N¨²?ez de Balboa frente a la Historia
Pocos descubridores y exploradores han sido mejor tratados por la historiograf¨ªa y por los habitantes de los territorios que recorrieron
Una de esas raras coincidencias. Pocos descubridores y exploradores han sido mejor tratados por la historiograf¨ªa y por los habitantes de los territorios que recorrieron como Balboa; su nombre es el de una moneda de curso legal, es una ciudad y su imagen adorna el palacio presidencial de Panam¨¢; es el homenaje vivo a un personaje cinco siglos despu¨¦s de su venturoso avistamiento que se produjo el d¨ªa 25 de septiembre de 1513; fue un acontecimiento de los que se sucedieron en cascada sobre el Nuevo Mundo o las Indias (1492-1519).
1513 fue el a?o en que el mundo occidental arrib¨® al Pac¨ªfico oriental: Jorge Alvares por parte portuguesa y procedente de Malaca alcanz¨® la isla de Lintin [Nei Lingding] en el r¨ªo de las Perlas, en la China Ming, entre Macao y Hong Kong. 1513 fue el a?o en que Vasco N¨²?ez de Balboa se asom¨® al Mar del Sur, en el golfo de San Miguel, el d¨ªa de esa festividad, curiosamente, cerca de las islas de las Perlas, en la otra orilla del mismo oc¨¦ano. Entre ellos mediaba una inmensa frontera que fue explorada exclusivamente por naves espa?olas a lo largo del siglo XVI haciendo que se hablara de ¡°lago espa?ol¡±, con cierta jactancia no exenta de humor, refiri¨¦ndose al mayor de los oc¨¦anos, de forma an¨¢loga a como se habl¨® de ¡°cruzar el charco¡± como atravesar el Atl¨¢ntico.
El mundo occidental ten¨ªa as¨ª noticias de un gran oc¨¦ano hasta entonces intuido, y aquel a?o alcanzado, pero al que hab¨ªa que penetrar de forma n¨¢utica. Portugal lo hab¨ªa hecho con una tenacidad mantenida durante un siglo largo, siguiendo una orientaci¨®n costera y apoy¨¢ndose en la organizaci¨®n india y, finalmente, en juncos chinos; en aquel entorno concluy¨® su expansi¨®n (Brasil aparte). Las naves de Castilla con un empe?o de dos d¨¦cadas en busca de un paso accesible a la riqueza del oriente, sorteando un formidable obst¨¢culo (las Indias) y llegando a la convicci¨®n que el estorbo era m¨¢s importante que el objetivo aunque sin renunciar a ¨¦l y estableci¨¦ndose en Filipinas. El protagonismo espa?ol, la acci¨®n vistosa de Balboa (1513) y la empresa Magallanes-Elcano (1520), la del ¨¦xito; antes y despu¨¦s prosigui¨® la denominada ¡°b¨²squeda del paso¡± a todas las latitudes, con mayor ¨¦xito en sus consecuencias que en sus logros.
Balboa naci¨® en Jerez de los Caballeros (Badajoz) hacia 1475 y se educ¨® como paje en Moguer; con 25 a?os se enrol¨® en la expedici¨®n de Rodrigo de Bastidas y fue a reconocer la costa caribe?a de lo que hoy es Colombia y Panam¨¢
Vida y hechos en Indias. Balboa naci¨® en Jerez de los Caballeros (Badajoz) hacia 1475 y se educ¨® como paje en Moguer; con 25 a?os se enrol¨® en la expedici¨®n de Rodrigo de Bastidas y fue a reconocer la costa caribe?a de lo que hoy es Colombia y Panam¨¢. Sus beneficios los invirti¨® en una propiedad agropecuaria de La Espa?ola que le condujo m¨¢s que a la ruina a cargarse de numerosas deudas. Fue entonces cuando se crearon sendas gobernaciones en aquel territorio, Nueva Andaluc¨ªa (para Alonso de Ojeda) y Veragua (para Diego de Nicuesa); ambos gobernadores fracasaron en un medio de m¨¢xima dificultad por el terreno, la climatolog¨ªa y la presencia de indios flecheros que usaban venenos particularmente activos.
