¡®El mundo es nuestro¡¯, mejor pel¨ªcula en espa?ol para los lectores
'El mundo es nuestro' es la pel¨ªcula m¨¢s sorprendente del cine espa?ol en 2012 Tiene ambici¨®n formal y voluntad de estilo
Este ha sido un a?o importante para el cine espa?ol, aunque, a primera vista, no lo parezca. S¨ª, hemos asistido a una temporada que ha empezado a acusar las primeras consecuencias de una desastrosa pol¨ªtica cultural, pero, tambi¨¦n, hemos vivido la inesperada emergencia de un relevo generacional, pertrechado con toneladas de talento y presupuestos raqu¨ªticos o, mejor, casi inexistentes. 2013 ha sido, en suma, el a?o de Diamond Flash de Carlos Vermut, El se?or de Juan Cavestany, Mi loco Erasmus de los Pioneros del Siglo XXI, Carmina o revienta de Paco Le¨®n¡ y tambi¨¦n de la en¨¦rgica, descarada y carism¨¢tica El mundo es nuestro de Alfonso S¨¢nchez, un Tarde de perros chandalista y desarrapado que, en su primera escena, recordaba tanto a las discusiones bizantinas del cine tarantiniano como al aliento contracultural del legado de los hermanos Garc¨ªa-Pelayo.
Resultado votaci¨®n MEJOR PEL?CULA EN ESPA?OL
- Arrugas 4.685%
- Blancanieves 12.12%
- El artista y la modelo 2.973%
- Elefante blanco 1.680%
- El mundo es nuestro 29.79%
- Extraterrestre 2.132%
- Grupo 7 7.722%
- Infancia Clandestina 25.14%
- Lo imposible 10.53%
- Una pistola en cada mano. 3.23%
En El mundo es nuestro, Alfonso S¨¢nchez y su compa?ero de viaje Alberto L¨®pez llevan a la gran pantalla dos personajes que ya hab¨ªan desarrollado en peque?as piezas colgadas en la red: el Culebra y el Cabesa, dos piltrafas del arroyo que se dir¨ªan sacadas de un viejo tebeo underground, pero que aqu¨ª lidian, ataviados de nazarenos, con una versi¨®n carnavalesca de nuestro presente indignado, precario y resistente. S¨¢nchez, que bord¨® un impactante y s¨®lido papel dram¨¢tico en Grupo 7 de Alberto Rodr¨ªguez, encarna al supuesto carablanca de esta pareja c¨®mica ¡ªy desesperada¡ª cuyo accidentado paso por una sucursal bancaria destapar¨¢ hipocres¨ªas, lacras e imposturas de un desastrado microcosmos donde conviven la corrupci¨®n institucionalizada, la religiosidad vivida como exhibicionismo social, la picaresca de los avasallados y la torpeza y confusi¨®n de las fuerzas vivas.
Viva, imperfecta, pero gratamente sorprendente, la pel¨ªcula tiene ambici¨®n formal y voluntad de estilo: el plano secuencia que relaciona a todos los personajes, en la escena de la irrupci¨®n en la sucursal bancaria, aporta una buena medida de las capacidades de un debutante que se ha fogueado ¡ªy ha crecido¡ª en un territorio donde, posiblemente, aguardan muchas m¨¢s sorpresas para el porvenir del cine espa?ol: el universo YouTube.
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