El cine como balneario
En los ¨²ltimos a?os, el cine de Jean Becker se ha convertido una suerte de 'chill out' en versi¨®n original subtitulada
En los ¨²ltimos a?os, el cine de Jean Becker se ha convertido en algo tan supuestamente bals¨¢mico e impermeable a la sorpresa como ir a tomar el t¨¦ a casa de una t¨ªa solterona: una suerte de chill out en versi¨®n original subtitulada, un chill out en forma de mesa camilla forradita de ganchillo, donde celebrar el eterno retorno de la redenci¨®n, los afectos libres de los peligros de la lubricidad y la solidaridad inter-clasista con perfume de campi?a. Mi encuentro con Marilou, adaptaci¨®n de una novela de Eric Holder, autor del libro que inspir¨® la amanerada, pero algo m¨¢s interesante Mademoiselle Chambon (2009), no perturba ese orden de cosas, pero aporta un inesperado toque de distinci¨®n: da la impresi¨®n de que, con esta pel¨ªcula que reitera los ¨²ltimos registros de su filmograf¨ªa, Becker ha querido construir su propio parque tem¨¢tico port¨¢til dedicado a s¨ª mismo.
MI ENCUENTRO CON MARILOU
Direcci¨®n: Jean Becker.
Int¨¦rpretes: Patrick Chesnais, Jeanne Lambert, Miou Miou, Jacques Weber, Xavier Gallais, Rapha?line Goupilleau.
G¨¦nero: Drama. Francia, 2013.
Duraci¨®n: 90 minutos.
Tras auto-citarse de manera algo tosca ¨Cla protagonista llora de desafecto maternal al contemplar una conmovedora escena de Verano asesino (1982), pel¨ªcula del propio Becker-, el cineasta parece querer engrosar su cancionero personal con el Goodbye, Marilou de Michel Polnareff, tras haber dado funcionalidad narrativa a Johnny Hallyday y Jean-Loup Dabadie en Dejad de quererme (2008) y haber levantado una pel¨ªcula entera a partir de la ?lisa de Serge Gainsbourg. Becker toca temas tan caros a s¨ª mismo como los del renacimiento tras el aparente colapso existencial, el cruce de caminos entre personajes aparentemente antit¨¦ticos y la germinaci¨®n del afecto en territorios inesperados, todo ello enmarcado bajo el cl¨¢sico tema del pintor y la modelo: aqu¨ª, la musa devolver¨¢ la inspiraci¨®n al artista convirti¨¦ndole en padre simb¨®lico y ocasional ¨¦mulo de Charles Bronson en primera l¨ªnea de playa.
Por supuesto, tanto el veterano Patrick Chesnais como una Jeanne Lambert, que sabe encarnar los conflictos de una adolescencia problem¨¢tica sin caer en lo irritante, lo dan todo para manifestar a la persona tras sus respectivos personajes. Pero Mi encuentro con Marilou es una de esas pel¨ªculas que se esfuerzan en predicar al ya converso, en acariciar a un p¨²blico ganado de antemano, en no plantear ni un conflicto, ni una idea problem¨¢tica. En suma, el cine como masaje; la platea como un spa del esp¨ªritu; la pel¨ªcula como balneario de hora y media.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.