El Banco Mundial advierte del sinsentido de las subvenciones t¨®xicas: ¡°Desperdiciamos billones de d¨®lares¡±
Las ayudas p¨²blicas directas e impl¨ªcitas que, pese a ser da?inas para el ser humano y el medio ambiente, se otorgan a los combustibles f¨®siles, la agricultura y la pesca equivalen al 8% del PIB mundial
El Banco Mundial ha advertido del sinsentido de las subvenciones y ayudas p¨²blicas ¡°t¨®xicas¡± que los pa¨ªses conceden a la energ¨ªa, la agricultura y la pesca, y que da?an al ser humano y al medio ambiente. Un informe de esta entidad financiera presentado este jueves cifra en siete billones de d¨®lares (unos 6,4 billones de euros al cambio actual) las ayudas directas e impl¨ªcitas que se gastan cada a?o en estos tres sectores y que son da?inas. Esa cantidad equivale, nada menos, que al 8% del producto interno bruto (PIB) de t...
El Banco Mundial ha advertido del sinsentido de las subvenciones y ayudas p¨²blicas ¡°t¨®xicas¡± que los pa¨ªses conceden a la energ¨ªa, la agricultura y la pesca, y que da?an al ser humano y al medio ambiente. Un informe de esta entidad financiera presentado este jueves cifra en siete billones de d¨®lares (unos 6,4 billones de euros al cambio actual) las ayudas directas e impl¨ªcitas que se gastan cada a?o en estos tres sectores y que son da?inas. Esa cantidad equivale, nada menos, que al 8% del producto interno bruto (PIB) de todo el planeta, seg¨²n el estudio realizado por el Banco Mundial, una entidad de la que forman parte 189 pa¨ªses y que busca incentivar el desarrollo econ¨®mico en las naciones con menos recursos.
¡°Son billones de d¨®lares que estamos desperdiciando, que estamos tirando y que, sin embargo, necesitamos¡±, ha sostenido Richard Damania, coordinador del estudio y economista jefe del Grupo de Pr¨¢cticas de Desarrollo Sostenible del Banco Mundial. Adem¨¢s, ¡°son billones que est¨¢n haciendo da?o¡±, advierte este investigador, que no tiene ninguna duda de calificar estas ayudas como ¡°t¨®xicas¡±. ¡°Es uno de los aspectos m¨¢s t¨®xicos del desarrollo que tenemos en el mundo¡±, ha a?adido en una videoconferencia con medios de comunicaci¨®n internacionales para detallar los resultados m¨¢s importantes del informe Desarrollo de desintoxicaci¨®n: reformulaci¨®n de subsidios ambientalmente da?inos.
Se trata de ayudas p¨²blicas que, por ejemplo, subvencionan el consumo y la producci¨®n de los combustibles f¨®siles (como el petr¨®leo, el gas y el carb¨®n) que cuando se queman contaminan el aire y emiten los gases de efecto invernadero que est¨¢n tras la crisis clim¨¢tica que padece la humanidad en estos momentos. O ayudas p¨²blicas para el uso de fertilizantes que acaban da?ando el medio ambiente y afectando tambi¨¦n a la productividad de la tierra. O subvenciones a las flotas que incentivan la sobrepesca y el agotamiento de los caladeros y la p¨¦rdida de biodiversidad. ¡°Muchos pa¨ªses gastan m¨¢s dinero en subsidios perjudiciales para el medio ambiente que en ayudas a la educaci¨®n y a la reducci¨®n de la pobreza, asuntos que son esenciales para el desarrollo¡±, ha afirmado Damania.
Los siete billones de d¨®lares que seg¨²n el Banco Mundial se gastan cada a?o en subvenciones t¨®xicas para el ser humano y el medio ambiente incluyen ayudas expl¨ªcitas e impl¨ªcitas. Las expl¨ªcitas son los gastos p¨²blicos directos perjudiciales y ascienden a 1,25 billones de d¨®lares. Y los subsidios impl¨ªcitos cuantifican, seg¨²n los analistas de esta instituci¨®n, los impactos sociales de las externalidades que provocan las ayudas directas y que ascienden a m¨¢s de seis billones de d¨®lares. Dentro de este apartado est¨¢n los ¡°costes para las personas y el planeta de la contaminaci¨®n, las emisiones de gases de efecto invernadero, la congesti¨®n de las carreteras y la destrucci¨®n de la naturaleza que en ¨²ltima instancia resultan de las subvenciones¡±, explica el Banco Mundial.
