?Regreso al origen?

?Es el flamenco un invento de los gitanos? ?Y si lo inventaron ellos, debemos concluir que el flamenco viene de la India como al parecer los propios gitanos? M¨¢s de cincuenta a?os de flamencolog¨ªa no han resuelto el enigma; sin embargo, en La Uni¨®n parecen tenerlo claro, all¨ª est¨¢ el origen. Al menos con esta pretensi¨®n se ha presentado en la jornada preliminar de la LIII edici¨®n del Festival Internacional del Cante de las Minas, celebrada anoche en La Uni¨®n y con car¨¢cter de estreno nacional, el espect¨¢culo Flamenco Roots, producido por el propio Festival.

Se trata de un espect¨¢culo formado por cuatro artistas flamencos y por otros tantos indios rajastan¨ªes. El grupo hab¨ªa sido presentado por primera vez el 14 de mayo en el Instituto Cervantes de Nueva Delhi, tras la firma el d¨ªa anterior entre las autoridades espa?olas e indias de un acuerdo para el estudio de las ra¨ªces comunes entre el flamenco y la m¨²sica de Rajast¨¢n, que supone el primer paso del proyecto Las Minas Flamenco Tours, un intento de internacionalizaci¨®n y exportaci¨®n del certamen minero. De hecho, en marzo del a?o pr¨®ximo se celebrar¨¢ en la ciudad india de Jodhpur una reproducci¨®n del Cante de Las Minas, con artistas invitados y concurso incluido. La expansi¨®n seguir¨¢ en los pr¨®ximos a?os en pa¨ªses como Jap¨®n, Estados Unidos o China.

Cuando el excelente cantaor cordob¨¦s Antonio Mej¨ªas comenz¨® a templarse por mineras con el toque del guitarrista unionense Antonio Mu?oz y la percusi¨®n de Josu¨¦ aquello era flamenco; cuando el cantaor se adentraba por alegr¨ªas tambi¨¦n lo era. Si los rajastan¨ªes hac¨ªan su m¨²sica, colorista y vibrante, era su m¨²sica. A veces segu¨ªan la tonalidad de los flamencos, y aquello encajaba perfectamente. En algunos momentos, por ejemplo en el eco de la seguiriya, hab¨ªa melisma en sus voces, algo de todos modos caracter¨ªstico en la m¨²sica cabalis de Pakist¨¢n y la India, un canto muy melism¨¢tico. Hubo momentos en que aquello sonaba con aire familiar. L¨®gico, las m¨²sicas orientalizantes tienen en com¨²n lo modal, y en ellas la actitud, la manera de atacar la m¨²sica, es primordial.

El resultado era de gran belleza. Est¨¢bamos ante ese colorido que reclam¨® el ballet rom¨¢ntico europeo cuando hizo suyo algunos pasos y mudanzas de los bailes espa?oles en el siglo XIX. Lo que se llam¨® el couleur locale, con grandes bailarinas de danza cl¨¢sica incluyendo entre su pas de caract¨¨re bailes de Espa?a. De hecho, la bailaora flamenca Mar¨ªa la Caena y la bailarina india rajastan¨ª, que formaban parte del grupo, adem¨¢s de en solitario bailaron conjuntamente, realizando pirouttes m¨¢s angulosas la india, m¨¢s rotundas la flamenca.

No es la primera vez que se experimenta en la uni¨®n de ambas m¨²sicas. El grupo Indialuc¨ªa lo ha hecho desde hace a?os, pero ellos lo han intentado como una ?imposible? fusi¨®n. En cambio, en este Flamenco Roots, estrenado anoche, lo que hay, en buena medida, es una superposici¨®n de espect¨¢culos.

Hacia el final, ¡°La Canea¡± bail¨® un singular y divertido paso a dos con uno de los m¨²sicos indios, la primera taconeando a la manera flamenca, el segundo respondi¨¦ndole con sus cr¨®talos, una especie de palillos o casta?uelas.

?Flamenco? ?Ra¨ªces flamencas? Qu¨¦ importa. M¨²sica de calidad. El p¨²blico sali¨® sorprendido y feliz.