Y en Espa?a... cancelaciones y resbalones

En el caso de la negativa del Ministerio de Cultura al pago de las horas extraordinarias en la Compa?¨ªa Nacional de Danza llueve... sobre empapado, con el consiguiente riesgo de resbalar y tener lesiones. El problema no es exclusivo de la CND sino que afecta a otras de las llamadas "unidades de producci¨®n art¨ªstica" estatales y dependientes del Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas y de la M¨²sica (Inaem). Lamentablemente, la cuerda se ha tensado y est¨¢ a punto de romperse por su parte m¨¢s fr¨¢gil: los bailarines, que deber¨ªan ser, parad¨®jicamente, los mejor atendidos y cuidados por parte de la instancia gubernamental. Los conflictos por el pago de horas extraordinarias a t¨¦cnicos y bailarines se remontan a los tiempos de Mar¨ªa de ?vila, que finalmente tir¨® la toalla y fue repetidamente humillada en p¨²blico por todos, desde un electricista a un primer bailar¨ªn.

Despu¨¦s Ray Barra puso unos pa?os tibios que no sirvieron para nada y por fin a Nacho Duato le toc¨® la ¨¦poca de las vacas gordas, momento en que todos cobraban lo que les dio la gana y tan contentos.

La defectuosa y err¨¢tica aplicaci¨®n de un convenio general al ¨¢mbito art¨ªstico y de los artistas de la danza es el primer error que se arrastra y se camufla, se elude y se tapa desde hace a?os por los dirigentes de los dos colores pol¨ªticos que se reparten c¨ªclicamente el sill¨®n de mando, casi siempre con la anuencia de los directores art¨ªsticos. A ninguno se le ha ocurrido mirar m¨¢s all¨¢ de los Pirineos en la mod¨¦lica pol¨ªtica de retiros incentivados, reciclaje y una escalonada gradaci¨®n profesional que garantiza a esos artistas un presente y futuro dignos. Tampoco los bailarines han estado finos, mal asesorados y peor guiados por leguleyos de intereses espurios que han abocado las posibles negociaciones al desastre y las suspensiones. El Inaem se muestra con la sart¨¦n por el mango y beligerante; de hecho, un funcionario ha dejado caer que mejor en armon¨ªa, porque en el primer caj¨®n tienen dise?ado un ERE que aplicar¨ªan sin despeinarse la gomina carg¨¢ndose 35 a?os de sudor, logros y trabajo creador. En este punto lo preocupante no es solamente la cancelaci¨®n de una actuaci¨®n, sino la progresiva inestabilidad a la que se conduce al conjunto y sus artistas.