Esta organizaci¨®n aboga por redirigir las ayudas p¨²blicas como principal arma de lucha contra el cambio clim¨¢tico y los problemas medioambientales. ¡°La gente dice que no hay dinero para el clima, pero lo hay, simplemente est¨¢ en los lugares equivocados¡±, ha resumido este jueves a trav¨¦s de un comunicado Axel van Trotsenburg, director gerente superior del Banco Mundial.
Uno de los casos m¨¢s evidentes es el de las ayudas de los gobiernos a los combustibles f¨®siles. Los pa¨ªses gastaron un total de ¡°577.000 millones en 2021 para reducir artificialmente el precio¡± del petr¨®leo, el gas y el carb¨®n, unos combustibles que ¡°exacerban el cambio clim¨¢tico y causan contaminaci¨®n t¨®xica del aire, desigualdad, ineficiencia y crecientes cargas de deuda¡±, sostiene el Banco Mundial. ¡°Redirigir estos subsidios podr¨ªa desbloquear al menos medio bill¨®n de d¨®lares hacia usos m¨¢s productivos y sostenibles¡±, a?ade esta entidad. La otra cara del problema es el insuficiente monto que se destina a desengancharse de estos combustibles que expulsan el di¨®xido de carbono cuando se queman. ¡°Para subsidiar el consumo de combustibles f¨®siles, los pa¨ªses gastan aproximadamente seis veces lo que prometieron movilizar anualmente en virtud del Acuerdo de Par¨ªs para las energ¨ªas renovables y el desarrollo bajo en carbono¡±, resume el informe.
Pero el calentamiento global no es el ¨²nico problema: ¡°La quema de petr¨®leo, gas y carb¨®n causa siete millones de muertes prematuras al a?o en todo el mundo¡±. Y esta carga ¡°recae principalmente sobre los pobres¡±. A eso se a?aden las hospitalizaciones, bajas laborales y otros gastos vinculados a los da?os que provoca la poluci¨®n y que contribuyen a engordar la partida de lo que en el informe se denomina ayudas p¨²blicas impl¨ªcitas.
Agricultura y pesca
En la agricultura, el Banco Mundial cifra los subsidios directos en m¨¢s de 635.000 millones al a?o y, como advierte Damania, est¨¢n impulsando el uso excesivo de fertilizantes que degradan el suelo y el agua. Al mismo tiempo, tambi¨¦n afectan a la productividad de los cultivos. ¡°Los subsidios para productos como la soja, el aceite de palma y la carne de res¡±, apunta el Banco Mundial, ¡°son responsables del 14% de la p¨¦rdida de bosques cada a?o¡±. En el caso de la pesca, las ayudas p¨²blicas t¨®xicas superan los 35.000 millones cada a?o y ¡°son un factor clave de la disminuci¨®n de las poblaciones de peces, las flotas pesqueras de gran tama?o y la ca¨ªda de la rentabilidad¡± de esta actividad econ¨®mica.
Damania ha insistido en la importancia de redirigir estas ayudas da?inas para dejar de ¡°desperdiciar¡± estas ingentes cantidades de dinero. ¡°Esta es una oportunidad maravillosa¡±, ha a?adido. Pero para ello se necesita comunicar bien la necesidad del cambio para ¡°crear conciencia¡± y ¡°atraer al p¨²blico¡±. De lo contrario, opina este experto, ¡°es muy dif¨ªcil para los responsables pol¨ªticos reformar realmente estos subsidios debido a su magnitud¡±. Los analistas del Banco Mundial han estudiado las experiencias de varios pa¨ªses que han emprendido el camino para redirigir las ayudas p¨²blicas y tambi¨¦n concluyen que en este proceso son b¨¢sicas ¡°las compensaciones¡±, porque ¡°siempre habr¨¢ perdedores¡±. Por eso es necesaria esa compensaci¨®n para los que tienen menos recursos. Por ¨²ltimo, Damania considera tambi¨¦n fundamental que la reforma sea ¡°cre¨ªble¡±, porque ¡°siempre existe el temor de que el gobierno no cumpla sus promesas o que el siguiente gobierno se retracte de esas promesas¡±. ¡°Los pa¨ªses que han seguido estos tres principios han tendido a tener reformas pol¨ªticas exitosas¡±, ha concluido Damania.
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