Fern¨¢ndez de Enciso parti¨® desde Santo Domingo en apoyo de Ojeda y, huyendo, Balboa con su perro (Leoncico) se arriesg¨® como poliz¨®n; la operaci¨®n le sali¨® bien, su experiencia como baquiano le salv¨® del abandono y poco a poco gan¨® la confianza de los hombres frente a los gobernadores en precario y los auxilios que no llegaban.
A indicaciones suyas el ef¨ªmero poblado de San Sebasti¨¢n fue abandonado para erigirse el de Santa Mar¨ªa la Antigua del Dari¨¦n sobre terreno m¨¢s f¨¦rtil y provisto de agua potable; hab¨ªan superado un enfrentamiento con el cacique Cemaco (con el consiguiente bot¨ªn).
Tras el sucesivo alejamiento de quienes ten¨ªa por encima, Balboa realiz¨® la primera operaci¨®n que har¨ªa famoso a cort¨¦s en Villarrica: formar un cabildo abierto al que entregar el poder y que nombr¨® dos alcaldes (uno era Balboa) y poco despu¨¦s gobernador de Veragua. La primera actuaci¨®n fue el juicio a Fern¨¢ndez de Enciso que sali¨® bien parado (encarcelado y confiscado, fue enviado a La Espa?ola en libertad). Puente de plata para un enemigo.
Escribi¨® (1513) al Rey una carta (relato) y pidi¨® refuerzos (armas, materiales, provisiones y baquianos) para dominar regi¨®n tan rica; le fueron negados pero se prepar¨® la mayor armada que hab¨ªa ido a Indias
El baquiano descubridor. Esta caracter¨ªstica de adaptaci¨®n al medio f¨ªsico y social, permiti¨® a Balboa negociar con los diferentes grupos, establecer alianza con algunos, someter por la fuerza a otros y, siempre, obtener informaci¨®n sobre el entorno; algunos indios se mostraron colaboradores y la asociaci¨®n llev¨® a actitudes hospitalarias, matrimonios mixtos, etc., a averiguar la existencia de otro oc¨¦ano, el origen del oro y perlas que ve¨ªa en los naturales y que en buena proporci¨®n ya hab¨ªa obtenido por rescate o por bot¨ªn; tambi¨¦n prepar¨® algunas sementeras y construy¨® boh¨ªos que poder habitar. Escribi¨® (1513) al Rey una carta (relato) y pidi¨® refuerzos (armas, materiales, provisiones y baquianos) para dominar regi¨®n tan rica; le fueron negados pero se prepar¨® la mayor armada que hab¨ªa ido a Indias. Era el momento de ampliar horizontes geogr¨¢ficos, regres¨® a Santa Mar¨ªa la Antigua en busca de refuerzos pero para entonces ya se estaba buscando el paso por el r¨ªo Atrato.
Los informantes ind¨ªgenas leales le proporcionaron gu¨ªas (fundamental a trav¨¦s de la densa vegetaci¨®n y agreste terreno) y porteadores (imprescindibles). El trayecto les llev¨® por mar hasta tierras de Careta y, con sus hombres, vencieron a Ponca, logrando su alianza o sometimiento, remontaron la frondosa sierra del istmo hasta tierras de Torecha (el cacique muri¨® en la refriega) y sus gentes se sometieron y acogieron a quienes carec¨ªan de fuerzas para proseguir. Balboa y un grupo reducido ascendieron a una cumbre desde la que pod¨ªa verse el nuevo oc¨¦ano mirando hacia el Sur. El descenso fue r¨¢pido y en dos d¨ªas se hallaban en sus aguas. Era el d¨ªa de San Miguel (29, septiembre de 1513) y ese fue el nombre impuesto al golfo del Mar del Sur; la ceremonia de toma de posesi¨®n se efectu¨® con todas las formalidades escenogr¨¢ficas y jur¨ªdicas.
