El Quijote m¨¢s rabiosamente actual llega con Ron Lal¨¢

-?Yelmo!- exclama Don Quijote, entusiasmado con el hallazgo que porta sobre su cabeza.

- ?Bac¨ªa!- le discute el sensato Sancho Panza que ve que a todas luces lo que su se?or lleva es objeto de barber¨ªa, la vasija c¨®ncava que sirve para remojar la barba.

-?Yelmo!

-?Bac¨ªa!

Don Quijote le dirige una mirada furiosa a su escudero¡­

-?Baciyelmo!- termina por ceder Sancho Panza resignado.

Pilas de libros se agolpan sobre el escenario y los papeles se cosen a la tela que forma su fondo¡­ El suelo es un tapiz compuesto de cientos de manuscritos desechados y arrugados. En ese espacio de biblioteca imaginaria del Teatro Pav¨®n Miguel de Cervantes escribe El Quijote mientras el hidalgo Alonso Quijano vive sus haza?as como caballero andante La compa?¨ªa de teatro Ron Lal¨¢ ha trasladado la novela m¨¢s c¨¦lebre de las letras en espa?ol a un juego esc¨¦nico que nos pregunta: ?Qui¨¦n es m¨¢s real, Cervantes o Don Quijote? ?Qui¨¦n sue?a y qui¨¦n escribe? En un lugar del Quijote. Versi¨®n libre de la novela de Cervantes, una coproducci¨®n de Ron Lal¨¢ y la Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico dirigida por Helena Pimenta, se representa desde este jueves hasta el 5 de enero.

Ron Lal¨¢ duplica los planes en los que se desarrolla la acci¨®n. Tenemos por una parte a Miguel de Cervantes, que ejerce como autor sobre las tablas y as¨ª explica, realiza notas a pie de p¨¢gina, hace saltos temporales y espaciales. Podremos ver su faceta humana desde sus crisis de identidad hasta sus recuerdos ¡°Un veterano de guerra frustrado como humanista, como soldado, como autor teatral, como viajero¡­ trasunto de toda una ¨¦poca¡±, lo presenta la compa?¨ªa.

Y esta propuesta de realidad se entreteje con las fantas¨ªas del hidalgo lector convulsivo de libros de caballer¨ªas que se lanz¨® a aventuras llevado por su imaginaci¨®n. El caballero y el escudero llegan a galope desde el patio de butacas como se?al de que pertenecen al pueblo, y son su patrimonio.

Pero, ?c¨®mo han viajado de las p¨¢ginas de la novela a la acci¨®n teatral? El primer acercamiento por lo que dice Yayo C¨¢ceres director del montaje del Quijote ha sido el de la humildad. Una adaptaci¨®n del Quijote, asegura, ¡°ser¨¢ siempre pelear contra los molinos de viento¡­ convertir la mejor novela de la literatura universal en una obra de teatro es de por s¨ª una batalla perdida¡±. El poeta, dramaturgo y fil¨®logo ?lvaro Tato se ha hecho cargo de la direcci¨®n literaria y as¨ª explica su tarea: ¡°Operar a la novela a coraz¨®n abierto para quedarnos con su esencia que suene a oro, que choque al o¨ªdo actual pero¡­ que se entienda y funcione como una lengua activa¡±. Se trata de una apuesta por la s¨ªntesis y el dibujo de un trazo, dicen, que pueda completar el espectador con su imaginaci¨®n y que le deje despu¨¦s el deseo de leer el libro. O de releerlo.

Las escenas se han escrito en verso cl¨¢sico y se emplean romances, redondillas, pareados¡­ para dotar de ritmo al montaje. La versi¨®n quiere llevar las caracter¨ªsticas de la novela (parodia, meta-ficci¨®n, polifon¨ªa¡­) al lenguaje teatral de la compa?¨ªa. ¡°Ha sido un privilegio salvaje¡±, prosigue Tato, ¡°elegir de tanto¡±. ¡°Nos hemos encontrado en El Quijote un thriller, un musical, una road movie¡­¡±. Y han deseado ¡°ser cervantinos hasta el final, que suene con respeto, pero no con reverencia¡±.

