¡°No entiendo las cr¨ªticas al retrato de Cascos, con la que est¨¢ cayendo¡±

Antonio L¨®pez conoci¨® a ?lvarez Cascos (Madrid, 1946) cuando el expresidente del principado de Asturias era ministro de Fomento. Le encarg¨® entonces uno de los trabajos ¡°m¨¢s maravillosos posibles¡±: las cabezas escult¨®ricas gigantes para la estaci¨®n de Atocha. Ahora, el artista volver¨¢ a tratar con Cascos para un encargo bien diferente: el retrato protocolario que dar¨¢ cuenta de su paso, entre 2000 y 2004 por la Administraci¨®n central. El exministro escogi¨® a Antonio L¨®pez para que le inmortalizara, y su sucesor, Jos¨¦ Blanco, dio el visto bueno en 2010. El encargo fue formalizado a trav¨¦s de la galer¨ªa del pintor, Marlborough, la misma en la que Mar¨ªa Porto, la tercera esposa de Cascos trabaj¨® como directora. El coste es de 190.000 euros, m¨¢s del doble del pol¨¦mico retrato de Jos¨¦ Bono (82.000 euros).

¡°Todav¨ªa no he cobrado ni un euro¡±, puntualiza el pintor, quien no entiende que la pol¨¦mica est¨¦ creciendo como la espuma. ¡°Con la que est¨¢ cayendo en Espa?a, con unos problemas de una magnitud tremenda, no entiendo las cr¨ªticas al retrato de Cascos.¡±

Antonio L¨®pez adelanta que hasta que no concluya el cuadro de la familia real (sigue manteniendo que lo entregar¨¢ por la festividad de San Juan la semana que viene) no empezar¨¢ el de el pol¨ªtico asturiano. Aunque no ha tomado medidas del retratado, si tiene claro el proyecto. Tendr¨¢ un formato inusual para este tipo de trabajos. ¡°Ser¨¢ un conjunto pict¨®rico-escult¨®rico. La cabeza pintada se mezclar¨¢ con la esculpida. Tambi¨¦n es cierto que tengo que esperar a que a ¨¦l le parezca bien mi planteamiento¡±.

No entiende el artista que el gasto de 190.000 euros pueda ser malentendido por una poblaci¨®n que solo oye hablar de recortes y de paro. ¡°No puedo decir si es mucho o poco. Solo digo que a diario o¨ªmos hablar de cantidades escalofriantes que no sabemos donde est¨¢n¡±. ?Ha influido el conocimiento que ten¨ªa de la esposa de Cascos durante el tiempo en que fue directora de su galer¨ªa?. ¡°No lo creo. Pienso que ha sido m¨¢s cosa de ¨¦l¡±.

El cuadro de Bono

Cuando se le dice que no debiera extra?arse despu¨¦s de la polvareda provocada por el retrato del expresidente Jos¨¦ Bono, obra de Bernardo Torrens, Antonio L¨®pez reitera su sentimiento de dolor, porque le parece terrible que el arte sea objeto de atenci¨®n solo por el coste de las obras.

Al margen del retrato del expresidente del Principado de Asturias, Antonio L¨®pez est¨¢ enfrascado en otros dos nuevos proyectos que tienen a Sevilla como protagonista. Uno es un retrato del rey Juan Carlos en la Maestranza y el otro es un paisaje en el que la ciudad antigua (Giralda, Torre del Oro¡­) se funden con la modernidad. ¡°En el caso del retrato del Rey, financiado por La Real Maestranza, se trata de que la figura del monarca aparezca rodeado de detalles esenciales de Sevilla que a¨²n no tengo muy definidos¡±.

Sobre el paisaje sevillano, explica que en proyecto que quer¨ªa hacer desde hace muchos a?os, pero que no se acababa de decidir. ¡°No quiero que sea de un tama?o mayor a los de Madrid. Tengo vistos varios puntos, pero no me decanto¡±. Concluye asegurando que ni se ha cansado de Madrid ni ha terminado sus Gran V¨ªas pendientes. ¡°Es bueno trabajar en otros proyectos sin que eso suponga que abandono mis temas de siempre¡±.