La Pedrera se sumerge en el arte abstracto de Mal¨¦vich a trav¨¦s de un centenar de obras
Barcelona acoger¨¢ hasta el 25 de junio una exposici¨®n que re¨²ne la obra del pintor ucraniano, desde el impresionismo hasta el suprematismo
Un centenar de obras, entre pinturas, dibujos, arquitectotes y libros repasan desde hoy y hasta el 25 de junio en La Pedrera de Barcelona la trayectoria del ucraniano Kasimir Mal¨¦vich (1878-1935), una de las figuras clave de las vanguardias rusas y padre del suprematismo.
La muestra se inicia con los estudios impresionistas, las composiciones simbolistas de su primera ¨¦poca, sus obras fauvistas, as¨ª como las obras de un deliberado primitivismo hasta llegar a sus composiciones cubo-futuristas y al¨®gicas. A esta parte pertenecen obras como Iglesia o El tejado rojo, ambas de 1906. A continuaci¨®n se presenta un cap¨ªtulo especial con los dibujos que Mal¨¦vich realiz¨® en 1913 para el vestuario y la escenograf¨ªa de la ¨®pera Victoria sobre el sol, de Matyushin y Kruchonykh, y que prefiguran el suprematismo (tendencia pict¨®rica considerada como la primera corriente abstracta), per¨ªodo que constituye el n¨²cleo central de la muestra, con trabajos de muy distintas procedencia, especialmente de San Petersburgo y Mosc¨² y de los museos provinciales rusos.
De la Galer¨ªa Tretiakov de Mosc¨² y del Museo Estatal Ruso de San Petersburgo provienen dos de las obras claves del suprematismo de Mal¨¦vich, Cuadrado negro (1929) y Cuadrado rojo (1915), tendencia pict¨®rica que est¨¢ considerada como la primera corriente abstracta. La muestra finaliza con un espacio dedicado a los arquitectotes, piezas arquitecto-escult¨®ricas visionarias, y las obras postsuprematistas en las que el artista retorna a la tem¨¢tica campesina y, formalmente, a la figura. La muestra, que estar¨¢ abierta en La Pedrera hasta el 25 de junio, se cierra con las obras que los expertos han calificado como "postsuprematistas".
En el tramo final de la exposici¨®n, el p¨²blico puede observar diversas fotograf¨ªas de Malevich de 1910, 1913 o 1934-35, cuando, ya enfermo, est¨¢ postrado en la cama. Tambi¨¦n se muestran algunos documentos como su testamento del 9 de agosto de 1932, en el que pide al Estado sovi¨¦tico que se haga cargo de la manutenci¨®n de su familia despu¨¦s de su muerte; el certificado de defunci¨®n fechado el 17 de junio de 1935 o un pase gratuito para viajar en los tranv¨ªas de Leningrado.
La exposici¨®n re¨²ne un total de 102 piezas procedentes del Museo Estatal Ruso de San Petersburgo, la Galer¨ªa Tretiakov de Mosc¨², el Centro Georges Pompidou, el Museo del Teatro y la M¨²sica de San Petersburgo, el Museo de Bellas Artes de Ekaterinenburgo, el Museo Estatal de Arte Contempor¨¢neo de Tesal¨®nica, entre otros, y de distintas colecciones particulares.
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