Un nuevo oleoducto de 1.443 kil¨®metros de Uganda a Tanzania: ?frica defiende su derecho a contaminar
El proyecto EACOP, a contracorriente de la lucha clim¨¢tica, est¨¢ liderado por la petrolera francesa Total y atraviesa 12 reservas forestales. Criticado por grupos conservacionistas, los pa¨ªses implicados lo reivindican para aprovechar sus recursos
Hilary Aligumisiriza rastrea con mimo y paciencia a los m¨¢s de 60 chimpanc¨¦s que viven en la frondosidad del bosque de Itohya, al oeste de Uganda. A 1.443 kil¨®metros de distancia, Humphrey Mahudi desamarra la barca para monitorizar la salud de la barrera de coral y los manglares en las inmediaciones del Parque Marino de Tanga, en la costa de Tanzania.
Ambos conservacionistas comparten ahora un reto may¨²sculo. El Oleoducto de Petr¨®leo Crudo de ?frica Oriental, conocido como EACOP por sus siglas en ingl¨¦s, un proyecto en construcci¨®n para transportar cada d¨ªa 216.000 barriles de crudo desde el oeste de Uganda hasta la salida al oc¨¦ano ?ndico en Tanzania, pasando por 12 reservas forestales, bordeando el lago Victoria, el m¨¢s grande de ?frica, y afectando hasta 2.000 kil¨®metros de h¨¢bitats protegidos.
Uganda descubri¨® petr¨®leo por primera vez en 2006 a orillas del lago Alberto. Al sur de este pa¨ªs africano, la petrolera Corporaci¨®n Nacional de Petr¨®leo Marino de China (CNOOC) controla los pozos de Kingfisher que guardan el 17% del crudo y, al norte, la francesa Total Energies lidera las extracciones en Tilenga, dentro del ?rea de Conservaci¨®n de Murchison Falls donde se encuentran el 83% restante. Una d¨¦cada despu¨¦s, las petroleras acordaron con los gobiernos de Uganda y Tanzania construir el oleoducto calentado m¨¢s largo del mundo para encontrar una salida al mar (se denomina as¨ª porque transportar¨ªa un crudo viscoso que debe calentarse a 50?C como m¨ªnimo para poder fluir por la tuber¨ªa). El proyecto lo lidera con un 62% de las acciones la petrolera francesa Total Energies, junto a la china CNOOC (con un 8%) y las petroleras de cada pa¨ªs africano (con un 15%).
Aunque la finalizaci¨®n de la nueva infraestructura estaba prevista para 2022, las dificultades para encontrar financiaci¨®n y la pandemia de covid-19 frenaron todo. Hoy no hay ni un kil¨®metro construido del oleoducto, pero ya han comenzado las obras de carreteras y pozos en el oeste de Uganda y los promotores del EACOP esperan que est¨¦ en funcionamiento para poder exportar los primeros barriles a partir de 2025.
Desde hace 11 a?os, Aligumisiriza lidera el equipo de Chimpanzee Trust en el oeste de Uganda. Cuando la organizaci¨®n comenz¨® a trabajar en el entorno de la reserva forestal de Bugoma en 2006 hab¨ªa unos 600 chimpanc¨¦s, pero la llegada de la agricultura comercial como la ca?a de az¨²car ha reducido el bosque y su n¨²mero ha bajado a 390.
¡°Las actividades humanas y la expansi¨®n de la poblaci¨®n ha provocado que ya haya comunidades de chimpanc¨¦s aisladas¡±, asegura Joshua Rukundo, veterinario de oficio y director ejecutivo de Chimpanzee Trust. ¡°Hay parches de bosque muy peque?os de tan solo 10 hect¨¢reas¡±, a?ade.
La construcci¨®n del oleoducto en la cara norte de Bugoma amenaza con cortar el corredor natural con las peque?as reservas de Wambabya e Itohya, por el que las chimpanc¨¦s cruzan de un lugar a otro para reproducirse. ¡°Los corredores se ver¨¢n afectados por el proyecto¡±, asegura Rukundo, que incide en que el oleoducto pasar¨¢ entre los bosques de Bugoma y Wambabya, una zona en la que la propia petrolera francesa admite en su estudio de impacto medioambiental que viven chimpanc¨¦s con ¡°alta sensibilidad al cambio¡±.
