Instrucciones para matar
Petros M¨¢rkaris, grande de la novela negra, comparte sus secretos de escritura en la UIMP

¡°Ahora llega el momento cr¨ªtico. ?C¨®mo te conviertes en asesino? Y sobre todo, ?a qui¨¦n matar? Es algo tan dif¨ªcil en la realidad como en la ficci¨®n¡¡±. El escritor Petros M¨¢rkaris (Estambul, 1937) permanece sentado ante unos 70 alumnos y mueve sus manos con agilidad mientras habla; las despliega, aporrea levemente la mesa, alza los brazos. Ha llegado la hora de abordar la narraci¨®n, y pide con ¨¦nfasis la atenci¨®n de los estudiantes, que de hecho ya se la prestan. Si en los d¨ªas anteriores las lecciones se centraron en los personajes o en los mandamientos del escritor de novela negra, hoy la pregunta en la sala Riancho de la Universidad Internacional Men¨¦ndez Pelayo es la siguiente: ?C¨®mo contar una historia? El autor, uno de los escritores m¨¢s relevantes de la novela negra contempor¨¢nea, ense?a en una semana, nada m¨¢s y nada menos, c¨®mo convertirse en escritor de intriga.
Lecci¨®n n¨²mero uno. ¡°Los principiantes deben tener la historia completa en su cabeza, as¨ª se sentir¨¢n m¨¢s seguros¡±. Pero lo importante, dice M¨¢rkaris, es que el lector pueda ¡°visualizar el primer cap¨ªtulo¡±. La biograf¨ªa del escritor nada en la diversidad de disciplinas: ha ejercido como profesor de universidad, pero de an¨¢lisis de teatro. ¡°Lo dej¨¦ porque no pod¨ªa con todo; adoro ense?ar porque es muy creativo¡±, relata ya despu¨¦s de la clase, sin denotar asomo de cansancio.
Lecci¨®n n¨²mero dos. Aprovechar la inspiraci¨®n que venga de la literatura, del teatro y del cine. Antes de ser novelista, M¨¢rkaris escribi¨® el guion de una serie de televisi¨®n que por cierto le inspir¨® su primera novela, Noticias de la noche (Tusquets), en la que una periodista de sucesos es asesinada. Adem¨¢s, trabaj¨® como coguionista en cinco de las pel¨ªculas de Theo Angelopoulos. ¡°Que el lector se entretenga con la historia ?important¨ªsimo!¡±, exclama de pronto. ¡°Me viene a la mente cuando de peque?o mi abuela y la suegra de mi t¨ªo se pon¨ªan a contar sus recuerdos por la noche. Pasaban de uno a otro, como Las mil y una noches¡±. En las ense?anzas de M¨¢rkaris se turnan una suave iron¨ªa y el sarcasmo. No siempre es as¨ª. El profesor transmite sus vivencias m¨¢s personales con una emoci¨®n casi de ni?o peque?o. Y rega?a con un punto de malicia al alumno que llega tarde.
Lecci¨®n n¨²mero tres. El criminal debe aparecer entre el cap¨ªtulo tercero y el quinto, no m¨¢s tarde. Adem¨¢s, hay que justificar por qu¨¦ mata y que no hay otra posible salida para ¨¦l o ella. De lo contrario, ¡°es un psic¨®pata¡±. Un ingrediente m¨¢s para narrar la sangre: decidir el momento y lugar adecuados, ¡°y la mentalidad¡± que hay detr¨¢s, porque no es lo mismo un asesino solitario que otro que pertenece a una organizaci¨®n criminal, puntualiza el autor.
Lecci¨®n n¨²mero cuatro. Y aqu¨ª aparece una cuarta lecci¨®n que sobrevuela el seminario de forma latente: el alumno no ha hecho m¨¢s que iniciar el camino. A pesar del llamativo t¨ªtulo ¡ª?cinco pasos para convertirse en escritor de novela negra!¡ª, el profesor que lo imparte no parece estar muy de acuerdo con la sencillez de la f¨®rmula: ¡°Siempre intentamos encontrar en el mundo moderno el atajo para todo, desde la educaci¨®n en Internet, hasta la comunicaci¨®n por correo electr¨®nico¡ ?No existe un atajo para la escritura! Lo siento. Es un proceso largo que consiste en corregir y practicar¡¡±. En otro momento, confesar¨¢: ¡°?A m¨ª nadie me ense?¨® a escribir! El m¨ªo fue un viaje solitario experimentando con distintas formas de escritura¡!¡±.
Est¨¢ claro que los alumnos prefieren emprender el periplo acompa?ados de M¨¢rkaris. Aunque los motivos por los que est¨¢n en el curso son tan variados como la trayectoria de este traductor, dramaturgo, guionista y narrador. Desde la chica santanderina de 19 a?os a quien le gusta escribir y aspira a ser periodista, pasando por el profesor de lengua y de historia bilba¨ªno de 32 que siente curiosidad por c¨®mo funciona un libro por dentro, hasta la profesora ya retirada de ingl¨¦s que ha venido de Barcelona, es ¡°una lectora voraz¡±, ha estudiado griego moderno y admira el sentido del humor de M¨¢rkaris.
Lecci¨®n (pen¨²ltima). No es bueno poner todo en la narraci¨®n. El personaje debe ser descubierto poco a poco. Es necesario confiar en el lector. Petros M¨¢rkaris imita el discurso de un profesor cuando da este consejo. ¡°?Ofrecer una historia masticada! ?Qu¨¦ enfermedad!¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.