Desfile ¡®verit¨¦¡¯
Davidelfin dedica su propuesta m¨¢s contenida y vendible a Alicia, su mascota muerta Juanjo Oliva se entrega a su creaci¨®n m¨¢s conocida, el vestido
Alicia, el bull terrier de David Delf¨ªn, muri¨® en octubre. Y el dise?ador ha decidido no solo dedicarle la colecci¨®n de hoy, sino utilizar su nombre como inspiraci¨®n para la primera parte de la presentaci¨®n (supuestamente articulada en torno al cuento de Lewis Carroll). La segunda mitad buceaba en los recuerdos de un viaje a Las Vegas junto a su novio y colaborador, el bloguero Pelayo. Vida y obra sobre la pasarela de la Mercedes Benz Fashion Week Madrid. Un planteamiento que, dada la querencia del creador por el espect¨¢culo, promet¨ªa m¨¢s ambici¨®n teatral que textil, pero que le ha llevado a entregar su colecci¨®n m¨¢s contenida, practicable y comercial.
Una sencillez que, como en muchos desfiles vistos esta semana, se insin¨²a obligada por los rigores de la crisis econ¨®mica. No es el momento para derrochar tela en impracticables ostentaciones experimentales, que no responden ni a las necesidades de la mujer real ni a las demandas de una clientela entregada.
Fiel a los trampantojos ¨Cun cl¨¢sico ya en su firma¨C, Delf¨ªn juega a crear el efecto visual de que faldas y pantalones penden enteros, casi como colgados, de las cinturas de los modelos. Completan su propuesta vestidos inquietos, blazers intachables y sutiles volantes. En definitiva, sastrer¨ªa con intenci¨®n.
El blanco, el color de Alicia, se impone como tono ¨²nico en homenaje y recuerdo a la que fuera su mascota durante 15 a?os. Solo la ¨²ltima salida, en negro, rompe la paleta como met¨¢fora del luto.
Contemplando ese ejercicio de psicoan¨¢lisis p¨²blico, su troupe al completo: Alaska y Mario, Topacio Fresh, Blanca Su¨¢rez, Miguel ?ngel Silvestre, Pep¨®n Nieto, Bibiana Fern¨¢ndez¡ La primera fila de su show acapar¨® m¨¢s flashes que muchos de los desfiles vistos hasta ahora en la MBFMW. Un hecho que habla por s¨ª solo.
Juanjo Oliva tambi¨¦n convirti¨® la pasarela en una suerte de plat¨® donde escenific¨® su reflexi¨®n sobre el vestido. Sof¨¢s, l¨¢mparas y dem¨¢s decoraci¨®n de los a?os sesenta buscaban recrear un ambiente similar al de la pel¨ªcula Un hombre soltero. La escena en la que Julianne Moore se abandona a la embriaguez en su casa maravillosamente vestida para la ocasi¨®n, sirve de argumento al creador para reivindicar el uso de esta prenda m¨¢s all¨¢ del circuito bodas-bautizos-comuniones, que, por otra parte, constituye el sustento alimenticio de buena parte del dise?o espa?ol. As¨ª despliega un cat¨¢logo de vestidos de l¨ªneas f¨¢ciles, colores sencillos y tejidos agradecidos que har¨ªan la boca agua de cualquier compradora de Tom Ford o Valentino.
¡°Nos centramos en el vestido porque es por lo que se nos conoce, y lo que vienen buscando nuestras clientas. Creo que uno tiene que hacer lo que mejor sabe hacer. Hemos dejado el pr¨ºt-¨¤-porter de lado porque ya lo desarrollamos plenamente en Elogy, la colaboraci¨®n que realizamos para El Corte Ingl¨¦s¡±, explica el modisto. Un proyecto, que a juzgar por sus palabras, representa un perfecto ejemplo de la poco com¨²n y muy necesaria colaboraci¨®n entre industria y dise?adores. Oliva ha ampliado su contrato con los grandes almacenes por un a?o y planea lanzar junto a ellos una l¨ªnea de complementos que se comercializar¨¢ el pr¨®ximo oto?o.
Ion Fiz, que abri¨® la jornada de la MBFWM, tambi¨¦n ha estrenado asociaci¨®n con la firma zapatera Iphigenia, cuyos frutos pudieron valorarse sobre la pasarela. En la segunda parte del desfile doble que inaugur¨® el creador vasco, Sara Coleman buscaba subrayar las ra¨ªces artesanales de su firma con un interesante trabajo del tejido. Una lana r¨²stica con efecto salpicado hilvana toda la propuesta, demostrando un nivel de exigencia creativa que, si bien no acaba de satisfacer, es superior a la media de la semana de la moda madrile?a.
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