A orillas del oc¨¦ano ?ndico, el patr¨®n se repite. Mahudi trabaja desde 2006 en el monitoreo y la supervisi¨®n de los manglares y la barrera de coral del Parque Marino Celacanto de Tanga. La zona, que se extiende a lo largo de 100 kil¨®metros de costa, incluye islas como la de Yambe, y es hogar de especies en peligro de extinci¨®n como las tortugas marinas, el dugongo o el celacanto, uno de los peces m¨¢s antiguos del mundo. ¡°El proyecto de EACOP es un reto para nuestro trabajo. Algunas de las islas en las que trabajamos est¨¢n demasiado cerca del futuro puerto para la exportaci¨®n del petr¨®leo en Chongoleani¡±, apunta Catherine Msina, responsable del parque marino.
En las inmediaciones del futuro puerto, Mahudi monitorea los corales y los manglares. Con un hilo de rafia, delimita los ¨¢rboles del mar, mide el ancho de sus tallos y observa el aspecto de sus hojas. ¡°La mayor¨ªa de los manglares est¨¢n muriendo, por eso es vital que los controlemos¡±, alerta. Despu¨¦s, cargado con una bombona a sus espaldas y una cuerda de 40 metros de largo, el conservacionista se sumerge en el fondo de la costa del oc¨¦ano ?ndico y eval¨²a el pulm¨®n de la vida bajo el mar. ¡°En esta zona est¨¢ el coral m¨¢s susceptible al blanqueamiento, el Acropora palmata¡±, a?ade, mientras anota en su libreta los resultados de lo encontrado. ¡°Si aumenta la temperatura del mar, desaparecer¨¢ con facilidad¡±, a?ade.
Un estudio liderado por investigadores del Centro de Investigaci¨®n y Desarrollo de Oc¨¦anos Costeros del Oc¨¦ano ?ndico (CORDIO, por sus siglas en ingl¨¦s) se?al¨® que los corales de la costa este africana est¨¢n en riesgo de colapso en un periodo de 50 a?os, pero el canal de Pemba en Tanga es uno de los m¨¢s sanos hasta ahora. ¡°Es uno de los pocos lugares del mundo que parece un refugio del cambio clim¨¢tico¡±, asegura Johnson Mshana, coordinador de proyectos en la regi¨®n de la Sociedad de Conservaci¨®n de la Fauna (WCS, por sus siglas en ingl¨¦s). Sin embargo, el oleoducto supone un problema. ¡°La mayor preocupaci¨®n es un derrame, que ser¨ªa catastr¨®fico, pero el tr¨¢fico mar¨ªtimo ya afectar¨¢ de por s¨ª a los corales por la pintura y los combustibles t¨®xicos¡±, asegura el director de CORDIO, David Obura.
El derecho a desarrollar su energ¨ªa
En septiembre, el Parlamento Europeo aprob¨® una resoluci¨®n condenando el proyecto por su impacto medioambiental y de derechos humanos, pidiendo a la empresa francesa Total Energies que, al menos, esperase un a?o antes de comenzar el proyecto. ¡°Algunos de estos diputados de la UE son insufribles y est¨¢n tan equivocados que creen saberlo todo, pero deber¨ªan calmarse. Este es el campo de batalla equivocado para ellos¡±, contest¨® a Bruselas dos semanas despu¨¦s el presidente de Uganda, Yoweri Museveni.
En Uganda, la resoluci¨®n europea gener¨® rechazo al considerarse como un posible freno a su bienestar: ¡°Total Energies va a invertir en Qatar tambi¨¦n y nadie critica eso, ?por qu¨¦ a nosotros?¡±, asegura desde Kampala Rahma Nantongo, presidenta de la Sociedad de Geolog¨ªa y Petr¨®leo de la Universidad de Makerere. ¡°Est¨¢is en una crisis energ¨¦tica por el cierre de Nord Stream y ven¨ªs a un pa¨ªs en desarrollo a decirnos que paremos algo que nos puede beneficiar¡±, a?ade.
¡°Est¨¢is en una crisis energ¨¦tica por el cierre de Nord Stream y ven¨ªs a un pa¨ªs en desarrollo a decirnos que paremos algo que nos puede beneficiar¡±, asegura Rahma Nantongo, presidenta de la Sociedad de Geolog¨ªa y Petr¨®leo de la Universidad de Makerere
En el informe oficial de impacto medioambiental, Total Energies calcula un m¨¢ximo de 18.000 toneladas de CO? al a?o, pero solo contabiliza las emisiones directas del oleoducto principal y en Uganda, que supone solo un 20% de la obra. La Comisi¨®n Holandesa de Evaluaci¨®n Medioambiental critica que la petrolera francesa no especifique las extracciones de petr¨®leo en su proyecto de Tilenga y la ONG estadounidense Desarrollo Inclusivo Internacional calcula que el proyecto emitir¨¢ en total 34 millones de toneladas de di¨®xido de carbono al a?o contando la extracci¨®n y transporte, m¨¢s del doble de las emisiones conjuntas de Uganda y Tanzania.
