Mehta y Barenboim dirigen a d¨²o

Todo por bien del espect¨¢culo. O por subir audiencias, luchar por nuevos p¨²blicos y vender m¨¢s discos. Toca remangarse en el negocio de la m¨²sica cl¨¢sica, as¨ª que esta tarde en Berl¨ªn, durante la ceremonia de entrega de los Premios Echo, Alemania pudo contemplar por televisi¨®n como Zubin Mehta -ganador de un Echo a su carrera- dirig¨ªa al alim¨®n con su amigo Daniel Barenboim en una entrega retransmitida por televisi¨®n a todo el pa¨ªs.

Tuvo aroma de grammy o de oscar. Un aire de glamour a fuerza de partitura. La alfombra roja se?alaba el camino de las escaleras que suben al Koncerthaus de Berl¨ªn. All¨ª, a las 5 de la tarde comenzaba la entrega de los Premios Echo. Una fiesta de la industria discogr¨¢fica alemana en la que se premian diferentes categor¨ªas del mundillo. Mehta fue recibido con aplausos en pie del p¨²blico despu¨¦s de ser presentado por Barenboim: "Hace 55 a?os que nos conocemos y jam¨¢s nos hemos peleado", aseguraba su colega. Para demostrarlo, fueron v¨ªctimas de una encerrona del presentador, Thomas Gottschalk, e invitados a dirigir juntos cuando les plant¨® dos batutas en la mano.

As¨ª fue como se dio una situaci¨®n tan extra?a como original y la orquesta de la Konzerthaus de Berl¨ªn goz¨® del placer de ser dirigidos a d¨²o por estos dos mitos del podio.

Galard¨®n para Thomas Hampson

Tras los primeros compases de la polonesa de la ¨®pera Eugeni Onegin, de Chaikovski, Barenboim dej¨® solo a Mehta. No quer¨ªa robarle su d¨ªa de gloria -otro m¨¢s-, el premio, al fin y al cabo, era del maestro indio. Otros consagrados como el bar¨ªtono Thomas Hampson recibi¨® su galard¨®n. Pero hubo espacio para j¨®venes talentos como la pianista Yuja Wang. Ella s¨ª que parece entender a la perfecci¨®n el show bussines, as¨ª que con taconazo y vestido de seda verde ce?ido, atado a la espalda con cadenas negras subi¨® al escenario para interpretar con br¨ªo una peque?a Tocata de Prokofiev. Tambi¨¦n fascinaron el contratenor Bejun Mehta, sobrino del maestro: "No he tenido nada que ver con que lo premiaran tambi¨¦n esta tarde", se?alaba su t¨ªo. El s¨®lo se las arregl¨® para arrancar una ovaci¨®n de lujo tras interpretar el aria de Haendel Sento la giogia, de la ¨®pera Amadis de gaula.

Pero hubo sabor latino, adem¨¢s. Un premio para Rolando Villaz¨®n y la otra ovaci¨®n en pie bien larga como reconocimiento a Jos¨¦ Antonio Abreu. El maestro venezolano recogi¨® el Echo a la labor social, un premio m¨¢s para el sistema de orquestas creado por ¨¦l en su pa¨ªs hace 36 a?os y que hoy forma en diferentes n¨²cleos y escuelas de todo el pa¨ªs a 420.000 ni?os.