¡°La lucha sigue¡±: los j¨®venes retoman las protestas contra la crisis clim¨¢tica
Despu¨¦s de un a?o y medio de pandemia, las protestas contra el calentamiento global vuelven a 16 ciudades espa?olas y otras 1.500 localidades en todo el mundo
La lucha juvenil contra el calentamiento global ha vuelto a las calles este viernes, despu¨¦s de un a?o y medio de no poder movilizarse por la pandemia. La huelga verde ten¨ªa previstas convocatorias en m¨¢s de 1.500 localidades en todo el mundo. En Espa?a, hab¨ªan convocadas por el movimiento Fridays for Future (Juventud por el Clima) marchas en 16 ciudades, entre ellas Madrid y Barcelona. Los j¨®venes espa?oles han retomado la causa bajo el lema ¡°Justicia por el clima¡±, en apoyo a ...
La lucha juvenil contra el calentamiento global ha vuelto a las calles este viernes, despu¨¦s de un a?o y medio de no poder movilizarse por la pandemia. La huelga verde ten¨ªa previstas convocatorias en m¨¢s de 1.500 localidades en todo el mundo. En Espa?a, hab¨ªan convocadas por el movimiento Fridays for Future (Juventud por el Clima) marchas en 16 ciudades, entre ellas Madrid y Barcelona. Los j¨®venes espa?oles han retomado la causa bajo el lema ¡°Justicia por el clima¡±, en apoyo a la primera demanda clim¨¢tica contra el Gobierno, iniciada hace un a?o.
¡°?La lucha sigue!¡±, ha retumbado por la Gran V¨ªa de Madrid este viernes. Al son de tambores, y a pesar de la lluvia un millar de personas ¡ªseg¨²n estimaciones de la Polic¨ªa Nacional; los organizadores sostienen que han acudido alrededor de 10.000¡ª se han reunido en la plaza de Callao y han marchado hasta las puertas del Tribunal Supremo. Portando pancartas en las que se le¨ªa ¡°el clima no puede esperar¡± y ¡°gobierne quien gobierne el clima se defiende¡±, los j¨®venes han celebrado poder volver a las calles para manifestarse: ¡°La pandemia nos impidi¨® reunirnos, pero ahora que se puede hay que aprovechar y reivindicar nuestra lucha¡±, ha defendido Maybritt Langewand, de 19 a?os.
Silvana Briones, una de las activistas de Juventud por el Clima en Madrid, explica que la convocatoria se ha celebrado para visibilizar el pleito clim¨¢tico al que su organizaci¨®n se uni¨® el pasado julio. La primera demanda contra el Gobierno de este tipo ¡ªpresentada en septiembre del a?o pasado por Greenpeace, Ecologistas en Acci¨®n y Oxfam Interm¨®n¡ª busca forzar al Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez a poner sobre la mesa recortes m¨¢s ambiciosos de las emisiones de gases de efecto invernadero que los propuestos hasta ahora. Las normativas aprobada ya en Espa?a se quedan cortas, seg¨²n denuncian los ecologistas: establecen una reducci¨®n del 23% para finales de esta d¨¦cada.
La huelga mundial llega despu¨¦s de que la ONU advirtiera de que la crisis clim¨¢tica se ha acelerado tras la pandemia del coronavirus. A trav¨¦s de un informe, difundido a mediados de septiembre, Naciones Unidas resaltaba que ¡°las concentraciones de gases de efecto invernadero en la atm¨®sfera se mantienen en niveles sin precedentes y condenan al planeta a un peligroso calentamiento futuro¡±. Para Raquel Cerezo, de 18 a?os, el Gobierno espa?ol no est¨¢ cumpliendo con sus responsabilidades: ¡°Estamos aqu¨ª para demandar acciones efectivas, no queremos m¨¢s parches¡±, sentencia. En Madrid, la protesta ha estado protagonizada por los j¨®venes, pero han acudido tambi¨¦n mayores. Cargando una pancarta que rezaba ¡°no hay plan b¡±, Faustina ?lvarez Alonso, de 71 a?os, contaba: ¡°Estoy aqu¨ª por mis nietos, la lucha tiene que ser de los j¨®venes porque el planeta es de ellos¡±.
