Run Run Shaw, mecenas del cine en Hong Kong
El productor internacionaliz¨® las pel¨ªculas de artes marciales, pero nunca pudo contratar a Bruce Lee para sus pel¨ªculas
Es dif¨ªcil entender el cine de artes marciales sin reparar en una de sus figuras clave, el productor Run Run Shaw. El magnate del entretenimiento hongkon¨¦s y fil¨¢ntropo populariz¨® las pel¨ªculas donde los protagonistas exhib¨ªan sus dotes en el kung-fu y convert¨ªan sus extremidades en peligrosas armas de matar. El g¨¦nero traspas¨® fronteras y alcanz¨® altas cotas de popularidad en los a?os sesenta y setenta. Shaw falleci¨® el pasado martes en su casa de Hong Kong a la edad de 106 a?os.
Su estudio de cine, Shaw Brothers, produjo m¨¢s de 1.000 pel¨ªculas durante m¨¢s de cinco d¨¦cadas, desde musicales y comedias rom¨¢nticas hasta cintas de acci¨®n. Con producciones como el filme de kung-fu El espadach¨ªn manco o el musical El Reino y la Belleza, su estudio lleg¨® en su d¨ªa a contar con m¨¢s de la mitad de los ingresos de las taquillas asi¨¢ticas. Pero Shaw nunca pudo atraer a la estrella m¨¢s rutilante del g¨¦nero: Bruce Lee. El productor no consigui¨® que el actor chino-estadounidense firmase para protagonizar una pel¨ªcula en su compa?¨ªa, ya que este prefiri¨® unirse a Golden Harvest, la competencia.
Shaw tambi¨¦n invirti¨® en algunas pel¨ªculas del oeste y co-produjo Blade Runner, en donde el director Ridley Scott mostr¨® una visi¨®n futurista con toques asi¨¢ticos. Su legado est¨¢ patente en obras de grandes cineastas contempor¨¢neos como Quentin Tarantino o Ang Lee.
Nacido en Noviembre de 1907 en Ningbo, en la provincia costera del este de China, Shaw era el sexto de siete hermanos. Se mud¨® a Shangh¨¢i de ni?o, donde su padre era un pr¨®spero comerciante textil. A los 19 a?os, se uni¨® a sus hermanos Run Je y Run Me en Singapur, donde el primero ten¨ªa un estudio de cine mudo. Poco despu¨¦s comenzaron a comprar cines y se expandieron a Malasia. En sus salas proyectaban pel¨ªculas hechas en Shangh¨¢i, que por aquel entonces era el centro del mundo cinematogr¨¢fico chino.
La familia produjo su primera pel¨ªcula en 1924, a la vez que empez¨® a importar pel¨ªculas extranjeras. A mediados de la d¨¦cada de los a?os treinta, eran due?os de m¨¢s de 100 salas de cine.
La II Guerra Mundial y la revoluci¨®n comunista destruyeron la industria cinematogr¨¢fica de Shangh¨¢i. Frustrados con las pel¨ªculas chinas disponibles, la familia traslad¨® su base de producci¨®n a Hong Kong durante la d¨¦cada de los cincuenta y establecieron Shaw Brothers. Durante su apogeo, en los a?os setenta, llegaron a producir hasta 50 pel¨ªculas al a?o.
Tras la muerte de su hermano en 1985, Shaw ampli¨® su inter¨¦s a la televisi¨®n, y se convirti¨® en un magnate de la publicaci¨®n y el inmueble. A medida que su fortuna fue creciendo, Shaw don¨® generosas cantidades a hospitales, orfanatos y universidades de Hong Kong, por lo que fue nombrado caballero por la reina brit¨¢nica Isabel II y recibi¨® numerosas menciones p¨²blicas de gratitud por parte de las autoridades chinas. Estableci¨® el Premio Shaw en Hong Kong en 2004, que reconoce a cient¨ªficos de todo el mundo que investigan sobre astronom¨ªa, matem¨¢ticas y medicina.
Shaw disfrut¨® del glamour estrafalario del mundo de los medios asi¨¢ticos que ayud¨® a crear. Presidi¨® sus empresas desde un estridente palacio en Hong Kong, donde albergaba su colecci¨®n de Rolls Royce, y le gustaba ser fotografiado con una camisa negra tradicional haciendo tai-chi.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.