Paola Tapia: ¡°Hay que garantizar que la movilidad de las mujeres en las ciudades sea segura¡±

En general, las mujeres se mueven de manera diferente a los hombres en las ciudades: ellas suelen hacer m¨¢s viajes cortos, cercanos y relacionados con los cuidados, mientras ellos recorren distancias m¨¢s largas y hacia el trabajo. Pero las redes de transporte p¨²blico se han dise?ado siempre con perspectiva masculina. Para cambiar este panorama, hace casi seis a?os surgi¨® Mujeres en Movimiento, una red que promueve el liderazgo femenino en la movilidad y las ciudades. Una de sus fundadoras es Paola Tapia (Vi?a del Mar, Chile; 47...

En general, las mujeres se mueven de manera diferente a los hombres en las ciudades: ellas suelen hacer m¨¢s viajes cortos, cercanos y relacionados con los cuidados, mientras ellos recorren distancias m¨¢s largas y hacia el trabajo. Pero las redes de transporte p¨²blico se han dise?ado siempre con perspectiva masculina. Para cambiar este panorama, hace casi seis a?os surgi¨® Mujeres en Movimiento, una red que promueve el liderazgo femenino en la movilidad y las ciudades. Una de sus fundadoras es Paola Tapia (Vi?a del Mar, Chile; 47 a?os), que fue la primera ministra de Transportes en Chile y ahora dirige los autobuses metropolitanos de Santiago de Chile, donde aplica la perspectiva de g¨¦nero y apuesta por una r¨¢pida electrificaci¨®n de la flota. Atiende a EL PA?S en Barcelona durante el congreso de la UITP.

Pregunta. ?Cu¨¢ntos autobuses gestiona?

Respuesta. En la regi¨®n metropolitana, que aglutina 34 comunas y unos siete millones de personas, son 6.500 autobuses de siete empresas. El principal reto es consolidar la movilidad el¨¦ctrica, por eso hace seis a?os fuimos de los primeros en Latinoam¨¦rica en introducir autobuses el¨¦ctricos, y ya tenemos 1.900, que es casi un tercio de la flota [por comparar, Madrid tiene 205 de 2.110 y Barcelona, 78 de 1.054]. Tenemos 24 electroterminales para cargar los autobuses, la mitad de las cuales tuvimos que implementarlas en el ¨²ltimo a?o. Somos la capital fuera de China con m¨¢s buses el¨¦ctricos, por lo que somos un referente, y queremos seguir avanzando.

P. ?Por qu¨¦ fund¨® Mujeres en Movimiento?

R. El tema de g¨¦nero y movilidad nos golpea bastante, sobre todo las capitales latinoamericanas. Hay un estudio de la CAF Banco Latinoamericano de Desarrollo que habla que nueve de cada diez mujeres han sufrido acoso en el transporte p¨²blico en Santiago, y son cifras que tambi¨¦n se dan en otras urbes. Si a eso le sumamos los viajes de cuidados que hacen las mujeres, tenemos una movilidad de la cual nos ten¨ªamos que hacer cargo. En Chile elaboramos la primera pol¨ªtica de movilidad y g¨¦nero en 2018 como algo visionario. Con esta realidad, que se vive tambi¨¦n en otros pa¨ªses, creamos Mujeres en Movimiento, que impulsa un programa de liderazgo para mujeres latinoamericanas y de todo el mundo.

P. ?Para qu¨¦ sirve el enfoque de g¨¦nero en la movilidad?

R. Primero podr¨ªamos hacer una distinci¨®n entre el enfoque desde la usuaria y desde el trabajo. Fui la primera mujer ministra del ramo, lo que da cuenta del sesgo masculino que hay en el transporte. En 2013 en Chile ten¨ªamos un 1% de conductoras en el sistema de transporte p¨²blico, y ese n¨²mero lo hemos ido aumentando y solo este ¨²ltimo a?o crecimos un 25% con un programa espec¨ªfico: hoy hay un 7% de conductoras. ?Para qu¨¦ sirve, adem¨¢s de para la igualdad? Uno, mayor seguridad en la conducci¨®n, porque las mujeres tienen menos accidentes; dos, las mujeres tienen mayor empat¨ªa con el usuario, lo que hace una experiencia de viaje distinto; y tres, tienen un mejor clima laboral. Y adem¨¢s se les da una autonom¨ªa econ¨®mica para madres de familia.