Hist¨®ricamente, el continente africano es el que menos ha contribuido al cambio clim¨¢tico, con un 3% de las emisiones globales, pero si se reduce a los 48 pa¨ªses al sur del S¨¢hara la cifra baja al 0,55% en comparaci¨®n con un 22% de los pa¨ªses de la UE. ¡°Tienes que ponerte en la situaci¨®n de un ugand¨¦s medio: no hay luz, no hay televisi¨®n, cocinamos con le?a, as¨ª que debemos desarrollarnos poco a poco con lo que hay. Necesitamos un punto de partida¡±, asegura Nantongo. Entre Uganda y Tanzania hay m¨¢s de 50 millones de personas sin acceso a la red el¨¦ctrica y ambos pa¨ªses no llegan a cubrir las necesidades energ¨¦ticas de la mitad de su poblaci¨®n.
El impacto econ¨®mico, ?para qui¨¦n?
El Gobierno de Uganda tiene previsto construir una refiner¨ªa en Kabaale con capacidad para 60.000 barriles al d¨ªa, casi una tercera parte del petr¨®leo transportado, as¨ª como un oleoducto paralelo de 211 kil¨®metros para transportarlo a Kampala, la capital. Sin embargo, en Tanzania no hay previsi¨®n de que pueda refinar parte del crudo, que ser¨¢ exportado directamente. ¡°Para nosotros el petr¨®leo es puramente un negocio¡±, asegura Devotha Cassian, directora de la organizaci¨®n tanzana Coalici¨®n del Norte para las Industrias extractivas y el Medio Ambiente. ¡°Gravaremos cada barril de petr¨®leo. El Gobierno deber¨ªa tener la responsabilidad de utilizar los impuestos para construir colegios, carreteras y centros sanitarios¡±, a?ade Cassian. Sin embargo, ambos pa¨ªses acordaron concesiones tributarias a las petroleras, eliminando el impuesto a empresas extranjeras durante 10 a?os y el IVA a las exportaciones.
El mayor beneficio vendr¨¢ de las participaciones de Uganda y Tanzania en EACOP a trav¨¦s de sus petroleras nacionales. El 15% de cada una supondr¨ªa un ingreso de tres millones de d¨®lares diarios al precio actual del crudo de Brent, pero la volatilidad del mercado, que hace tan solo dos a?os lleg¨® a 18 d¨®lares con la pandemia de covid-19, provoca dudas sobre cu¨¢nto dinero se quedar¨¢ en ambos pa¨ªses.
El impacto econ¨®mico tambi¨¦n se espera en forma de empleo para la poblaci¨®n local. Total Energies calcula que los proyectos de petr¨®leo crear¨¢n casi 12.000 puestos de trabajo directos y 50.000 indirectos. Sin embargo, las personas afectadas por el trayecto del oleoducto reclaman que los trabajos en el sector no son aptos para ellos. La falta de educaci¨®n dificulta el acceso de la poblaci¨®n local a trabajos cualificados en la industria y los requerimientos de titulaciones traban su contrataci¨®n para labores mec¨¢nicas. ¡°En Chongoleani han entrevistado a 16 personas para ser camioneros en la construcci¨®n del puerto, pero les piden un carnet de conducir que no tienen¡±, a?ade Cassian.
A pesar del riesgo para sus trabajos, los conservacionistas entienden la necesidad del proyecto. ¡°El Gobierno quiere el petr¨®leo, la electricidad ser¨¢ m¨¢s accesible y habr¨¢ mejor transporte, pero las mejoras tendr¨¢n un coste¡±, asegura Rukundo. ¡°Es dif¨ªcil detener el desarrollo. El proyecto va a salir adelante y los chimpanc¨¦s se ver¨¢n afectados. Ahora debemos centrarnos en c¨®mo minimizar el impacto¡±, a?ade.
Para ello, varias organizaciones como Chimpanzee Trust y WCS ofrecen su conocimiento del terreno a las petroleras para mitigar las consecuencias. ¡°El Gobierno de Tanzania necesita el proyecto de EACOP, pero hay que buscar un balance econ¨®mico y medioambiental¡±, asegura Mshana desde Tanga. Preguntado por si est¨¢n preocupados por el oleoducto, la respuesta es clara: ¡°Debemos de estarlo. Si hay un derrame, tiene que haber un protocolo claro¡±, finaliza.
Halima Athumani ha contribuido a este reportaje.
Este reportaje fue producido con el apoyo de la organizaci¨®n Journalismfund.eu
Puedes seguir a CLIMA Y MEDIO AMBIENTE en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal