Elena, Leonora y Soledad
En un di¨¢logo con la autora espa?ola Soledad Pu¨¦rtolas, la escritora mexicana Elena Poniatowska presenta 'Leonora', ¨²ltimo premio Biblioteca Breve de Seix Barral
No hay otra forma de contar una vida intensa que a trav¨¦s de un relato igualmente intenso. La pintora surrealista Leonora Carrington, mexicana de origen ingl¨¦s, no ha asistido este martes a la presentaci¨®n en Madrid de Leonora, la biograf¨ªa que le dedica la escritora y periodista mexicana Elena Poniatowska (Par¨ªs, 1932) y ¨²ltimo premio Biblioteca Breve de Seix Barral; pero como si hubiera estado.
Acompa?ada por la escritora y miembro de la Real Academia Espa?ola Soledad Pu¨¦rtolas, Poniatowska ha abundado en an¨¦cdotas sobre Carrington (Lancashire, 1917): una mujer enamorada a los 20 a?os del pintor alem¨¢n Max Ernst (que le llevaba 24 a?os); convencida de que podr¨ªa detener la Segunda Guerra Mundial (intentaba hablar todos los d¨ªas con Franco para decirle que fungiera como negociador); presa de constantes crisis nerviosas (lleg¨® a pasear desnuda por los pasillos del hotel Ritz madrile?o); capaz de abandonar todo por un amor, el del escritor mexicano Renato Leduc, con el que se mud¨® a M¨¦xico; y que se hizo pintora a base de rechazos. Y todo eso cuando a¨²n no hab¨ªa cumplido 30 a?os.
En la Casa de Am¨¦rica de Madrid, Poniatowska ha recordado con gracia su primer encuentro con la pintora, hace 50 a?os. Llam¨® la atenci¨®n a su veloz adaptaci¨®n a las malas palabras mexicanas. "Estos pendejos me vendieron esta ag¨¹ita que sabe de la chingada", dijo entonces Leonora, seg¨²n ha recordado Poniatowska entre las risas del p¨²blico. "Ya no dice tantas groser¨ªas" -ha matizado la bi¨®grafa de la pintora- "ahora solamente me pregunta, ?c¨®mo te va en esta chingada vida?".
Y pese a que la presentaci¨®n ha coincidido con la celebraci¨®n del D¨ªa Internacional de a Mujer y a que en la charla abundaba el ambiente femenino, para entender la vida de Leonora Carrington se ha hablado tambi¨¦n de los hombres de su vida. Su primera pareja, Max Ernst, "no queda muy bien parado", afirma Poniatowska, que le acusa de machista y conservador. "Aunque ella fue la que lo dej¨® a ¨¦l", apostilla Pu¨¦rtolas. Del hombre que la llev¨® a M¨¦xico, el cronista taurtino Renato Leduc, -"fue feliz, pues parece que no hay nada mejor que casarse con un periodista", ha soltado la autora de La noche de Tlatelolco, ahogando una discreta risita-. Y finalmente, su matrimonio con Emerico Chiki Weisz, fot¨®grafo y figura crucial para la conservaci¨®n de la c¨¦lebre maleta mexicana de Robert Capa, la pareja "que le dio estabilidad".
La escritora y periodista mexicana asegura que Carrington, a sus 94 a?os, se ha convertido en una mujer m¨¢s bien serena, con un profundo amor a los animales -"quien pierde la amistad con su perro, tambi¨¦n pierde la amistad con Leonora", afirma Poniatowska- y que no se ha olvidado de sus ra¨ªces brit¨¢nicas: "Tiene hasta una postal de Lady Di en su casa" ?Y qu¨¦ opina de la novela? "No la ha le¨ªdo. Le he hecho muchas entrevistas y nunca las ha le¨ªdo. No le gusta leer lo que dicen sobre ella. Una vez unas francesas le hicieron una entrevista para radio y me pidi¨® que me llevara la grabaci¨®n. Lo que tiene que ver con ella misma no le importa nada. Como que para ella eso ya pertenece a un mundo extra?o, del que elige retraerse".
Babelia
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