Cuando los Beatles no eran estrellas
Fue John el que fich¨® a Paul para su banda cuando eran adolescentes. Hubo otros beatles adem¨¢s de George y antes que Ringo. Hamburgo y The Cavern les curtieron
Como tantos adolescentes en los a?os 50, John Lennon quer¨ªa ser Elvis, y es una iron¨ªa que a?os despu¨¦s se conocieran y no sintonizaran en absoluto. Su madre Julia le pon¨ªa los discos del rey del rock y le hab¨ªa ense?ado a tocar el banjo, pero no lo cri¨® ella sino su t¨ªa Mimi. Al principio de todo, el jefe era John: a los 16 a?os lideraba una banda de imberbes llamada The Quarrymen. El encuentro con Paul McCartney que permiti¨® una alianza extraordinaria de talentos se produjo el 6 de julio de 1957 tras una actuaci¨®n de esa banda en una parroquia del suburbio de Woolton, en Liverpool. Paul, de 15 a?os, hijo de un frustrado m¨²sico de jazz y hu¨¦rfano de madre, se ofreci¨® a unirse con su guitarra. Un a?o despu¨¦s Paul llev¨® al grupo a George Harrison, todav¨ªa un a?o m¨¢s joven, del que dijo a John generosamente: "Es mejor que yo".
Desde el encuentro en la parroquia hasta que The Beatles saltaron a la fama en 1962 pasaron m¨¢s de cinco a?os en los que Lennon, McCartney y Harrison se presentaron bajo distintos nombres con otros muchos m¨²sicos que no llegaron a la cumbre, hicieron el acompa?amiento para otros solistas y se curtieron en los escenarios de Liverpool y Hamburgo. Estas son cinco canciones que ayudan a entender a los Beatles cuando a¨²n no eran estrellas. El valor documental compensa la pobre calidad de las grabaciones de la ¨¦poca.
Un modest¨ªsimo single. In spite of all danger?es la primera canci¨®n original que se conserva y aparece en la primera grabaci¨®n de The Quarrymen, que forman Lennon, McCartney y Harrison junto con?Colin Hanton (bater¨ªa) y John Duff Lowe (piano). La composici¨®n es de Paul y George. Era la cara B del single que grabaron, pag¨¢ndoselo de su bolsillo, en los precarios estudios Persy Philips de Liverpool el 14 de julio de 1958. La cara A era That will be the day, versi¨®n de Buddy Holly.
Con Stu al bajo. En 1960 se incorpora el bajista Stuart Sutcliffe, Stu, que fue quien propuso el nombre The Beatles (inicialmente The Beatals, luego Long John and The Silver Beatles). Cayenne es uno de los raros temas instrumentales de la banda. Compuesta por McCartney, se escucha en una grabaci¨®n hecha en su casa con tres guitarras y un bajo, recuperada por el macrodocumental y triple ¨¢lbum Anthology (1995). A¨²n no eran nadie.
Fogue¨¢ndose en Hamburgo. Unos Beatles hasta entonces muy verdes pasaron largas temporadas actuando en distintos clubes en la canalla ciudad portuaria alemana, donde dieron unos 280 conciertos entre 1960 y 1962. Para emprender el viaje incorporaron al bater¨ªa Pete Best, el primero permanente, y all¨ª se descolg¨® Stu, para dedicarse a la pintura y a su pareja, la fot¨®grafa Astrid Kirchherr, lo que oblig¨® a Paul a coger el bajo. De esta ¨¦poca es esta curiosidad: el bolero B¨¦same mucho en la voz de McCartney, recogida en el disco, no autorizado, Live at the Star Club. "Nac¨ª en Liverpool pero crec¨ª en Hamburgo", dijo despu¨¦s John.
Una banda de acompa?amiento. En Hamburgo los Beatles contactaron con el rockero ingl¨¦s Tony Sheridan, que se rodea de ellos (con Best, sin Stu) para su ¨¢lbum My bonnie. En dos canciones Sheridan se echa un lado y deja el primer plano a los de Liverpool: una es este Ain't She sweet, que canta Lennon (la otra es la instrumental Cry for a shadow). El ¨¢lbum sali¨® en 1962 y lo firman Tony Sheridan and The Beat Brothers. Dos a?os despu¨¦s, en plena beatleman¨ªa, se reedit¨® con otros cr¨¦ditos: ahora eran The Beatles with Tony Sheridan.
Las noches en The Cavern... y Ringo. En su ciudad natal, los Beatles actuaron al menos 274 veces entre 1961 y 1963 en este s¨®tano de Mathew Street. Fue aqu¨ª donde se hizo la primera filmaci¨®n de The Beatles en directo de que se dispone: esta (muy editada) interpretaci¨®n de Some other guy, un tema de Richard Barret, en agosto de 1962. Ringo Starr sustituy¨® ese d¨ªa a Pete Best, todav¨ªa el titular, y alguien del p¨²blico grita: "?Queremos a Pete!". La formaci¨®n que har¨ªa historia est¨¢ lista. Ya apuntaban muy alto.
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