P. ?Y para las usuarias?

R. En esto es fundamental hablar de que los n¨²meros de acoso y violencia en el transporte p¨²blico son muy altos, y para nosotros es una prioridad atajarlo. Hacemos campa?as de visibilizaci¨®n, nunca hay que esconderlo. Y hay que trabajar con las empresas y los conductores para que existan protocolos claros de atenci¨®n, de denuncia y de seguimiento. Lo peor que puede pasar que una v¨ªctima de acoso se atreva a denunciar y que quien lo cometi¨® no reciba la sanci¨®n correspondiente. Nosotros tenemos una legislaci¨®n que es bastante dura, pero deben funcionar los mecanismos de acreditaci¨®n de la conducta. Por lo tanto, el funcionamiento de c¨¢maras a bordo de los buses y la r¨¢pida y oportuna denuncia del conductor son vitales para poder perseguir la responsabilidad. Adem¨¢s, hemos creado un programa de paradas seguras y accesibles con bot¨®n de p¨¢nico para alertar si se produce una situaci¨®n de acoso.

P. ?Estas experiencias se comparten con otros pa¨ªses?

R. S¨ª. En Mujeres en movimiento somos m¨¢s de 300 socias y compartimos entre nosotras las buenas pr¨¢cticas. Adem¨¢s, desde el Directorio de Transporte P¨²blico Metropolitano [la entidad que ella misma dirige] acabamos de crear el primer Observatorio Internacional de G¨¦nero y Movilidad que incluye a Buenos Aires, Lima, Bogot¨¢, Ciudad de M¨¦xico, La Paz y Santiago de Chile. Este observatorio tiene dos ejes, compartir las buenas pr¨¢cticas en este ¨¢mbito y generar indicadores para medir los avances en cada capital.

P. ?Se mueven igual las mujeres que los hombres?

R. No, las mujeres se mueven de otra manera. En Santiago, el 65% de las mujeres hacen viajes de cuidados, que tienen que ver con atender a otro, cuidar ni?os, trasladar a menores o personas con discapacidad... Esos viajes son m¨¢s bien cortos, en horarios m¨¢s bien diurnos, y en ellos la experiencia de viaje es muy importante. Sin embargo, un porcentaje similar de hombres se mueve por razones laborales, cuyos trayectos son en general rectos y largos, mientras que las mujeres se mueven en verdaderas redes. Son cifras similares a las de otras ciudades. En Chile hicimos una encuesta y vimos que dos de cada tres mujeres que han sufrido acoso en el transporte p¨²blico dejan de usarlo. Tenemos que garantizar estos viajes de cuidados y que la movilidad sea segura.

P. ?C¨®mo se puede ayudar a esta movilidad de cuidados?

R. La integraci¨®n tarifaria, es decir, que pagues un billete y sirva para hacer transbordos en varios medios de transporte durante una o dos horas, favorece la movilidad de cuidados. Tambi¨¦n ayudan los servicios con itinerarios fijos, la colocaci¨®n de c¨¢maras de seguridad en autobuses y paradas, y los servicios nocturnos. Todo esto ayuda a crear un clima de movilidad segura y accesible.

