El cine espa?ol se lleva la peor parte del recorte de los presupuestos

Los augurios, malos, sin duda, para el cine espa?ol se han cumplido tras la entrega de los presupuestos Generales del Estado para 2012, la madre de todos los recortes, detallada esta ma?ana por el Ministerio de Hacienda, Crist¨®bal Montoro en el Congreso de los Diputados. El Fondo de Protecci¨®n a la Cinematograf¨ªa -de donde salen las ayudas a la producci¨®n- ha ca¨ªdo un 35%, de 76 millones a 49, como adelant¨® este peri¨®dico en la edici¨®n impresa de hoy. El Instituto de de Cinematograf¨ªa y las Artes Audiovisuales pierde otro preocupante 35,4% (de 106 millones a 68,86 millones).

Otras unidades de negocio se han visto mejor paradas, como el Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (INAEM), que pasa? de 165,95 millones a 137,68 millones, lo que supone una ca¨ªda del 17%. La Direcci¨®n General de Pol¨ªticas e Industrias Culturales y del Libro pierde 3,4 millones de euros, un 22%. Por ¨²ltimo, la partida de Museos pasa de 204,78 millones a 177,51: esto es, un 12,9%.

Las alarmas se encendieron para el cine espa?ol con la primera entrevista concedida a EL PA?S por el entonces flamante secretario de Estado de Cultura, Jos¨¦ Mar¨ªa Lassalle. ¡°El cine espa?ol ha de saber que tiene por delante un presente complicado¡±. Ese presente no ha tardado en hacerse realidad: en el monumental tijeretazo cultural que esconden las fr¨ªas cifras de los Presupuestos Generales del Estado, adelantadas someramente el viernes y que hoy ha presentado, detalladas en el Congreso de los Diputados, el ministro de Hacienda Crist¨®bal Montoro, el cine se ha llevado la peor parte. El hachazo es mayor que el 21% de recorte adjudicado al Ministerio de Educaci¨®n, Cultura y Deporte en conjunto. Ha llegado hasta el 35% en lo relativo al Fondo Nacional de Cinematograf¨ªa, del que salen las ayudas a la producci¨®n de pel¨ªculas.

El sector del cine, que no ha desplegado en el pasado especial sinton¨ªa, por decirlo de un modo suave, con el PP, y s¨ª ha demostrado un poder de influencia notable en la pol¨ªtica de los sucesivos gabinetes de Cultura de los gobiernos de Zapatero, esperaba con aprensi¨®n el anuncio de estos presupuestos. No hay que olvidar que algunas de las mayores peleas planteadas por el mundo de la cultura provinieron en pasadas legislaturas de las trincheras del cine.

Este mundo ha vivido en los ¨²ltimos meses instalado en el temor de que una era (la de las subvenciones) est¨¢ a punto de terminarse. De momento, los rodajes han disminuido dr¨¢sticamente. Casi nadie se atreve a iniciar uno con la que est¨¢ cayendo.

En los cuatro primeros meses de 2012 (y las cifras son de ayer mismo), se comunicaron al Instituto de la Cinematograf¨ªa y las Artes Audiovisuales (ICAA) ¡ªexiste la obligaci¨®n de anunciar el principio de un filme al menos 15 d¨ªas antes de la fecha elegida para su arranque¡ª un total de 25 rodajes (siete en enero, 11 en febrero, seis en marzo y uno en abril) frente a los 74 del mismo periodo de 2011. Adem¨¢s, la mayor¨ªa de los proyectos comunicados a la Administraci¨®n no son largometrajes, sino cortos o documentales; seg¨²n c¨¢lculos efectuados por este diario, solo se ha comenzado a rodar unos 10 pel¨ªculas de ficci¨®n en 2012.

Cierto es que en el reparto de los recortes todos se llevan lo suyo... y no solo en el mundo de la cultura; recordemos que el de Asuntos Exteriores bate el r¨¦cord ministerial con un 50% de tijeretazo. Tampoco se libran grandes instituciones como el Teatro Real (15%); la Biblioteca Nacional (14,2%, precisamente en el a?o de la celebraci¨®n de los actos de su tricentenario); el Instituto Cervantes (5,4%) o el Museo Reina Sof¨ªa (14%).

Estos porcentajes de rebaja quedan con todo muy lejos de los que complicar¨¢n el futuro del cine espa?ol tal como lo conoc¨ªamos: los 76 millones del presupuesto en 2011 del Fondo Nacional de Cinematograf¨ªa se quedar¨¢n este a?o en 49.

Aunque la cifra tiene truco: de esa cantidad hay que descontar ya los 35 millones (hay quien sube el c¨¢lculo hasta 40) que se aprobar¨¢n en breve mediante orden ministerial y que son los que est¨¢n destinados por ley a pagar las deudas contra¨ªdas por Cultura, las ayudas por taquilla, con las pel¨ªculas estrenadas en el segundo semestre del 2010. Esta orden solo est¨¢ pendiente de ser publicada en el Bolet¨ªn Oficial del Estado para entrar en vigor.

Conviene recordar que de esa partida del ICAA (que cae otro 35%) es de donde salen las aportaciones a los tres festivales (San Sebasti¨¢n, M¨¢laga y Huelva) en cuyo patronato se sienta un representante del ministerio Cultura. Y no se trata precisamente de cantidades peque?as: sin ir m¨¢s lejos, el a?o pasado el festival de San Sebasti¨¢n recibi¨® un mill¨®n de euros, mientras que el de M¨¢laga obtuvo 100.000 euros.

Otra de las partidas del ICAA en entredicho ser¨¢ la destinada a las ayudas a la cooficialidad, que en 2011 contaban con un fondo en torno a los ocho millones de euros (la mitad aportada por la Administraci¨®n central y la otra por los Gobiernos de las comunidades aut¨®nomas). Ese dinero se destina al fomento de producci¨®n de pel¨ªculas en lenguas cooficiales.

Por si este panorama no fuese lo bastante turbio, seg¨²n la todav¨ªa vigente Ley de Cine de 2008, el Fondo Nacional de la Cinematograf¨ªa deber¨ªa ir creciendo hasta 2013 con el fin de alcanzar la cifra de los 100 millones. No hace falta decir que, hoy por hoy, esa quimera presupuestaria se antoja como una meta absolutamente inalcanzable.