Pero es que adem¨¢s En un lugar del Quijote. Versi¨®n libre de la novela de Cervantes lleva el sello inconfundible de Ron Lal¨¢, la mezcla con el humor y la m¨²sica en directo que ayuda, cuenta Miguel Magdalena, director musical y quien es adem¨¢s Barbero, Vizca¨ªno, Cabrero, Micomicona, Teresa Panza, Tom¨¦ Celial y Mono, ¡°a concluir escenas, a ver lo que ve el Quijote o mantener el esp¨ªritu po¨¦tico de la historia¡±. La que acompa?a al montaje contrasta con el tratamiento cl¨¢sico del lenguaje en la obra porque se construye a partir de sintetizadores, pads electr¨®nicos de percusi¨®n, sistemas de sintetizaci¨®n mido aplicados a guitarras y grabaciones de lo que suena en el escenario que se van superponiendo como capas. Tambi¨¦n est¨¢n los instrumentos tradicionales como las guitarras o los de percusi¨®n menor.

La versi¨®n quiere traducir las caracter¨ªsticas de la novela (parodia, meta-ficci¨®n, polifon¨ªa¡­) al lenguaje teatral de la compa?¨ªa

Helena Pimenta, directora de la Compa?¨ªa Nacional de Teatro Cl¨¢sico, alaba el trabajo de Ron Lal¨¢, con quien emprende esta coproducci¨®n dentro del sello Mi primer cl¨¢sico que comenz¨® el a?o pasado con la intenci¨®n de que las obras cl¨¢sicas lleguen a un p¨²blico diverso, tambi¨¦n en edad, y que esas historias se lleven a escena de una manera divertida. Ron Lal¨¢ no lleva camino de decepcionar. Pimenta sostiene que la compa?¨ªa ¡°deja ese poso de disfrute y de reflexi¨®n¡­¡± ¡°Me recuerda al teatro de antes, independiente y apasionado¡±, a?ade.

Un salto desde el libro a la escena a la pantalla. Ron Lal¨¢ ha rodado un documental en el que se narra c¨®mo se lleg¨® hasta En un lugar del Quijote. Versi¨®n libre de la novela de Cervantes.

La compa?¨ªa Ron Lal¨¢ inici¨® su trayectoria en 1996 y se distingue por la combinaci¨®n de la m¨²sica en directo, poes¨ªa y un peculiar uso del humor sobre la escena. Comenzaron con los recitales-conciertos llevados por un poeta-rapsoda y el conjunto musical. Las universidades, las salas de concierto y los caf¨¦s teatro de Madrid fueron durante a?os testigos de montajes que llevan a sus espaldas un aluvi¨®n de premios. Desde 1998 son cuatro los miembros que componen lo que ellos describen como ¡°n¨²cleo estable de los ronlaleros¡±: Juan Ca?as, Rodrigo D¨ªaz, Miguel Magdalena y ?lvaro Tato y se inician las representaciones en el Caf¨¦ Libertad 8 los ¨²ltimos domingos de cada mes. Yayo C¨¢ceres se incorpor¨® en 2001 como director de escena y ahora, tras otros cambios y la salida de Rodrigo D¨ªaz, C¨¢ceres forma con Juan Ca?as, Miguel Magdalena, ??igo Echevarr¨ªa Daniel Rovalher y ?lvaro Tato el coraz¨®n de Ron Lal¨¢. Su espect¨¢culo m¨¢s exitoso hasta la fecha ha sido Siglo de oro, siglo de ahora (Fol¨ªa) que obtuvo el Premio Max 2013 Mejor Empresa/Producci¨®n Privada de Artes Esc¨¦nicas.