Una noche mediocre en Sotheby¡¯s
La casa de subastas vende obra por 265 millones de euros en su sesi¨®n de arte contempor¨¢neo en Nueva York
La presi¨®n sobre Sotheby¡¯s fue intensa anoche en Nueva York. Se not¨® en la subasta. Se sinti¨® en el rostro de Oliver Barker, vicepresidente de la compa?¨ªa en Europa, y subastador en la puja de arte contempor¨¢neo. La empresa se jugaba mucho. El d¨ªa anterior, su archirrival, Christie¡¯s, hab¨ªa cerrado la sesi¨®n m¨¢s cara de la historia al vender en solo dos horas 72 lotes por 744,9 millones de d¨®lares (unos 543,8 millones de euros). Un manantial de dinero a base de colocar bacons, richters, barnett newmans, rotkhos y basquiats. Un ¨¦xito impensable hace pocos d¨ªas, cuando el mercado parec¨ªa desfondarse exhausto de acumular r¨¦cord sobre r¨¦cord. En esta tesitura, Sotheby¡¯s estaba obligada a responder a Christie¡¯s.
Lo intent¨®, pero qued¨® a medio camino. En una subasta mediocre (su objetivo oscilaba entre 339,6 y 478 millones de d¨®lares) sum¨® unas ventas de 364,3 millones de d¨®lares (265,2 millones de euros). Este n¨²mero se sostiene, sobre todo, en cuatro artistas. Basquiat (23,6 millones de d¨®lares), Warhol (30,1), Koons (28,1) y Richter (28,7). Juntos, escogiendo su obra m¨¢s cara vendida, suman 110,5 millones de d¨®lares. Esto evidencia la dependencia de las casas de puja de los grandes nombres y como son los mismos creadores los que una y otra vez se revenden.
Pese a todo, la subasta empezaba con fuerza. Un excelente dibujo de gran tama?o (240 x 181,6 cent¨ªmetros) del californiano de adopci¨®n Raymond Pettibon se remataba en 1.325.000 d¨®lares (964.590 euros). Y poco despu¨¦s, una fotograf¨ªa de Cindy Sherman era adjudicada en 3.861.000 d¨®lares (2.810.780 euros). Es una de las 12 im¨¢genes que trazan su serie Centerfolds (1981). Sin duda uno de sus mejores trabajos. Ambas obras proceden de la colecci¨®n de Adam Sender, 45 a?os, un tibur¨®n de Wall Street en horas bajas. En lo profesional, el gestor de fondos de alto riesgo ha tenido que cerrar su fondo Exit Capital Management y, en lo personal, afronta un divorcio. Demasiados infortunios para que la colecci¨®n de arte no tuviera que pasar por caja. En total, Sender vendi¨® obra por valor de 44,6 millones de d¨®lares (32,5 millones de euros). Seguro que es un consuelo.
Pero pronto se empez¨® a percibir que iba a ser una noche compleja para Sotheby¡¯s y que sus resultados quedar¨ªan muy lejos de los de Christie¡¯s. Dos de los lotes estrellas de la subasta se remataban sin brillo. Uno de las mejores obras de la limitada producci¨®n de Jean-Michel Basquiat, Undiscovered Genius of The Mississipi Delta (Genio por descubrir del Delta del Misisipi), fechada en 1983, hallaba comprador en 23,6 millones de d¨®lares (17,2 millones de euros), cuando la casa manejaba una cifra superior para un lienzo de m¨¢s de cuatro metros. Y otra de las piezas de la que se esperaba mucho, Six Self Portraits (Seis autorretratos), de Andy Warhol, encontraba respuesta por 30,1 millones de d¨®lares (22 millones de euros). El precio estimado por Sotheby¡¯s (sin contar comisiones) oscilaba entre 25 y 35 millones de d¨®lares.
Tampoco le fue muy bien al publicitado Popeye, del omnipresente, en cualquier subasta de esta alcurnia, Jeff Koons. El cat¨¢logo describ¨ªa a la reluciente escultura de acero inoxidable de 1,98 metros del conocido personaje como la ¡°quintaesencia¡± del universo del artista, que ya saben que es un creador o que apasiona o bien trae al pairo. Ustedes eligen. En los predios de los dineros, la obra se vendi¨® por 28,1 millones de d¨®lares (20,5 millones de euros). Una cantidad astron¨®mica en la ¡°vida real¡±, pero no si hablamos de estas subastas y de esos artistas. Por ejemplo, el martes pasado Christie¡¯s colocaba, sin tanto ruido publicitario, uno de los conocidos trenes de Koons (Jim Beam-J.B Turner Train) por 33,7 millones de d¨®lares.
Tambi¨¦n se presagiaban grandes cifras procedentes de Big Electric Chair, un lienzo serigrafiado de gran formato (137 x 188 cent¨ªmetros) que Andy Warhol cre¨® entre 1967 y 1968. La imagen que traslada a la tela es potente. Una macabra silla el¨¦ctrica de la c¨¦lebre prisi¨®n de Sing Sing en Nueva York recorrida por tres tramas de colores (azul, verde y magenta). La obra la ha vendido el gestor de fondos de alto riesgo David Ganek, y es uno de los solo 14 cuadros de gran formato creados por Warhol con este tema. Adem¨¢s tiene un buen curr¨ªculo. Otras versiones se encuentran en el Pompidou de Par¨ªs, en la Fundaci¨®n Eli Broad (Los ?ngeles) y en la colecci¨®n Menil (Houston, Texas). Sin embargo, a pesar de tanta recomendaci¨®n, la pieza se cerraba por 20,4 millones de d¨®lares (14,9 millones de euros), cuando el precio estimado se mov¨ªa entre 18 y 25 millones.
Una de las escasas buenas noticias que deja la subasta es que un gran richter sigue hallando inter¨¦s y compradores. En este caso hay que llevar la mirada a Blau (Azul). Una tela monumental (300 x 300 cent¨ªmetros) del pintor alem¨¢n fechada en 1988. La puja por el lienzo se sustanci¨® en 28,7 millones de d¨®lares (21 millones de euros). Un n¨²mero con el que el vendedor andar¨¢ contento, ya que adquiri¨® el cuadro en Sotheby¡¯s en 2002 por 2,2 millones de d¨®lares. Eso s¨ª, el record del artista para una pintura abstracta contin¨²a lejos, en 35,4 millones de d¨®lares.
Sin embargo, en la letra peque?a que tiene toda subasta tambi¨¦n hay valiosas ense?anzas, como la buena acogida en precios de algunos artistas que adem¨¢s tienen un trabajo de gran profundidad. Los remates de Rosemarie Trockel (4.981.000 d¨®lares), Martin Kippenberger (5.541.000 d¨®lares), Mike Kelly (1.925.000 d¨®lares) y Sigmar Polke (4.197.000 d¨®lares) nos demuestran que a veces el arte, el mercado y la calidad de la obras, como los planetas, se alinean.
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