P. ?En qu¨¦ se nota que la mayor¨ªa de las redes de transporte hayan sido dise?adas por hombres?

R. La planificaci¨®n de transporte muchas veces es dise?ada por el est¨¢ndar de hombre, europeo, alto, ¨¢gil, que no necesita una accesibilidad universal ni otras variables para hacer un viaje seguro. Eso ha dejado muchas veces a las mujeres en un segundo plano, incluso inhabilitando que puedan moverse. En Chile, el 80% de quienes cuidan a una persona con discapacidad son mujeres, y muchas veces se ven privadas de salir de casa por no tener cerca una movilidad p¨²blica segura y accesible. Este golpe que se da con la ciudad a las mujeres es algo que tenemos que ir cambiando. No solo involucra a las adultas, tambi¨¦n a las ni?as y adolescentes, que pueden sufrir acoso, y a las mayores, que tambi¨¦n necesitan seguir ocupando espacio p¨²blico y no siempre tienen accesibilidad.

P. ?Privilegiar al coche es tambi¨¦n una visi¨®n masculina?

R. Absolutamente. En Chile, quien tiene mayor n¨²mero de licencias de conducir son los hombres, que adem¨¢s son los propietarios de los coches. Si vas a una reuni¨®n a mediod¨ªa y solo hay mujeres, piden a gritos tener un servicio de transporte p¨²blico, porque sin ¨¦l no tienen opciones de movilidad (muchas veces no tienen coche o no saben conducir).

P. ?C¨®mo se debe adaptar el transporte p¨²blico a esta movilidad femenina?

R. Con un enfoque integral. En Chile, ellas usan m¨¢s el transporte p¨²blico (un 52% de los viajeros son mujeres), pero tienen que hacerlo con seguridad. Los desaf¨ªos tienen que ver con las nuevas tecnolog¨ªas, pero tambi¨¦n con una infraestructura y con un servicio que sea acorde a sus necesidades, y tambi¨¦n disminuir la siniestralidad de tr¨¢nsito. Los buses el¨¦ctricos, que tienen menos contaminaci¨®n y ruido, mejoran la experiencia de viaje, tambi¨¦n para las mujeres, y la conducci¨®n de las conductoras.

P. ?Qu¨¦ importancia tienen los carriles bici para que las mujeres vayan en bicicleta?

R. Mucha. Yo me muevo en bicicleta al trabajo y prefiero un carril separado que una zona de tr¨¢nsito calmado. Nosotros hemos privilegiado la existencia de los carriles bici separados o ciclov¨ªas, aunque tarda tiempo. Es una prioridad para el Gobierno.

R. ?Qu¨¦ cambia una red de transporte cuando la dirige una mujer?

R. Hemos creado un programa que se llama Creando redes en el que buscamos las extensiones de l¨ªneas, los cambios de paradas y las infraestructuras distintas que nos piden las mujeres. Es una visi¨®n que comparte el ministro de Transportes, Juan Carlos Mu?oz, quien tiene una visi¨®n muy clara respecto al tema de g¨¦nero. Conjuntamente, hemos elaborado esta visi¨®n de que hoy d¨ªa el transporte p¨²blico tiene rostro de mujer porque se acerca al terreno, porque escucha a esas mujeres y su requerimiento. Muchas veces las mujeres que no se ven son las que viven en la periferia, que ganan un sueldo m¨ªnimo, tienen a su cargo a sus hijos... Por eso hay que tener una visi¨®n de equidad territorial y de los autobuses el¨¦ctricos no lleguen solo a la zona de Oriente, m¨¢s adinerada, sino tambi¨¦n a la zona de Poniente en nuestro pa¨ªs, m¨¢s rezagada en lo econ¨®mico.

P. ?Faltan mujeres trabajando en el transporte p¨²blico?

R. Siempre es necesario contar con m¨¢s mujeres. Por eso, Mujeres en Movimiento se ocupa de capacitarlas, de entregarles acciones de liderazgo y de comunicaci¨®n estrat¨¦gica, y prepararlas para asumir desaf¨ªos. En estos seis a?os hemos capacitado a mujeres que hoy en d¨ªa tienen un cargo pol¨ªtico que desempe?an con una mirada distinta y con rostro de mujer.

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