La cumbre del clima pone los focos en el caso del preso pol¨ªtico Alaa Abdelfat¨¢ en Egipto

El intelectual cr¨ªtico y s¨ªmbolo de la oposici¨®n egipcia Alaa Abdelfat¨¢ lleva tres a?os preso tras un juicio expr¨¦s en el que se le conden¨® por difundir ¡°informaci¨®n falsa¡± en redes sociales. A su hermana Sanaa Seif no le hizo falta pronunciar una palabra en la manifestaci¨®n del pasado fin de semana en la cumbre del clima en Sharm el Sheij para mostrar su inquietud. Compungida, nerviosa, a veces con la mirada perdida en el cielo y otras en el...

El intelectual cr¨ªtico y s¨ªmbolo de la oposici¨®n egipcia Alaa Abdelfat¨¢ lleva tres a?os preso tras un juicio expr¨¦s en el que se le conden¨® por difundir ¡°informaci¨®n falsa¡± en redes sociales. A su hermana Sanaa Seif no le hizo falta pronunciar una palabra en la manifestaci¨®n del pasado fin de semana en la cumbre del clima en Sharm el Sheij para mostrar su inquietud. Compungida, nerviosa, a veces con la mirada perdida en el cielo y otras en el suelo, Seif encabez¨® la protesta en silencio entre los activistas que exig¨ªan justicia clim¨¢tica y compensaci¨®n por los da?os del clima. No dijo nada, pero se mostr¨® al lado de todos ellos y se llevaba la mano al pecho cada vez que se ped¨ªa libertad para los defensores de los derechos humanos. ¡°Sabemos que [el Gobierno egipcio] se alegrar¨ªa de su muerte, pero no quiere que ocurra cuando el mundo est¨¢ mirando, pero el mundo est¨¢ mirando¡±, hab¨ªa comentado de forma previa la hermana del preso pol¨ªtico m¨¢s c¨¦lebre de Egipto durante una multitudinaria conferencia ofrecida la semana pasada en la COP. Seif y decenas de organizaciones unidas en la cumbre han contribuido a colocar el caso de Abdelfat¨¢ en el centro de la atenci¨®n pol¨ªtica y activista mundial.

Si el lunes se supo que el preso pol¨ªtico hab¨ªa abandonado su huelga de sed, este martes la familia ha anunciado que tambi¨¦n ha dejado la huelga de hambre comenzada en abril. No se sabe todav¨ªa los motivos de la decisi¨®n, pero la presi¨®n en los ¨²ltimos d¨ªas hab¨ªa llevado a que el primer ministro brit¨¢nico, Rishi Sunak, el canciller alem¨¢n, Olaf Scholz, y los presidentes de Francia, Emmanuel Macron, y de Estados Unidos, Joe Biden, pidieran a las autoridades egipcias su liberaci¨®n en encuentros bilaterales en la cumbre. El comisario de la ONU para los derechos humanos, Volker T¨¹rk, tambi¨¦n solicit¨® a El Cairo el martes la puesta en libertad del intelectual egipcio, alegando que su vida corre un ¡°grave riesgo¡±. Saliendo al paso, la misi¨®n de Egipto en la ONU, establecida en Ginebra, rechaz¨® de forma contundente la solicitud de T¨¹rk. En un comunicado en el que hacen los malabarismos necesarios para evitar nombrar a Abdelfat¨¢ por su nombre, la misi¨®n acus¨® al comisario de ¡°socavar deliberadamente¡± la independencia de la judicatura y tach¨® de ¡°insulto inaceptable¡± que considerara injusta la condena. Varias figuras pol¨ªticas y medi¨¢ticas de Egipto tambi¨¦n han atacado a Abdelfat¨¢ y a su familia desde entonces. La Fiscal¨ªa del pa¨ªs emiti¨® un comunicado el jueves en el que neg¨® la mayor y cuestion¨® que el preso estuviera en huelga de hambre.

El cairota de 40 a?os, ingeniero inform¨¢tico y escritor, es uno de los iconos de la revoluci¨®n de 2011 en Egipto y uno de los intelectuales m¨¢s prestigiosos del mundo ¨¢rabe. Su actividad pol¨ªtica e influencia, sin embargo, le han costado tener que pasar alrededor de tres cuartas partes de la ¨²ltima d¨¦cada entre rejas y ser encarcelado bajo el mandato de todos los dirigentes del pa¨ªs. Su ¨²ltimo periplo carcelario se remonta a finales del 2019, apenas seis meses despu¨¦s de haber vuelto a pisar el asfalto tras cuatro a?os en prisi¨®n. Mientras cumpl¨ªa con un estricto r¨¦gimen de libertad condicional, Abdelfat¨¢ fue arrestado de nuevo y retenido en detenci¨®n preventiva hasta que, en diciembre del 2021, fue condenado a cinco a?os de prisi¨®n tras un juicio expr¨¦s ¡°por publicar informaciones falsas¡±. As¨ª pues, lleva encerrado tres a?os. Desde entonces, el trato en prisi¨®n empeor¨® de forma alarmante, seg¨²n ha denunciado su familia. Y ante las duras condiciones a las que ha sido sometido, Abdelfat¨¢ decidi¨® iniciar una huelga de hambre el 2 de abril. Movido por la falta de avances, y como ¨²ltimo resorte, inform¨® a su familia que el 1 de noviembre escalar¨ªa a una huelga de hambre total. Y el d¨ªa 6, coincidiendo con el inicio de la COP27, dej¨® de ingerir tambi¨¦n agua.

