Vistosa paleta de autodidacta
Dice Gompertz, director de comunicaci¨®n de la Tate de Londres durante siete a?os: ¡°La rica paleta de ocres dorados, verdes abigarrados, marrones chocolate, rosas brillantes, rojos y amarillos est¨¢ contrastada con una seguridad en el toque que s¨®lo puede tener un autodidacta¡±.
Will Gompertz, actual director de arte de la BBC y uno de los 50 pensadores creativos m¨¢s importantes a nivel mundial seg¨²n la revista Creativity, es el autor del reciente libro ?Qu¨¦ est¨¢s mirando? (Taurus) y su precedente descripci¨®n crom¨¢tica se refiere a la obra de Gauguin. ?El autodidactismo de Gauguin y de tantos otros es, por tanto, la mayor fuente de creatividad? ?Quedar¨ªan lastrados quienes fueron dilectos alumnos en los colegios y las academias? La mitolog¨ªa del autodidactismo (del hombre salvaje) puede no ser nueva, pero actualmente hace pensar en los multimillonarios inventores de los softwares contempor¨¢neos, chicos que no han terminado los estudios o han faltado sistem¨¢ticamente a clase.
La figura del genio que todo lo lleva dentro y solo necesita devanarse los sesos para tejer el mejor vestuario ser¨¢ siempre m¨¢s atractiva que la del empoll¨®n que cr¨ªa a base de calentar el asiento. Entre ambos cunde un ancho abanico. Pero lo cierto es que, por lo general, cuando alguien aporta nuevos aires se debe a que ha sustituido las aulas por el parque y la atenci¨®n del o¨ªdo por el ejercicio del ojo, en el caso del pintor.
Pr¨¢cticamente todos los personajes que desfilan por el libro de Gompertz, referido a la pintura de los ¨²ltimos 150 a?os, se han inventado a s¨ª mismos. No quiere decirse con ello que se hayan realizado mediante un solo golpe m¨¢gico como creadores, sino que se han construido a lo largo de su particular bricolaje. Han tomado de aqu¨ª, copiado de all¨¢, recortado del cuadro m¨ªtico para constituirse en un collage que a la larga no ser¨¢ igual a la suma de sus componentes.
Hay pintores que logran su personal distinci¨®n a lo largo del tiempo y otros, en cambio, que encuentran su voz en un plazo muy breve, como el libertino Gauguin o el severo C¨¦zanne. La ventaja de poseer una voz propia es de un valor infinito. Definitivo. Quien en la escritura o en la pintura se expresa a su antojo y con firmeza no hay ojo ni potencia que lo derribe. Pero para ello es necesaria una autoestima trufada de convicci¨®n y la convicci¨®n abrillantada por una experiencia exigente.
Estar solo o sentirse solo ha sido hist¨®ricamente el destino del artista. Estaba solo porque no lo entend¨ªan o lo entend¨ªan mal. Estaba solo incluso cuando parec¨ªa que lo entendieran y la multitud lo aclamaba como a un dios. La creaci¨®n y la divinidad, sin embargo, andan separadas. El artista y tanto m¨¢s cuanto m¨¢s autodidacta es no puede saber con certeza el valor de lo que hace. Llega a saber si aquello vale o no seg¨²n su propio gusto pero el paladar general es, a menudo, aplastante y devuelve pronto a la soledad.
Aunque, en efecto, acaso no haya otro modo de inventar que partiendo de esta soledad productiva. En la escuela espa?ola de negocios I E, el profesor Pascual Monta?¨¦s les inculcaba esta m¨¢xima a sus alumnos: ¡°No hay nada m¨¢s innovador que ser uno mismo¡±.
Y lo mismo vale para otros ¨¢mbitos, sea en la empresa o en el atelier, en el estudio o en el garaje. Lo que nace con una condici¨®n innovadora ha tenido como probable generador a una errante incubadora. Las escuelas que ense?an a programar, a escribir o a pintar cumplen su funci¨®n de escuderos de la imaginaci¨®n, procuran informaci¨®n y colaboran (ojal¨¢) en disuadir a los estudiantes que no tienen vocaci¨®n en el sentido mara?oniano, lo que significar¨ªa no s¨®lo desear ser algo sino valer para ello. Porque es muy hermoso escribir, pintar o tocar el piano, pero nada m¨¢s deprimente que una escritura, una pintura o una interpretaci¨®n correctas. La correcci¨®n se aproxima a la coerci¨®n y quien la renuncia a su libertad. O, en resumidas cuentas, ?c¨®mo ser¨ªa posible crear sin sentirse libre? Y ?c¨®mo podr¨ªa sentirse libre aquel que, en vez de ser aut¨®nomo (autodidacta, independiente), se siente un soldado y soldado, por tanto, al pelot¨®n?
Babelia
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