El coleccionista alem¨¢n Gurlitt ten¨ªa 60 cuadros m¨¢s en Salzburgo
El anciano ha confesado tener lienzos de Monet, Renoir y Picasso, entre otros, en su vivienda de Austria
El tesoro art¨ªstico del anciano Cornelius Gurlitt constaba de otras 60 obras de arte, adem¨¢s de las alrededor de 1.200 que le fueron decomisadas en 2012 de su vivienda de M¨²nich. Su portavoz Stephan Holzinger explic¨® el martes que estas obras, desconocidas hasta ahora, se encontraban en la casa que Gurlitt mantiene cerrada en un barrio acomodado de la ciudad austriaca de Salzburgo. Aclar¨® Holzinger que se cuentan entre ellas piezas de Claude Monet, Auguste Renoir y Pablo Picasso. Ya est¨¢n en "un lugar seguro", a la espera de que se investigue su procedencia. Dice el portavoz que no hay indicios de que ¨¦sta sea ilegal.
Se sospecha que entre 600 y 977 de las 1.200 obras de diversos formatos y autores que el anciano de 81 a?os almacen¨® durante d¨¦cadas en su piso particular de M¨²nich pueden provenir del robo de cuadros perpetrado por los nazis. Muchos coleccionistas y galeristas de arte jud¨ªos perdieron o tuvieron que malvender sus obras por la persecuci¨®n del r¨¦gimen de Adolf Hitler. El padre de Cornelius Gurlitt, Hildebrand, fue uno de los pocos marchantes que obtuvieron permiso de los nazis para tratar con lo que denominaban "arte degenerado", robado o no.
La fiscal¨ªa de Augsburgo orden¨® en 2012 el registro de la vivienda muniquesa de Gurlitt, a quien unos funcionarios de Aduanas hab¨ªan sorprendido en 2010 cuando regresaba en el tren r¨¢pido que une la capital b¨¢vara con Z¨²rich, en Suiza, con miles de euros en el bolsillo. A finales de 2013, el hallazgo de su colecci¨®n oculta dio la vuelta al mundo. Se habl¨® al principio de casi mil millones de euros en obras de Otto Dix, Picasso, Max Beckmann o Marc Chagall. M¨¢s tarde se supo que una parte significativa de aqu¨¦l tesoro eran grabados o dibujos. As¨ª y todo, la colecci¨®n Gurlitt fue una de las mayores sorpresas art¨ªsticas de los ¨²ltimos a?os. Los fiscales investigan a Gurlitt por presuntos delitos de fraude fiscal y apropiaci¨®n indebida.
El secretismo de las autoridades b¨¢varas tras su hallazgo de 2012 sorprendi¨® incluso a la canciller Angela Merkel, que en 2013 pidi¨® a los fiscales que aceleren la investigaci¨®n para dilucidar si las piezas tienen procedencia ileg¨ªtima. Tambi¨¦n el Gobierno de Estados Unidos y las comunidades jud¨ªas alemanas presionaron para que se agilicen las pesquisas. Los investigadores han publicado desde entonces en internet unas 600 obras de arte de la colecci¨®n, para que los descendientes de los posibles damnificados, hoy diseminados por el mundo, puedan investigar si podr¨ªan pertenecerles.
Gurlitt, esquivo con la prensa y con los jueces, dijo en una entrevista al semanario Der Spiegel que no entregar¨¢ una sola obra voluntariamente. Seg¨²n diversos medios, est¨¢ siendo atendido en diversos hospitales b¨¢varos por considerables problemas de salud. Las autoridades le han designado un asesor legal, bajo cuya supervisi¨®n se han puesto el martes sus sesenta obras de Salzburgo en un lugar a prueba de robos o asaltos.
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