Su madre, la profesora Leila Soueif, se ha desplazado repetidas veces desde el pasado domingo a la prisi¨®n donde se encuentra Abdelfat¨¢, a 100 kil¨®metros de El Cairo, y ha esperado largas horas para recibir una carta de su hijo o alguna prueba de que sigue vivo. No fue hasta ayer lunes que finalmente le entregaron una carta escrita por Abdelfat¨¢ el s¨¢bado, y difundida en las redes sociales, en la que le comunic¨® que aquel mismo d¨ªa hab¨ªa vuelto a beber agua tras seis d¨ªas sin hacerlo, y que sus signos vitales estaban bien. Hoy la familia ha recibido otra misiva en la que el preso cuenta que tambi¨¦n ha dejado la huelga de hambre. De forma reciente, autoridades penitenciarias informaron tambi¨¦n a la familia que el preso hab¨ªa sido sometido a una intervenci¨®n m¨¦dica, seg¨²n inform¨® la hermana Mona Seif, pero no han trascendido detalles. Y aunque su abogado, Jaled Ali, ha recibido desde entonces dos permisos de la Fiscal¨ªa para visitarlo, una vez en prisi¨®n se le ha impedido el paso. El pasado viernes, Mona Seif tambi¨¦n hizo p¨²blico que hab¨ªa presentado una s¨²plica personal dirigida al presidente egipcio, Abdelfat¨¢ Al Sisi, en la que expresa la necesidad de que su hermano sea puesto en libertad. En junio, ella misma ya hab¨ªa presentado una solicitud de perd¨®n presidencial, como parte de su estrategia para agotar todas las v¨ªas legales a su disposici¨®n para resolver el caso. ¡°No est¨¢ en prisi¨®n por publicar en Facebook, est¨¢ en prisi¨®n por hacer a la gente creer que un mundo mejor es posible¡±, dijo Seif en su charla en la COP, que fue interrumpida por el parlamentario egipcio Amr Darwish que tuvo que ser desalojado de la sala por los agentes de seguridad.

Con el inicio de la COP27 y su escalada en la huelga de hambre, Abdelfat¨¢, que consigui¨® la nacionalidad brit¨¢nica hace unos meses gracias a su madre, se ha convertido a ojos de muchos en un s¨ªmbolo de la urgencia de conectar la lucha por la justicia clim¨¢tica con la de las libertades pol¨ªticas y el respeto a los derechos humanos. El propio intelectual egipcio hab¨ªa abordado con preocupaci¨®n en algunos de sus escritos la crisis medioambiental que afronta la humanidad y sus v¨ªnculos con cuestiones de justicia social y transnacional. Figura entre los presos pol¨ªticos destacados por una coalici¨®n de 12 organizaciones de derechos humanos egipcias creada ad hoc para la cumbre precisamente con el objetivo de aprovechar la fuerza del movimiento clim¨¢tico global para esta causa. Una petici¨®n lanzada por esta coalici¨®n en octubre ha recogido 1.400 firmas de 86 pa¨ªses, incluidas de la Red de Acci¨®n Clim¨¢tica (CAN), que une a m¨¢s de 1.800 organizaciones de la sociedad civil de todo el mundo, y activistas de renombre como Greta Thunberg y Naomi Klein.

En los ¨²ltimos d¨ªas tambi¨¦n se han celebrado distintas movilizaciones sociales para expresar solidaridad con Abdelfat¨¢, desde marchas y concentraciones a encendidos de velas, en ciudades como Ramala, Beirut, T¨²nez, Bruselas, Roma, La Haya, Nueva York y Toronto. En el recinto de la COP se celebr¨® otra el jueves en la que decenas de activistas de muy diversas nacionalidades se congregaron para denunciar las violaciones de derechos de los defensores de la justicia clim¨¢tica en el mundo. Vestidos de blanco, como el atuendo de los prisioneros en Egipto, y bajo el lema ¡°No hay justicia clim¨¢tica sin derechos humanos. No hemos sido derrotados¡±, lanzaron sus proclamas sin mencionar el nombre del intelectual ¨¢rabe. Pero el eslogan escond¨ªa el gui?o de llevar el t¨ªtulo de su libro publicado en 2021: No has sido derrotado todav¨ªa. ¡°?Liberadlo a ¨¦l, liberadlo a ¨¦l, liberad a todos!¡±, exclam¨® de forma velada una de las participantes en la protesta, que contaba con permiso de la organizaci¨®n.

Puedes seguir a CLIMA Y MEDIO AMBIENTE en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal