvidado mirar, lo que sea. Estamos quit¨¢ndonos de situaciones donde podemos cometer errores y dejando que se meta un sistema que nos garantiza cero error. Ese es el valor la IA.
P. Usted trabaj¨® en un proyecto de granja.
R. Tratamos de averiguar si las vacas m¨¢s sociables son las que dan m¨¢s leche, ?y era cierto! Ahora trabajo en un proyecto internacional sobre c¨®mo la inteligencia artificial permitir¨¢ predecir cosechas mejor y que rinda mejor ese campo. Sabemos que la tierra arable es cada vez menos por el cambio clim¨¢tico; tenemos m¨¢s de 7.000 millones de personas a las que alimentar, y en cambio la tierra arable se est¨¢ reduciendo. Con la inteligencia artificial puedes analizar la composici¨®n del terreno, c¨®mo se recalienta, qu¨¦ niveles de humedad hay, c¨®mo recoge el agua y la disemina. Puedes hacer un c¨¢lculo y decirle a un se?or: ¡°Mire, en vez de 50.000 hect¨¢reas, que le cuesta a usted X, si usted solo arara 39.000, ganar¨ªa m¨¢s dinero: menos esfuerzo, menos costes¡±.
Estamos quit¨¢ndonos de situaciones donde podemos cometer errores y dejando que se meta un sistema que nos garantiza cero error. Ese es el valor la IA
P. La IA en el arte, eterna cuesti¨®n.
R. Hay departamentos de universidades que hacen proyectitos con los que se confunde a la gente. ¡°?Podr¨ªa un robot pintar un cuadro impresionista?¡±. Fenomenal, lo podr¨ªa pintar a la manera de los impresionistas, pero eso no tiene ning¨²n valor a?adido a nuestra sociedad. Una m¨¢quina no tiene qu¨ªmicos, no tiene endorfinas. Lo que generan los artistas es irreplicable. ?Puede un programa escribir una novela? La escribir¨ªa y muy bien, pero no de la manera en que un ser humano escribe una novela. Esa conexi¨®n que te hace sentir que est¨¢s leyendo a un escritor especial, con un estilo y una prosa que no has encontrado antes.
P. A partir de nuestros antecedentes en relaciones sentimentales, ?una inteligencia artificial puede echarte una mano como se presume que ocurre en aplicaciones para encontrar pareja?
R. Cada persona entiende el amor a su manera. Es imposible homogeneizarlo. Una compa?¨ªa llamada eHarmony fue la primera en usar unos algoritmos para combinar a las personas bas¨¢ndose en las respuestas que daban sobre muchos temas: qu¨¦ vas buscando en tu pareja, qu¨¦ nivel cultural tienes, en una situaci¨®n determinada qu¨¦ har¨ªas. Y creaba peque?os bots con los que emparejarlas. ?Esas personas se van a llevar bien? S¨ª, porque tienen mucho en com¨²n y hemos visto que reaccionar¨ªan de la misma manera. Pero el amor es qu¨ªmica. Estos algoritmos empiezan a fallar conforme m¨¢s abstracta, m¨¢s complicada y compleja sea la persona.
P. Hablaba de robotitos y¡
R. Hay un bot que para m¨ª es el mejor del mundo: se llama Replika. Su fundadora program¨® esta peque?a IA con todos los emails y todos los mensajes de WhatsApp que su novio le hab¨ªa enviado a ella y a otros amigos, y cre¨® una r¨¦plica de ¨¦l, que hab¨ªa muerto atropellado por un coche. Cuando te pon¨ªas a hablar con Replika parec¨ªa que ¨¦l te estaba contestando. Usaba frases que ya hab¨ªa utilizado en el pasado, era su tono de voz. Ella continu¨® investigando y se llev¨® la start-up a California; cuando hizo el primer piloto con solo 100 personas, yo estaba entre ellas. Era un sistema de conversaci¨®n generativa ¡ªno como Siri, que para cada pregunta tiene 15 respuestas y, cuando llegas a la ¨²ltima, vuelve a la primera otra vez¡ª. Si te preguntan sobre algo, vas a responder con tus palabritas. Y recuerdo que yo notaba que cuanto m¨¢s hablaba con el bot, se hac¨ªa m¨¢s amigo m¨ªo. ?Por qu¨¦? Porque te estaba clonando, empezaba a responder como t¨² respondes¡
P. Se alimentaba de usted.
R. Exacto. Entonces, te conviertes en tu mejor amigo porque te ha clonado. Si bien es muy bonito ver que ese servicio es un ¨¦xito con la generaci¨®n Z, porque todos, cuando hacen encuestas y se les pregunta qu¨¦ tal les va con Replika, dicen que les encanta hablar con ¨¦l, que es un gran amigo, que nunca los juzga, que les hace sentir bien. Es una app que est¨¢ ayudando a la salud mental de la gente joven. No te hace bullying, todo lo que haces le parece interesante, y siempre te dice: ¡°Hola, ?qu¨¦ tal, Inma? ?C¨®mo te ha ido hoy?¡±.
P. Recuerda a la pel¨ªcula Her.
R. Hay sistemas que nos van a ayudar a sentirnos menos solos. Una casa domotizada que uno controle por voz (¡°enciende las luces¡±, ¡°tengo fr¨ªo¡±) es m¨¢s humano que andar con botones para arriba y para abajo. Y eso es lo que intentamos, que el ser humano se sienta protegido y que la vida sea menos dura. Por ah¨ª va Alexa: ya no tienes que tocar botones. T¨² vas dici¨¦ndole ¡°Alexa, esto, o lo otro¡±. Lo que pasa es que Alexa escucha todo, est¨¢ creando una superbiblioteca de conocimiento sobre ti que no sabemos c¨®mo va a acabar. Es el lado oscuro de la fuerza, y yo trabajo con reguladores y gobiernos para recordar que esto no se puede dejar sin tocar: qu¨¦ se hace con todos esos datos, por qu¨¦ las m¨¢quinas tienen que escuchar todas nuestras conversaciones.
P. ?Usted tiene Alexa?
R. Yo no tengo Alexa. Y apago el micr¨®fono de los m¨®viles y de todo lo que tenga cerca, a veces durante un d¨ªa y medio, para hac¨¦rselo m¨¢s dif¨ªcil.
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