Ry Cooder entra en campa?a

A mediados de la pasada d¨¦cada, Ry Cooder (1947, Los ?ngeles) decidi¨® cambiar de actividad. Durante los ochenta y los noventa, le hab¨ªa ido extremadamente bien confeccionando bandas sonoras y realizando discos interculturales. Sin embargo, en 2005 lanz¨® Chavez Ravine, inicio de una trilog¨ªa sobre aspectos silenciados de la historia reciente californiana. Y se dedic¨® a componer canciones propias: sus elep¨¦s cl¨¢sicos, en los a?os setenta, se basaban en piezas ajenas, elegidas con criterios de folclorista.

Lo del cine ha quedado atr¨¢s, afirma. ¡°Colaboraba con directores que han muerto, como Tony Richardson, o con gente tipo Walter Hill o Wim Wenders, que ahora trabajan poco. Hollywood pide soundtracks de m¨¢ximo impacto comercial. Prosperan compositores que est¨¢n especializados en copiar lo que yo hac¨ªa¡­ he visto guiones donde se especifica: ¡®suena m¨²sica a lo Paris Texas¡¯. Prefieren al clis¨¦ antes que al original.¡±

Respecto a sus exploraciones en otras culturas, fue responsable del fen¨®meno Buena Vista Social Club (1997) como productor, aunque la experiencia le dej¨® mal sabor: ¡°Me condenaron por una ley que proh¨ªbe hacer negocios con el enemigo, es decir, con Cuba. Bill Clinton me perdon¨® pero esper¨® al ¨²ltimo d¨ªa que ocup¨® la Casa Blanca. All¨ª estaba yo, entre pol¨ªticos corruptos y financieros ladrones. No me sent¨ª moralmente reivindicado¡±.

Harto de esperar a que le llamaran, Ry decidi¨® obedecer a sus impulsos. Amante de la cl¨¢sica literatura negra, escribi¨® una espl¨¦ndida colecci¨®n de relatos, L. A. Stories (City Lights, 2011). Y se descubri¨® reaccionando musicalmente ante las noticias pol¨ªticas. ¡°Hay una tradici¨®n de topical songs, canciones que comentan la actualidad. Era una especialidad de Woody Guthrie pero tambi¨¦n del primer Dylan. En los setenta, era demasiado perezoso para hacer canciones; ahora, las noticias te ofrecen tantos horrores que es imposible no indignarse. Yo disparo. Disparo canciones.¡±

Lo hizo el pasado a?o, con Pull up some dust and sit down, y lo reitera en Election special (Perro Verde/Warner Music), que se edita el pr¨®ximo 21 de agosto. ¡°No me hago ilusiones de incidir en los resultados de las elecciones. Yo no existo para la radio estadounidense. S¨®lo se me escuchara en algunas emisoras que funcionan con el apoyo econ¨®mico de sus oyentes.¡±

No se imagina llevando ese repertorio al circuito medi¨¢tico de la derecha estadounidense. ¡°?Te refieres a las tertulias de la Fox? ?Al programa de radio de Glenn Beck? Esa gente no acepta la confrontaci¨®n de ideas. Son m¨¢quinas de difundir infamias. Para ellos, Barack Obama es un socialista encubierto, seguramente islamista de religi¨®n y, desde luego, no nacido en los Estados Unidos. Para ellos, la democracia es un inconveniente: Dios, su Dios, exige que gobierne el candidato republicano".

Reducido a la marginalidad, Cooder se puede permitir la munici¨®n gruesa. ¡°Mutt Romney blues se refiere a una historia que ahora se ha conocido: Mitt Romney se iba de vacaciones y at¨® a su perro al techo del autom¨®vil. Era demasiado bueno para perd¨¦rselo: yo hago de perro. Explico lo obvio, que alguien tan cruel tratar¨ªa igual a negros, a pobres, a sin papeles.¡±

Otros enemigos son los hermanos Charles y David Koch, millonarios del petr¨®leo que subvencionan causas extremistas. ¡°En Brother is gone recurro al mito del diablo que te ofrece lo que quieras a cambio de tu alma. Solo que los Koch no saben a cu¨¢l de los hermanos se llevar¨¢ el demonio. Me indigna la ignorancia con que apuestan por medidas laborales, sociales o fiscales que se ha comprobado que causan desolaci¨®n y miseria.¡±

No se crean que los dem¨®cratas se van de rositas. ¡°Qu¨¦ Guant¨¢namo siga funcionando como prisi¨®n es algo que la historia nunca disculpar¨¢ al presidente Obama. Ya s¨¦ que los congresistas republicanos impiden integrar a los prisioneros en el sistema de justicia civil pero Obama deber¨ªa haber dado un golpe en la mesa hace a?os.¡±

Con todo, Cooder votar¨¢ dem¨®crata en noviembre. ¡°Yo no quiero que el Tea Party domine el gobierno federal. Con ellos, todo es posible. Campos de concentraci¨®n para emigrantes ilegales. Aviones sin tripulantes disparando misiles dentro de las fronteras de Estados Unidos. La prohibici¨®n de los sindicatos. La ilegalizaci¨®n retroactiva de los matrimonios gay. No te r¨ªas, todo eso lo he o¨ªdo yo en los medios de la derecha.¡±