Fallece Josep Maria Subirachs, el escultor que se atrevi¨® a medirse con Gaud¨ª
El artista fue el art¨ªfice del pol¨¦mico conjunto escult¨®rico de la fachada de la Pasi¨®n de la Sagrada Familia
Admirador del arquitecto Antoni Gaud¨ª, no dud¨® en emularlo e instalarse en 1986 en la Sagrada Familia en una modesta vivienda durante veinte y dos a?os, el tiempo que tard¨® en elaborar m¨¢s de un centenar de enormes esculturas hier¨¢ticas, geom¨¦tricas y angulosas, de aspecto rugoso e inacabado para realizar la Fachada de la Pasi¨®n en la que representa la muerte y resurrecci¨®n de Jes¨²s, adem¨¢s de cuatro puertas de bronce. Fue la obra cumbre del escultor, pintor, grabador, escen¨®grafo y cr¨ªtico de arte?Josep Maria Subirachs Sitjar (Barcelona, 1927) que falleci¨® el lunes a los 87 a?os, el ¨²ltimo acto de una larga enfermedad neurodegenerativa que le hab¨ªa acompa?ado en sus ¨²ltimos a?os y que le hab¨ªa obligado a abandonar la pr¨¢ctica de la actividad art¨ªstica en 2010.
Su intervenci¨®n en el templo expiatorio levant¨® tal controversia que expertos y ciudadanos se dividieron entre los que consideraban que hab¨ªa que acabar el edificio o los que, por el contrario, aseguraban que era un atentado contra la obra de Gaud¨ª y no dudaron a promover una manifestaci¨®n en julio de 1990 en la que particip¨® gran parte de los intelectuales catalanes del momento. Algunos aseguraron que la decisi¨®n de encargarle las obras fue algo m¨¢s ideol¨®gico que art¨ªstico. Sorprendido, el escultor asegur¨®: ¡°Las pol¨¦micas pasan y las obras quedan¡±. El mismo hab¨ªa firmado en 1965 un manifiesto en contra de la continuaci¨®n de las obras en el templo, en el que participaron arquitectos como Le Corbusier. Hoy en d¨ªa, su fachada es el primer impacto que reciben los millones de personas que visitan la bas¨ªlica al a?o, ya que el recorrido comienza delante de esta enorme escultura de esculturas.
De la est¨¦tica mediterr¨¢nea noucentista y su admiraci¨®n por el escultor Ar¨ªstides Maillol, evolucion¨®, tras visitar Par¨ªs y B¨¦lgica, entre 1954 y 1956, hacia el expresionismo m¨¢s formal y, tras abandonar la figuraci¨®n, llegando a la abstracci¨®n en la que produjo sus ¡°arquitecturas interiores¡± en la que mezcla texturas y cromatismo y desarrollando un lenguaje simb¨®lico a trav¨¦s de un universo personal y reconocible por todo el mundo.
Desde Forma 212 (1957), la primera obra abstracta emplazada en un espacio p¨²blico en Barcelona, tal y como recordaba ayer el cr¨ªtico de arte Daniel Giralt-Miracle, que no duda en calificarlo ¡°como hombre clave del siglo XX en la escultura¡± y un aut¨¦ntico revolucionario. En 1960 conoci¨® la primera pol¨¦mica tras la instalaci¨®n de su obra Evocaci¨®n marinera en la Barceloneta. Ese mismo a?o cre¨® para el Santuario de la Virgen del Camino de Le¨®n 13 monumentales figuras de bronce para la fachada, adem¨¢s de sus puertas, consideradas un hito en la renovaci¨®n art¨ªstica de Espa?a en el siglo XX. Su gran explosi¨®n art¨ªstica se produce a partir de los a?os cincuenta y sesenta del siglo pasado y se prolonga durante toda la segunda mitad del siglo pasado, en las que instal¨® sus obras en medio mundo: Estados Unidos, M¨¦xico, B¨¦lgica, Se¨²l, adem¨¢s de un buen n¨²mero de ciudades de Espa?a y, sobre todo, en Barcelona, ciudad que ¡®sembr¨®¡¯ son sus esculturas, repartidas en espacios p¨²blicos de la ciudad, como la Pla?a de Catalunya en la que levant¨® un momento al presidente de la Generalitat Francesc Maci¨¤ en 1991, pero tambi¨¦n en fachadas e interiores de entidades bancarias y edificios oficiales, como el Ayuntamiento, la Generalitat o el Palacio del Lloctinent, sede del Archivo de la Corona de Arag¨®n. Una proliferaci¨®n de obras que llev¨® a algunos sectores m¨¢s cr¨ªticos a calificarlo como el escultor ¡®oficial¡¯ de los diferentes gobiernos nacionalistas de Jordi Pujol.
Los ¨²ltimos a?os de su vida se han visto ensombrecidos por la paralizaci¨®n definitiva de un museo que hab¨ªa proyectado en Barcelona, cerca del Museo Picasso, la fundaci¨®n Caixa Pened¨¨s, para el que el escultor hab¨ªa cedido 300 esculturas de su colecci¨®n personal, una parte considerable del cat¨¢logo razonado de 4.000 obras. El proyecto, pospuesto en varias ocasiones se archiv¨® con la desaparici¨®n de la obra social de las cajas causando una gran decepci¨®n en el autor, tal y como ha asegurado su familia en m¨²ltiples ocasiones.
¡°Mi escultura es representativa de mi ¨¦poca. Tiene la la calidad que debe tener. Pasar¨¢ a la historia del arte¡±, manifest¨® Subirachs en 2007, cuando comenz¨® a sufrir Parkinson y limit¨® sus apariciones en p¨²blico quedando confinado en su casa-estudio de la carretera de la Rabassada. Lo que s¨ª es seguro es que se le recordar¨¢ siempre como el autor que se midi¨® con Gaud¨ª en la Sagrada Familia, pero seg¨²n Daniel Giralt-Miracle, esta obra ¡°solo es la culminaci¨®n de su larga carrera, pero no su obra m¨¢s importante, ya que toda su trayectoria anterior es tan o m¨¢s importante. En Catalu?a no hay un escultor que haya hecho tanto trabajo como ¨¦l¡±.
Largamente reconocido y condecorado, en 1982 recibi¨® la Creu de Sant Jordi de la Generalitat y en 2003 el Departamento de Cultura produjo la exposici¨®n Subirachs. Vol¨²menes, texturas y s¨ªmbolos. Obras de 1953 a 2003, que comisario su hija Judith que anunci¨® hace unos meses que estaban preparando una antol¨®gica en China, para finales de a?o. Hasta el mes que viene el Museo de Montserrat acoge una exposici¨®n del artista con 25 piezas escogidas representativas de cada etapa, hasta sus ¨²ltimos y m¨¢s desconocidos trabajos centrados en la geometr¨ªa y en la metaf¨ªsica. Algunas obras se exponen por primera vez.
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