¡®?Ay, Carmela!¡¯ suena a ruso

Pongamos como contexto la Guerra Civil espa?ola, como ¨²nicos personajes una joven pareja de artistas c¨®micos formada por Carmela y Paulino, una puesta en escena nada o casi nada poblada, casi minimalista. En el cartel que luce a la entrada del teatro se lee el nombre del texto de Jos¨¦ Sanch¨ªs Sinisterra, ?Ay, Carmela!, y el de la directora de la obra, Mag¨¹i Mira. Pero el alfabeto que se utiliza en los programas de esta obra de teatro es el ruso, as¨ª como los actores, iluminadores, compa?¨ªa, espectadores y el propio teatro, el Fontanka, est¨¢ en San Petersburgo.

Aunque ?Ay, Carmela! se ha representado en 14 pa¨ªses (Roma, Berl¨ªn, Sarajevo y Portugal, entre otros), es la primera vez que un texto de Sanch¨ªs se estrena en Rusia. A pesar de que en Espa?a el teatro ruso es sobradamente c¨¦lebre, en Rusia, uno de los pa¨ªses con m¨¢s cultura teatral del mundo, apenas se conoce la dramaturgia espa?ola. "Me ha costado much¨ªsimo comunicarme con los actores y enamorarlos de esta propuesta, que entendieran que el escenario necesitaba estar casi vac¨ªo, para que reflejara la miseria que les queda a los protagonistas, que son raptados por el bando de los Nacionales. Que entendieran que est¨¢n cayendo bombas, y que sin poner nada m¨¢s que a ellos sobre las tablas, con sus ropas sucias, el mensaje iba a llegar al p¨²blico¡±, recuerda Mira, que asegura que cualquier conflicto b¨¦lico traspasa las fronteras de la lengua y la cultura, ¡°y m¨¢s a¨²n en este texto de Sanch¨ªs, que es universal¡±, a?ade.

"El p¨²blico r¨ªe y llora, aplaude, grita", dice Mira

Finalmente, directora y actores hicieron el mismo viaje de entendimiento, los rusos con la mente puesta en Espa?a y Mira, asegura, ha puesto "una pica en Rusia". Esta directora y actriz en activo ha tenido que luchar contra las dificultades del idioma, de la censura, con las exigencias teatrales y las costumbres de una Rusia con una cultura ¡°en proceso de cambio¡±, dice aludiendo a las recientes detenciones de las integrantes del grupo Pussy Riot. ¡°No hay que olvidar que los actores, que no conocen la historia de Espa?a, ten¨ªan que comprender un argumento con una problem¨¢tica ajena a ellos, con la Guerra Civil espa?ola como tel¨®n de fondo y con un texto en el que se mezclan los momentos m¨¢s tr¨¢gicos con el humor de Sanch¨ªs¡±, puntualiza la dramaturga.

Ser mujer y directora tampoco ha resultado f¨¢cil a la hora de desenvolverse libremente en el proyecto, explica Mira, ¡°la lectura que hacen los directores rusos de la mujer es que somos unas sufridoras, y eso era algo completamente opuesto al personaje de Carmela, que es una luchadora¡±.

Pero no todo han sido dificultades y palos en las ruedas en la aventura sovi¨¦tica de esta escen¨®grafa. Mira agradece el apoyo recibido por parte del Ministerio de Educaci¨®n y Cultura de Espa?a, as¨ª como la labor de los trabajadores de la compa?¨ªa, que han puesto toda la carne en el asador para sacar adelante el proyecto: ¡°He aprendido much¨ªsimo, all¨ª no conocen de horarios, los actores no tienen l¨ªmites a la hora de esforzarse en el trabajo. El equipo de vestuario, maquillaje y carpinter¨ªa se ha volcado con el montaje de ?Ay, Carmela!¡±.

El resultado de este esfuerzo por parte de Mag¨¹i Mira se ver¨¢ el 29 de septiembre en el estreno de la obra en San Petersburgo, aunque los augurios son m¨¢s que positivos a juzgar por el ¨¦xito de las previas: ¡°Ha sido algo inesperado, llenazo total en los pases de las previas, el p¨²blico r¨ªe y llora, aplaude, grita¡±. Mira recuerda, emocionada, que en una ocasi¨®n el p¨²blico estuvo aplaudiendo durante siete minutos seguidos, ¡°los actores y yo ya no sab¨ªamos qu¨¦ hacer. Est¨¢ grabado en v¨ªdeo. Hemos tenido tres excelentes cr¨ªticas que se est¨¢n traduciendo, ?Y todav¨ªa no se ha estrenado!¡±.?????