La leyenda del ¡°anarquista zen¡±

Era un gigante, en todas las acepciones del t¨¦rmino. Un tipo de derechas (aunque a ¨¦l le gustara definirse como ¡°un anarquista zen¡±), amante de las armas, republicano hasta las trancas y ¡ªsobre todo¡ª un hombre brillante, extremadamente brillante. Haber firmado el guion de Apocalypse now hubiera sido suficiente como para entrar en la leyenda, pero lo cierto es que todos parecen haberse olvidado de ¨¦l. Su nombre es John Milius (Misuri, 1944) y un documental, Milius, le rinde homenaje. ¡°?Por qu¨¦ se han olvidado de ¨¦l? No lo s¨¦, quiz¨¢s porque los guionistas son absolutos desconocidos. Si le preguntamos a cualquiera el nombre de cinco grandes guionistas no sabr¨ªa decirte ni uno. Esa es la maldici¨®n de John¡±. En las oficinas de Haven Entertainment, en Beverly Hills, Matthew Perniciaro y Kevin Mann se sientan para hablar sobre uno de los escritores m¨¢s legendarios que pari¨® aquel Hollywood dominado por los mavericks, cineastas surgidos al margen de los grandes estudios que cambiaron el s¨¦ptimo arte. El documental, del que son productores, pretende recordar a las nuevas generaciones de cin¨¦filos qui¨¦n era Milius: ¡°Hemos invertido a?os en este proyecto, aunque val¨ªa la pena intentar conseguir a todos los personajes que nos interesaban. Hay un momento en el documental en el que Martin Scorsese cuenta un visionado en el que estaban Steven Spielberg, George Lucas, Francis Ford Coppola, John y ¨¦l mismo, y explica que despu¨¦s se pasaban horas discutiendo. As¨ª era Hollywood en aquellos tiempos: gente que amaba el cine. Y toda esa gente se adue?¨® de los estudios y los convirti¨® en su casa¡±, relata Perniciaro.

Pero, ?qui¨¦n es John Milius? Milius es el inventor de ¡°Al¨¦grame el d¨ªa¡± de Harry el Sucio; el buen samaritano al que Spielberg llam¨® cuando se atasc¨® en la famosa secuencia del Indian¨¢polis en Tibur¨®n (Milius le escribi¨® un mon¨®logo de 10 p¨¢ginas a Robert Shaw que este se vio incapaz de memorizar y que acab¨® siendo lo m¨¢s memorable de la pel¨ªcula); el hombre al que George Lucas consult¨® infinidad de detalles de su American graffiti; el director de Conan el b¨¢rbaro, Amanecer rojo o El viento y el le¨®n; el productor de la serie Roma para HBO, y uno de los escritores m¨¢s prol¨ªficos de Hollywood entre 1967 y 1985. ?ntimo de los mencionados Coppola, Spielberg y Scorsese y maestro de cineastas tan en boga como Quentin Tarantino y de gur¨²s de la televisi¨®n como Kurt Sutter. Todos y cada uno de ellos aparece en el documental, todav¨ªa un work in progress cuyo primer montaje se proyect¨® hace un a?o en el festival SXSW de Austin.

Escribi¨® ¡°Al¨¦grame el d¨ªa¡± de Harry el Sucio y el mon¨®logo de ¡®Tibur¨®n¡¯

¡°No sabr¨ªa responderte por qu¨¦ todos esos directores y guionistas dejaron de repente de trabajar. No solo Milius, sino Walter Hill, Richard Donner¡­ incluso el propio Lucas o Coppola. De alg¨²n modo este negocio funciona as¨ª: un d¨ªa, simplemente, dejan de llamarte. Mira a Guillermo del Toro, tiene una docena de proyectos en marcha al mismo tiempo, creo que porque ¨¦l, como cualquiera en Hollywood, sabe que llegar¨¢ el d¨ªa en que el tel¨¦fono no volver¨¢ a sonar y mientras est¨¦s ah¨ª, en la cima, tienes que aprovechar cada segundo de tiempo¡±, cuenta Mann. El propio Milius aparece en el documental, con su caracter¨ªstica barba y esa actitud socarrona del que ya lo ha visto todo, soltando an¨¦cdotas como si fuera un lanzallamas. En los ¨²ltimos a?os ha firmado guiones para videojuegos, colaborado (sin acreditar) en proyectos de colegas varios (Tarantino le agradece su colaboraci¨®n especial en los t¨ªtulos de cr¨¦dito de Malditos bastardos) y pulido su libreto para Genghis Khan, que al parecer llevar¨¢ a la gran pantalla el rapero, productor y actor RZA. El resumen m¨¢s cristalino de su inmensa figura lo hace en el propio documental el actor Sam Elliot: ¡°Es un hombre que escribe para hombres. No escribe para mujeres porque es un hombre¡±.