Adem¨¢s de las protestas en las calles, el activismo contra el cambio clim¨¢tico ha decidido abrir la v¨ªa judicial siguiendo el camino forjado por activistas en pa¨ªses como Holanda, Francia, Alemania y Estados Unidos. ¡°Somos conscientes de que las actuaciones de activismo puro no est¨¢n dando los resultados que necesitamos. Es decir, no han conseguido cambiar las pol¨ªticas p¨²blicas¡±, explica Lorena Ruiz-Huerta, abogada de Greenpeace. Las organizaciones demandantes conf¨ªan en que ¡°si el Tribunal Supremo ve que en la calle este juicio es un clamor y hay mucho respaldo ciudadano, ser¨¢ m¨¢s f¨¢cil que dicte una sentencia favorable¡±, afirma Ruiz-Huerta.
En Barcelona, la coincidencia de la jornada de protesta con el primer d¨ªa de la fiesta mayor de la ciudad y un puente de tres d¨ªas ha restado manifestantes a la convocatoria, que apenas congreg¨® a 300 personas en la plaza de Catalu?a, algunas turistas de paso. Estas cifras quedan muy lejos tambi¨¦n de la manifestaci¨®n del domingo pasado contra la ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona, que concentr¨® a 10.000 personas.
¡°En 2019 esto estaba abarrotado¡±, lamentaba en plaza de Catalu?a Marco del Boca, de 25 a?os. Con un cartel hecho en casa (¡°La mayor amenaza para el planeta es creer que alguien m¨¢s va a salvarlo¡±) alertaba: ¡°Ya no nos queda tiempo, estamos con el agua al cuello y cuando nos demos cuenta no habr¨¢ marcha atr¨¢s. Adem¨¢s, en Europa vivimos en una burbuja, porque las mayores desgracias no ocurren aqu¨ª, aunque somos los principales causantes del cambio clim¨¢tico. Por eso hablamos de justicia clim¨¢tica¡±.
Maria Navarro, estudiante de 23 a?os, lamentaba que el Gobierno no tome ¡°medidas para combatir el cambio clim¨¢tico y este a?o se ha hecho m¨¢s evidente con la voluntad de ampliar el aeropuerto de El Prat. ¡°Ante evidencias del cambio clim¨¢tico como las olas de calor o las lluvias torrenciales de este verano, es urgente tomar medidas dr¨¢sticas¡±, se?alaba esta estudiante. Y a?ad¨ªa: ¡°Medidas que no sean clasistas, porque muchas, como las restricciones de movilidad en coche privado, dejan atr¨¢s a las clases populares¡±. A su lado, N¨²ria Pati?o, de 23 a?os y ambient¨®loga, explicaba la importancia de las acciones individuales. Ella, por ejemplo, es vegana, recicla, practica la econom¨ªa circular, se desplaza en transporte p¨²blico¡ ¡°Pero al final da rabia, porque los mayores impactos al medio ambiente no los hacemos las personas individuales, sino las grandes corporaciones¡±, se quejaba.
Las manifestaciones de este viernes se han celebrado un mes antes de la cumbre del clima de la ONU ¡ªconocida como la COP26¡ª, que tendr¨¢ lugar en Glasgow, en el Reino Unido. Desde Juventud por el Clima han recalcado la importancia de volver a las calles para reclamar el compromiso de los Gobiernos con la mirada puesta en las reuniones del pr¨®ximo noviembre. La ¨²ltima gran marcha clim¨¢tica en Espa?a fue antes de la pandemia, en diciembre de 2019, cuando miles de personas salieron a las calles de Madrid junto a la joven activista Greta Thunberg, impulsora del movimiento de protesta global contra el calentamiento y la falta de acci¨®n de los Gobiernos. Las huelgas estudiantiles de Fridays for Future comenzaron en agosto de 2018, cuando Thunberg decidi¨® parar todos los viernes como protesta ante la inacci¨®n del Gobierno sueco frente a la crisis clim¨¢tica. Meses despu¨¦s las concentraciones llegaron a m¨¢s de 1.000 ciudades.
En Alemania, Thunberg ha estado este viernes en la manifestaci¨®n convocada en Berl¨ªn, donde se han reunido decenas de miles de personas a dos d¨ªas de las elecciones alemanas. En m¨¢s de 470 convocatorias por todo el pa¨ªs, los j¨®venes alemanes han exigido que los candidatos se comprometan a fijar objetivos m¨¢s duros en la lucha contra el calentamiento global. La lucha clim¨¢tica, adem¨¢s, se ha convertido en uno de las grandes focos de los comicios despu¨¦s de que el pa¨ªs se viera en julio golpeado por unas inundaciones que dejaron m¨¢s de 180 muertos y que, seg¨²n los expertos, est¨¢n directamente vinculadas al cambio clim¨¢tico.