El retorno, por otra ruta ten¨ªa por finalizar aprovechar la euforia para hacer nuevas exploraciones en el istmo, obtener bot¨ªn y hacer nuevos aliados o derrotados. Lleg¨® a Santa Mar¨ªa (19, enero, 1514). Iba a coincidir el c¨¦nit del personaje con su fulminante ca¨ªda.
Y el gobernador. El Rey nombr¨® a un gobernador efectivo de la regi¨®n ¡ªCastilla del Oro¡ª Pedrarias D¨¢vila que se present¨® con la flota m¨¢s lucida arribada a Nuevo Mundo (117 naves que llevaban un obispo con todo su s¨¦quito, el gobernador con toda una peque?a corte, mujeres, vestimenta lujosa e inconveniente. Pero sobre todo unos 1.500 hombres que har¨ªan insoportable la vida en el istmo; no hab¨ªa m¨¢s residencia que algunos pocos boh¨ªos, no hab¨ªa alimento para tantos, tanto tiempo; el equilibrio precario logrado por Balboa fue desbaratado por la irrupci¨®n de tanto inadaptado. La muerte asol¨® a la colonia hispana; los nativos tambi¨¦n sufrieron lo suyo.
La relaci¨®n del baquiano y el gobernador fue cambiando desde cortes¨ªa a alianza para concluir en enfrentamiento, juicio de residencia, detenci¨®n por Francisco Pizarro, juicio, condena y muerte de Balboa en Acla (15, enero, 1519) el mismo a?o que su enemigo, el gobernador Pedrarias, fundaba nada menos que la ciudad de Panam¨¢, puerto y puerta del Pac¨ªfico.
Balboa tras una acci¨®n en el Caribe, se radic¨® en la Espa?ola, se arruin¨®, se transform¨® en poliz¨®n y es descrito como gran descubridor, con esp¨ªritu de iniciativa; muri¨® joven y esa es la receta para que se hable bien de uno
Un balance. Balboa ha sido el mejor tratado por la historiograf¨ªa; nunca otro fue peor tratado que Pedrarias. Algunas razones estriban en el tratamiento recibido por los primeros escritores de Indias (Fern¨¢ndez de Oviedo, Las Casas y el primer historiador, Herrera) y todos cuantos han escrito despu¨¦s. Es la imagen de la excelencia proyectada sobre la sombra intensa de su enemigo Pedrarias que se lleva los peores calificativos expresados sin bondad alguna.
En verdad no hab¨ªa tanta diferencia entre ambos; los m¨¦todos, actitudes, procedimientos, recursos y resultados fueron an¨¢logos. El contraste estaba en el n¨²mero de desembarcados con Pedrarias y el impacto que no pod¨ªan dejar de producir en el istmo para sobrevivir. Ambos tuvieron un origen no muy desigual, los dos una formaci¨®n de paje, los dos buena imagen, valent¨ªa, valor, ambici¨®n, audacia y capacidad de colonizaci¨®n, pero Pedrarias llegaba con un importante curr¨ªculum, experiencia guerrera, con ¨¦xitos, premios y prebendas y un matrimonio relacionado con la Corte.
Balboa tras una acci¨®n en el Caribe, se radic¨® en la Espa?ola, se arruin¨®, se transform¨® en poliz¨®n y es descrito como gran descubridor, con esp¨ªritu de iniciativa; muri¨® joven y esa es la receta para que se hable bien de uno. Pedrarias era m¨¢s cortesano y cumplidor de las ordenes reales. Se ha afirmado que el primero era un luchador por la libertad, un defensor del poder popular; mientras que el gobernador representaba al poder real. Los primeros historiadores y el romanticismo y quienes han seguido esas fuentes han creado una imagen contrapuesta de los dos protagonistas.
Babelia
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