Los quej¨ªos de la dama del poncho rojo
Un recorrido por los temas m¨¢s paradigm¨¢ticos de Chavela vargas
Se dej¨® el coraz¨®n en Madrid. La canci¨®n de Sabina nunca fue tan cierta. Chavela regres¨® a la Residencia de Estudiantes con 93 a?os para dar su ¨²ltimo concierto en homenaje a Federico Garc¨ªa Lorca. Fue el mejor escenario imaginable para despedirse: ¡°Le dije adi¨®s a Federico, les dije adi¨®s a mis amigos y le dije adi¨®s a Espa?a. Y ahora vengo a morir a mi pa¨ªs¡±.
Aunque Isabel Vargas Lizano naci¨® en Costa Rica, lleg¨® a ser uno de los mitos vivientes de la m¨²sica mexicana. Lleg¨® al pa¨ªs azteca en una ¨¦poca de efervescencia cultural. Un tiempo en el que los artistas orquestaban la cultura ind¨ªgena como veh¨ªculo de autoafirmaci¨®n nacional. En ese ambiente, conoci¨® a los pintores Diego Rivera y Frida Kahlo, al novelista Juan Rulfo y al compositor Jos¨¦ Alfredo Jim¨¦nez. Su imaginario qued¨® marcado para siempre por el M¨¦xico florido y espinoso? de los a?os cuarenta y cincuenta.
A comienzos de los sesenta, la apadrin¨® Jos¨¦ Alfredo Jim¨¦nez, considerado el mayor cantautor de rancheras de todos los tiempos. Fue un momento decisivo en la historia de la m¨²sica mexicana. El cantautor firm¨® sus temas m¨¢s famosos, entre ellos: Que te vaya bonito. Emulando el talante provocador de Kalho, Chavela se encargaba de dar un toque picante a la m¨²sica de Jim¨¦nez: vest¨ªa como un hombre, fumaba, beb¨ªa tequila y llevaba pistola.
En 1961 public¨® su primer disco y desde entonces no par¨® de cantar hasta finales de los setenta. Uno de sus temas m¨¢s exitosos fue Macorina, sobre la famosa prostituta cubana. Luz de luna, Volver, Volver y Toda una vida se encuentran entre sus grandes versiones.
A finales de los setenta tuvo que retirarse debido a sus problemas de alcoholismo. Durante casi quince a?os poco se supo de ella, hasta que el cineasta Pedro Almod¨®var dio un impuls¨® a su m¨²sica incluyendo los temas de la mexicana en su filmograf¨ªa. Desde que son¨® Piensa en m¨ª en Tacones lejanos (1991), su figura resurgi¨® con m¨¢s energ¨ªa que nunca. Su voz era a¨²n m¨¢s ronca que antes pero tambi¨¦n su ¨ªmpetu era m¨¢s ardiente. En esa segunda etapa musical y vital dio los mejores conciertos.
La voz de Chavela apareci¨® en grandes producciones cinematogr¨¢ficas como Frida (2002) de Julie Taymor y Babel (2004) de Alejandro Gonz¨¢lez I?¨¢rritu. Con 91 a?os de edad present¨® su ¨²ltimo disco, Por mi culpa, que incluye d¨²os con grandes artistas como Sabina, La Negra Chacra y la que muchos consideran su heredera musical, Lila Downs. Su versi¨®n de La llorona, un son oaxaque?o sin autor conocido, es casi un himno de ese M¨¦xico tr¨¢gico, de ese folclore devoto de la muerte. Quiz¨¢s, el tema m¨¢s dram¨¢tico de la cantante.
Si Lila es su heredera en M¨¦xico, Sabina es su alter ego af¨®nico en el otro lado del charco. Poco despu¨¦s de conocerla el cantautor le dedic¨® uno de sus temas m¨¢s potentes: En el bulevar de los sue?os rotos. Son muchos los homenajes recibidos en 93 a?os, pero ninguno como esta canci¨®n para describir a la dama de poncho rojo, pelo de plata y carne morena, espejo de una vida derrochadora, apasionada y excesiva: ¡°Se escap¨® de una c¨¢rcel de amor, de un delirio del alcohol, de mil noches en vela, se dej¨® el coraz¨®n en Madrid, quien pudiera re¨ªr, como llora Chavela¡±.
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